Les sale ‘caro’ el desabasto de agua a los ciudadanos en Mazatlán; compran garrafones y más garrafones
MAZATLÁN._ A doña Celia Calderón Zataráin, quien habita en un edificio de departamentos del Infonavit El Conchi, le ha salido caro el desabasto de agua en la ciudad.
Para sus necesidades básicas, asegura, el agua de garrafón que compra le queda corta.
“Tengo tres días (sin agua), ni para el baño hay”, dice, mientras la mañana de este lunes acompañaba a sus familiares a recolectar agua de la llave frente a dicho edificio, ubicado en la Avenida de las Torres.
En dicha llave empezó a salir el agua este lunes, pero todavía no llega con suficiente presión para que alcance a subir al tinaco en el techo del edificio.
La señora manifiesta que ante la falta de agua, en el caso de sus necesidades fisiológicas, se espera hasta llegar a su centro de trabajo.
“Pues ahí aguantándome las ganas hasta llegando al trabajo, ahorita ya tengo tres días (sin agua) y luego los baños están adentro de las casas, y ahorita le dije: échale la que está ahí, yo ayer me fui hasta el trabajo aguantándome”, refiere.
Doña Celia añade que se sabe que en los siguientes días va estar cayendo agua, pero que la presión se va a poner buena hasta el viernes, según lo que anunció el domingo la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Mazatlán.
Durante el tiempo que no ha tenido agua ha estado comprando el líquido purificado en garrafones, pero este lunes no había ni agua en la tienda, sostiene.
“He comprado garrafones y ahorita no hay ni agua en la tienda, le he estado echando 13 pesos diarios a la taza del baño, es lo que cuesta un garrafón”, expone Calderón Zataráin.
Precisa que en los tres días que lleva sin agua ha comprado tres garrafones con un costo de 13 pesos cada uno para las necesidades más elementales, no para lavar trastes, pues junto con sus familiares ha estado comiendo en platos desechables para no lavar la loza, y si se puede se van a comer a otro lado, lo que les implica gastar más dinero por fuera.
También expresa que no se ve que la Jumapam distribuya agua por medio de pipas.
“El servicio del agua es lo más necesario para el baño, para uno y para todo, es que también cuando llegan los recibos llegan cargados y que nos tengan así sin agua, estos recibos nos van a venir cargaditos y cuántos días ya tenemos sin agua, batallando y luego los calores, el agua es lo más necesario”, agrega.
“Nada más que nos dieran bien el servicio del agua y que fueran bien atentos con toda la comunidad para no estar batallando por los calores que han estado bien altos, uno ocupa enjuagarse el cuerpo para irse a trabajar, imagínese todo el día con las ganas de orinar, es que el agua es para todo”.
Manifiesta que en su centro de trabajo sí hay agua porque tienen aljibe y pipas.
Apenas este lunes empezó a salir agua de la llave de la parte baja del edificio en el que radican seis familias, algunas de entre cuatro a siete personas, por lo que la demanda de agua se incrementa.
“Es que el agua es para todos, la luz puede faltar, con un cartón me echo aire, pero el agua ocupo para tomar, para el baño y para todo”, reitera doña Celia.