Lando Norris sorprende en el Gran Premio de Miami

El británico Lando Norris acabó con la racha de Max Verstappen (Red Bull) en la temporada y conquistó en Miami el primer Gran Premio de su historia en la Fórmula 1.

Gran parte del sorpresivo triunfo del piloto de McLaren fue gracias a la aparición de un Safety Car en la pista del Autódromo Internacional de Miami. El auto de seguridad que Norris aprovechó fue generado por un choque entre Logar Sargeant y Kevin Magnussen, situación que vino a darle un giro inesperado a la carrera y que culminó con la victoria del piloto de McLaren.

Verstappen sólo pudo ser segundo y se dejó la segunda victoria de la temporada en una carrera, mientras que el monegasco Charles Leclerc (Ferrari) fue tercero, seguido de su compañero, el español Carlos Sainz.

Por su parte, el mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez nunca se pudo recuperar de un incidente en la largada que lo marcó para toda la carrera, misma que culminó en el quinto sitio.

Sin embargo, unas horas después de que culminó la carrera, la Fórmula 1 dio a conocer los resultados de la investigación realizada, en donde se le aplicó una sanción de cinco segundos a Sainz tras ser encontrado culpable de una colisión con Oscar Piastri.

Eso hizo que Checo Pérez subiera al cuarto puesto que ocupaba Sainz.

Todo transcurría según lo previsto para Verstappen, que era cuarto a expensas de que tres pilotos por delante pararan y le cedieran el liderato. El australiano Oscar Piastri (McLaren) y Sainz acababan de entrar a ’boxes’, dejando a Norris con un liderato momentáneo, pero el estadounidense Logan Sargeant (Williams) acabó en el muro de la curva tres y todo cambió.

Sargeant intentaba defender su posición con el danés Kevin Magnussen (Haas), que se abalanzó sobre Sargeant llegando a tocar el Williams, un monoplaza que se fue recto contra el muro abriendo un periodo de ’safety car’ que ofreció a Norris la opción de entrar a pista sin perder la primera plaza.

Tras retirar el coche, el británico se escapó en la salida relanzada y Verstappen ni siquiera tuvo opción de DRS. Esa diferencia abismal de coche que siempre había tenido el neerlandés respecto a los demás monoplazas la tuvo que sufrir en sus propias carnes ‘Mad Max’, que no pudo repetir la victoria de China y dejó a Norris, que acabó siete segundos sobre el tricampeón, celebrar la primera victoria de su carrera en Fórmula 1.