Soltar lo que no se requiere, para recibir un 2024 en abundancia

Hacer una pausa, darse cuenta de lo que fue útil y funcional, y también de lo que ya no se necesita y cambiarlo, es vital para iniciar un nuevo año.

Replantearse un nuevo punto de partida requiere de espacio físico, como energético, mental, emocional y espiritual. No solamente limpiar el entorno, sino depurar creencias, pensamientos y actitudes que en algún tiempo fueron útiles, pero que ya no funcionan.

La terapeuta Yamileth Garza Bayliss, especialista en Constelaciones Familiares, Thetahealing, Tameana, Terapia Respuesta Espiritual, Barras de Access Consciousness y Cristales, marcó estas ideas para iniciar bien el 2024.

“Yo recuerdo que una de mis maestras nos decía limpien primero el closet, saquen todo lo que ya no usan; las que quieren marido, hagan un espacio para que llegue la pareja, pregunten qué clase de persona quieren en su vida y transfórmense en esa persona, porque no tiene caso pedir algo con lo que no empatan”.

En esta limpieza energética se pueden aplicar distintas técnicas de armonización energética, como Feng Shui, numerología, cristaloterapia, entre otras.

“En el Feng Shui hay reglas fundamentales, pero yo percibo la otra parte que es muy intuitiva, no todo funciona de la misma manera para todos. Lo que armoniza contigo es lo que tú en ese momento necesitas”, asegura Garza Bayliss.

“Cuando eliges la ropa que te vas a poner, la piensas para un evento específico y si no tienes un evento específico, le haces caso al cuerpo, qué se te antoja ponerte ese día, también puedes seguir el protocolo de la mitología y los ángeles y vas a encontrar que cada uno vibra con un color distinto. Pero cada quien está viviendo su vida, muchas personas no tienen un conocimiento específico, y se trata de hacerle caso al maestro interno y vibrar con eso”.

No se trata de vivir de modo autómata, dar por hecho que la vida está sucediendo y que pase por ti, señala. Lo importante es hacer la pausa consciente para auto revisarse.

Despedirse con gratitud

Lo primero es hacer espacio, visualizar qué quieres y empezar a hacer esa transformación.

“Así como revisas un cajón de la cocina, con uno tienes para darte cuenta del un montón de cosas que hay, saca sin pena todo lo que ya no uses. De eso se trata el desapego, soltar, ahí van relaciones también”, dice.

El apego o las expectativas generan sufrimiento y frustración, asegura.

“Hay que despedirse con gratitud y de la mejor manera, agradecer ese tiempo y aprendizaje y soltarlo. Muchas veces la vida nos vuelve a unir más adelante, con personas que ya se fueron una vez y nos colocan un nivel de conciencia distinto”.

Qué te hace feliz

Para recibir lo nuevo hay que hacer espacio con las energías que vibren con cada uno. Pueden empezar haciendo preguntas, dice.

“Pregúntate qué te hace feliz, qué te coloca en una vibración alta, si el silencio o la música, no se trata del otro, ni de seguir reglas externas sino de revisar tu autorregulamiento”.

Los horóscopos, ejemplifica, muchas veces dicen que tal signo se va a comportar de una u otra manera, pero somos distintos.

“Hay un montón de casas, de aspectos, tú traes un signo solar ascendente... cada quien debe voltear primero hacia adentro, revisar qué hay ahí, regresar al exterior y manifestar desde ese punto interior, pero conscientemente”, asegura.

Crear abundancia

En su experiencia como terapeuta, Garza Bayliss ha observado que las personas cuando buscan la abundancia y la prosperidad, se requiere explorar la línea de vida.

En ella hay momentos relevantes o significativos, para bien y para mal, unos que trajeron mucha alegría y otros que fueron duros, pero dieron aprendizaje.

“Cuando una persona no está siendo altamente productiva, abundante o feliz, muchas veces es porque en esos puntos de aprendizaje, dejó pasar la oportunidad para aprender y se instaló en la queja, la lástima, la pesadez”, advierte.

“Cuando tú puedes ver en tu línea de vida todo lo bueno y reconocer que hay cosas complejas que están ahí para integrar un reto, y en lugar de ponerte triste o sentirte víctima del universo, ves que todo es temporal, que hay curvas, que está fluyendo, ese cambio de perspectiva es nutritivo, si te permitas observar el panorama interno y externo y reconocer con gratitud el aprendizaje”.

Cuando las personas ven que son capaces de tener momentos felices y se enfocan en ellos en lugar de lo triste, crea mayor abundancia.

“Produces más si te sales de la queja, la incertidumbre, la duda y puedes reconocer la parte donde hay que aprender, solo le das vuelta a la página y no te quedas estancado en ese momento”.

Y eso, dice, se puede hacer en cualquier momento del año.

Aun así, hay herramientas terapéuticas, técnicas alternativas que nos ayudan a armonizar y aprovechar las energías de este 2024. Aquí algunas.

Energías para iniciar el año

Numerología

Numerología es el estudio de la relación que existe entre los números, algunas letras y fórmulas, de manera que definen las vibraciones de los seres vivos, influyen sobre las personas y objetos que les rodean de manera positiva.

En numerología, el 2024 es un año 8 (2+0+2+4), lo que significa que es un año de manifestación y en lo que vibremos es lo que vamos a manifestar.

Si estamos instalados en la bonanza, vamos a manifestar muchas cosas buenas desde un estado de conciencia. Si estamos en la queja, desde esa inconsciencia vamos a manifestar más de aquello de lo que nos quejamos.

El 8 representa también la conexión entre el plano físico y el espiritual, invita a buscar el equilibrio entre las potencialidades creativas y los impulsos negativos.

Cada uno puede sacar su propia numerología para el año, a partir de su fecha de nacimiento. Suma: año calendario día y mes de nacimiento. Ejemplo, 2024 + 28 + 7 = 2059. Suma los dígitos, y el resultado es 16 y reduce hasta llegar a uno solo (excepto si el resultado es 11 o 22). En este caso 1+ 6 = 7.

Año Personal

1: nuevos comienzos, independencia

2: pareja, autoconocimiento

3: Creatividad, viajes

4: Finanzas, trabajo

5: Cambios, decisiones

6: Familia, amor incondicional

7: Descanso, reflexión

8: Expansión, karma

9: Finales, cierres

Los colores para recibir el año según el Feng Shui

El Feng Shui es una antigua filosofía china que se usa para atraer energías positivas mediante la elección de colores en la decoración de los hogares o en la vestimenta.

Colores de la buena suerte para recibir el 2024:

Rojo: Representa la alegría, la pasión y la vitalidad. Usar en el hogar o ropa, ayudarán a atraer prosperidad y felicidad.

Amarillo suave o dorado: Simbolizan riqueza, prosperidad y buena fortuna. Utilizar en adornos o indumentaria para atraer la energía positiva.

Verde: Simboliza naturaleza, esperanza, armonía y estabilidad. Usar en ropa o decoración ayudará a promover el equilibrio y la renovación.

Blanco: Representa pureza, tranquilidad, paz y claridad. Transmite sensaciones de calma y equilibrio, fundamental para tener armonía y claridad mental.

Azul claro: Representa calma, tranquilidad y estabilidad emocional. Fomenta la serenidad y la comunicación armoniosa.

El 2024, el Año del Dragón

En el horóscopo chino el 2024 es el año del Dragón y estará influenciado por el elemento madera, lo que significa que estará lleno de renovación y poder cósmico. El dragón es símbolo de poder, nobleza y buena fortuna en la cultura china y la influencia del elemento madera añade una dimensión adicional de crecimiento, flexibilidad y expansión.

Las energías cósmicas sugieren que este periodo será propicio para nuevos comienzos, en el ámbito personal, profesional o espiritual.

Se sugiere dedicar tiempo a la meditación para conectarse con la energía de este poderoso animal. Visualizar metas y deseos, y permitir que esta influencia cósmica guíe los pensamientos.

Cristales para el 2024

Cada año está influenciado por ciertos cristales cuyas energías predominantes actúan como guías. Y por la influencia astrológica de Saturno en 2024, los que se alinean a su energía permitirán transitarlo con sabiduría y equilibrio.

Para elegirlos, la intuición es la clave, si sientes una fuerte atracción por un cristal , puede ser el que mejor se adapte a tus necesidades energéticas.

Los regentes:

Lapislázuli: Representa la comunicación y la verdad. Se puede utilizar en prácticas de autoexpresión, ayuda a decir nuestra verdad con claridad y confianza.

Cuarzo azul: Promueve la claridad mental, el foco y la autodisciplina. Ideal para meditaciones de introspección y rituales para manifestar objetivos a largo plazo.

Amatista: Promueve la espiritualidad y la conexión con lo divino. Mantenerlo cerca durante la meditación ayuda a encontrar el equilibrio espiritual.

Cuarzo verde: Asociado con la curación y el crecimiento, ideal para rituales de renovación y trabajar bloqueos emocionales.

Citrino: Ideal para rituales de abundancia y autoestima. Puede ayudar a manifestar riqueza y éxito.

Ojo de tigre: Es una herramienta esencial para quien quiera protegerse de las energías negativas y fortalecer su determinación.

Pirita: Se asocia con la abundancia financiera. Podría utilizarse para atraer prosperidad y estabilidad.