Violencia en Sinaloa impacta en la Liga Mexicana del Pacífico en temporada 2024-25; asistencia baja 7%
La temporada 2024-25 de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) quedó marcada por la violencia que azotó a Sinaloa, impactando no solo a la sociedad, sino también al deporte. Aunque los Tomateros de Culiacán llegaron a la final, donde cayeron ante los Charros de Jalisco, la inseguridad obligó a ajustar horarios y tomar medidas extraordinarias para proteger a los aficionados.
Esta situación generó un clima de temor que afectó directamente la asistencia a los estadios.
“Afectó definitivamente la confianza del consumidor para asistir al parque de pelota y disfrutar como siempre. Sí hubo una afectación”, reconoció Carlos Manrique, presidente de la LMP, en una videoconferencia. Aunque no se registraron incidentes violentos en los estadios, la liga sufrió un decremento del 7 por ciento en la asistencia, pasando de 3.25 millones de aficionados en la temporada 2023-24 a 3 millones en la temporada reciente. Esto principalmente se debió al tema de la inseguridad muy focalizado puntualmente en el estado de Sinaloa, que afecta varias franquicias, Mazatlán, Culiacán, Mochis, Guasave”.
Manrique destacó que, a pesar de las adversidades, los aficionados respondieron de manera positiva en momentos clave.
“Tuvimos tres juegos en Culiacán en la final, dos iniciales y el juego sexto, donde teníamos llenos completos. El equipo decidió empezar los juegos una hora antes, lo que fue una gran decisión para permitir que la gente regresara más temprano a sus casas”, explicó.
Ante la posibilidad de que los equipos cambien de sede para evitar futuros episodios de violencia, el presidente de la LMP reconoció las complejidades logísticas y económicas que esto implicaría.
“Es algo que se tiene que platicar, hay implicaciones importantes, logísticas, económicas. Tenemos tiempo para acordar algo en caso de que se repita una situación como la vivida en Sinaloa”, afirmó.
Manrique también destacó la importancia de mantener una comunicación estrecha con las autoridades para garantizar la seguridad de los aficionados.
“Nos corresponde trabajar muy de cerca con Protección Civil y con los gobiernos municipal y estatal para asegurarnos de que el aficionado tenga las mejores garantías de seguridad posibles”, dijo.
Por otro lado, el presidente de la LMP abordó los rumores sobre una posible expansión de la liga hacia Tucson, Arizona, debido al éxito que tiene el beisbol mexicano en zonas con alta población de origen mexicano.
“En la próxima asamblea, uno de los puntos a discutir será esa posibilidad. Por ahora, no hay nada oficial más allá de los rumores”, aclaró.
Mientras la LMP se prepara para la próxima temporada, el desafío será recuperar la confianza de los aficionados y garantizar que el beisbol siga siendo un espacio seguro y de disfrute para todos.
