Se prepara Patricia Rodríguez para Concurso Nacional de Ballet
Ponerse mallas, zapatillas, subir al escenario y bailar ballet, produce en Patricia Rodríguez González, alumna de tercer año de preparatoria del Instituto Senda, una inmensa alegría y eso es lo que la motiva a seguir estudiando, prepararse: compartir esa felicidad con quienes la observan.
El ballet, dice, es lo que la llena. Gracias a éste, ha podido interpretar diversos personajes, como amiga de Clara en El Cascanueces, o la araña en Pulgarcita. Pero lo más importante la alegría de ser ella misma y compartir todas sus emociones.
“El ballet me gusta mucho, me encanta estar en el escenario y compartir la emoción y la felicidad que me da bailar”, asegura.
Patricia tiene 17 años, comenzó a bailar a los ocho años, cuando le pidió a su mamá que la inscribiera en clases y fue en la Escuela con Técnica Cubana de Ballet Karemia del Rey, con quien se formó.
Actualmente, está por terminar la preparatoria en el Instituto Senda, y sus planes son estudiar la carrera como bailarina, en Portugal.
Para tener una buena técnica, dedica cinco horas por semana a su entrenamiento, ha participado en dos concursos de ballet, uno fue en Veracruz y otro en Guadalajara, de los cuales ha tomado una experiencia importante que la motivaron a hacer una audición para el Concurso Nacional de Ballet Infantil y Juvenil, que se llevará a cabo en la Ciudad de México.
Fue seleccionada y ahora tiene un nuevo reto: dar lo mejor de sí en el concurso y lograr una medalla.
“En abril hice la audición, para el concurso nacional en México y quedé seleccionada, será del 1 al 8 de julio”, cuenta.
“Van por rondas, llegas el primer día para que te registres, inicia el 3, haces una clase de ballet, luego tu variación a un solo, de ahí te califican y si quedas, vas a la siguiente ronda.
Al siguiente día hay otra clase de ballet y presentas otra variación, te califican y si quedas pasas a la siguiente ronda. El tercer día es el último, hay otra clase, otra variación y de ahí te vas a la final y vas para medallas”.
Patricia presentará obras de ballet contemporáneo, que aún está por elegir, y dos clásicas de la Bayadera, una es Gamzatti y la otra Las sombras de la Bayadera, obra del coreógrafo francés Marius Petipa con la música de Ludwig Minkus.
Para cumplir sus sueños de ser una bailarina profesional de ballet, ha contado con el apoyo de sus padres. El año pasado fue en el verano a hacer un curso de dos semanas a Portugal, y la aceptaron para estudiar ahí, una vez que termine la preparatoria, lo que está a punto de suceder.
“Me pone muy feliz bailar y creo que la gente siente esa felicidad cuando ve una obra en el escenario”.