‘Octavio Paz y Carlos Fuentes querían salvar el mundo’, señaló Malva Flores
Carlos Fuentes y Octavio Paz fueron los mejores embajadores de cultura de México, siempre quisieron mostrar que éste era un país contemporáneo y crearon revistas para que leyéramos cosas que de otra manera no hubiéramos leído y en el extranjero se nos conociera, aseguró la académica y escritora Malva Flores.
Al presentar su libro Estrella de dos puntas Octavio Paz y Carlos Fuentes, Crónicas de una amistad, con el que ganó el Premio Mazatlán de Literatura, en la Feria Universitaria del Libro de Hidalgo, la autora destacó que una de las labores más importantes de los intelectuales era la edición, creaban revistas para salvar el mundo.
“Paz lo que intentó fue querer abrir las ventanas para que nosotros leyéramos en sus revistas cosas que de otra manera no leeríamos y no hay que olvidar que el boom no habría existido sin Fuentes, eso es algo esencial”.
Ellos, dijo, se tomaron la molestia de plantear una discusión esencial para nuestro país que es el poder de la crítica.
“El poder de la crítica es lo único que nos puede salvar, pero es muy difícil realizar una crítica cuando no tienes argumentos o cuando los interlocutores no lo tienen, porque lo único que dicen es lo que usted dice no vale”, apuntó.
Malva dijo que se considera “chismosa” y por eso hizo este libro.
“Ser chismoso es buscar una forma de saber qué pasó, como sociedad nunca vamos a poder avanzar y establecer compromisos si no sabemos qué fue lo que pasó, pero sí lo sabemos de manera objetiva y con pruebas, a mí me interesaba proporcionar pruebas de lo que estaba diciendo, porque si no, entonces sólo sí son chismes, nos ayuda a entender la historia del país y de la formación de los grupos culturales en la segunda mitad del Siglo 20”.
Luis Arístides Rodríguez Solís, encargado del departamento de Diálogos, discursos y mensajes de Rectoría de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, destacó que es un libro que cobra una importancia profunda en la actualidad para la lectura de la literatura y de la historia política y cultural de nuestro país.
“El libro cuenta la historia de una amistad marcada por diferentes momentos, es también un punto de partida para entender la historia de nuestro país y la forma en la que se construyó nuestra cultura a mitad del Siglo 20”.
Melva recordó que su interés por la vida de estos dos autores surgió a partir de su gusto por las revistas literarias.
“Antes hice el libro ‘Viaje de Vuelta’, una historia de la revista de Paz, y me di cuenta de que había ocurrido un momento muy difícil de ruptura entre dos amigos, Paz y Fuentes, en ese instante revisé muchos artículos, entrevistas, sobre esta ruptura pero decidí que solo iba a dar cuenta de manera breve en el libro”, contó.
“Pero siempre me quedé pensando qué había pasado, si todo mundo decía que eran los mejores amigos, también leí un libro sobre la historia de la revista Plural, en donde decía que Paz estaba al margen del boom y que algo extraño había ocurrido con una revista llamada Libre, donde habían des-invitado a Paz a participar y dije, ‘aquí hay una razón que nadie quiere ver sobre la distancia entre Paz y Fuentes’ y así fue”.
Compartió que luego se enteró de que ellos habían intentado formar una revista en 1965 y que no se llevó a cabo e hicieron otra que de algún modo Fuentes ayudó a que se creara traicionando su amistad con Paz y se llamó Libre.
“Salió en París, una revista hispanoamericana, muy importante para entender la historia de la literatura hispanoamericana”.
Reconoció que el distanciamiento entre los escritores fue gradual, pero encontró que el primero de ellos fue con la publicación de La región más transparente, de Fuentes, que empezó a escribir cuando ambos trabajaban en la Secretaría de Relaciones en México.
“Paz fue poeta, pero además la actividad más importante que tuvo fue ser editor, siempre quiso tener una revista, formó revistas en su juventud, cuando se va de México intenta hacer revistas todo el tiempo y en Estrella de dos puntas voy narrando estos deseos de Paz por hacer revistas, todo se le cae, nada le sale, llega un momento en que está muy deprimido”, dijo.
“Hay una carta muy hermosa que escribe a José Bianco, su amigo y dice que cuando los escritores quieren salvar el mundo siempre publican una revista. Entonces se va la idea de que Paz siempre quería salvar al mundo, también Fuentes de alguna manera pero tenían una idea distinta de lo que podía ser esta salvación”.
Para Paz era muy importante que la revista se hiciera en México, aseguró, que fuera hispanoamericana para que el mundo la volteara a ver y eso lo logró con Plural, cuando finalmente la pudo hacer.
Con la Revista Mexicana de Literatura que dirigieron Fuentes y Emamuel Carballo hubo una influencia de Paz, incluso, apuntó que el mismo Carballo decía que el editor no escrito era Paz.
“Vemos en las cartas donde dice que debe salir y su opinión sobre los artículos publicados, dan cuenta de que estaba presente en lo que ocurría, fue una revista importante porque empieza a molestarse con el nacionalismo, una peste con la que México ha cargado desde siempre, ellos querían que saliéramos a darnos a conocer al mundo y esa era la disputa contra los nacionalismos”.
El 68, recordó, fue el momento de mayor unión entre Fuentes y Paz, aunque este último fue muy criticado después de lo de Tlatelolco por haberse quedado fuera de México.
“Algo que yo aprendí durante la investigación de este libro es que ya no tenemos esa capacidad para exponer, ejercer la crítica de cualquier lado, nosotros ya no sabemos polemizar, nosotros cancelamos, ya no somos capaces de dar argumentos, adjetivamos pero no damos argumentos”.