Ni como arte, ni cultura, ni deporte: organizaciones sinaloenses rechazan la tauromaquia
Eliminar las corridas de toros y la industria alrededor de éstas para dejar de normalizar actos de violencia, pidieron organizaciones protectoras de animales de Sinaloa, en sus participaciones en el foro realizado por el Congreso de Sinaloa para superar el veto a las reformas para protección animal aprobadas en enero, de las cuales el Gobernador Quirino Ordaz Coppel hizo observaciones en contra de la parte que busca prohibir la tauromaquia.
“Aquí se legisla para Sinaloa”, destacaron los participantes al señalar que quienes expusieron argumentos a favor de las corridas de toros no pertenecen al estado, sino a organizaciones nacionales que se dedican a la industria de la tauromaquia, como la cría de toros para los eventos taurinos.
Actos de violencia y crueldad es como se refirieron a las corridas de toros, además de señalar que en Sinaloa no hay una industria fuerte que se afecte y deje a personas sin empleo si se acepta su prohibición, aunado al impacto que se generaría al mandar un mensaje de paz al no respaldar el asesinato de seres vivos por entretenimiento.
El maltrato hacia los animales, expuso Brenda González León, de Huellitas con Causa, también promueve la violencia social y la sociedad sinaloense no es ajena a esta realidad.
“Quienes defienden las corridas de toros pueden asegurar que la tauromaquia es arte tradicional, pero ¿Cómo pueden llamar arte al dolor y desesperación de un animal agonizando en una arena, mientras miles de espectadores observan y se burlan de su sufrimiento?”, dijo González León.
“La tauromaquia no es más que un fenómeno social donde se explota el sufrimiento del animal, por esta razón, la cultura no se puede interpretar como derramamiento de sangre solo para divertir a una sociedad insensible”, agregó.
Andrea Sarabia argumentó que esta actividad no es meramente mexicana, sino que fue adquirida, por lo que no se puede defender diciendo que es una tradición del país llevar a cabo estos eventos, además de que seguirla practicando muestra un retroceso o estancamiento, ya que se inició hace 500 años.
“No es el sentir de los sinaloenses que buscamos un estado pacífico donde no existan actos de crueldad infligidos sobre un ser sintiente y, que además, esté avalado por la autoridad que debe servir para darnos un ejemplo de justicia y sensación de seguridad”, declaró Olivia Millán, protectora de animales de Mazatlán.
José María Férez, de Animal Héroes, aclaró que las observaciones de Ordaz Coppel, desde un punto de vista legal, no proceden, pues aclaró que son infundadas, por lo que el dictamen puede quedar de la manera que se aprobó, prohibiendo la tauromaquia, pues los eventos taurinos no están protegidos por la constitución, además de que se puede eliminar esta práctica y después prohibir otras, como las peleas de gallos.
Además de que no se violentan derechos humanos con la prohibición de la tauromaquia, subrayando que no hay una industria fuerte en la entidad e invitó a los integrantes de la 64 Legislatura a votar a favor del dictamen, a lo cual la Diputada Graciela Domínguez Nava se apegó, señalando que jurídicamente el dictamen es correcto.
Gabriela López, de Fundación Laika, dijo que se necesita un Congreso que pueda legislar para la ciudadanía y un Gobernador que publique los decretos, refrendando la invitación a votar a favor el dictamen, por un veto que, consideró, nunca debió de ser.
Pedro Villegas Lobo, Alma Rosa Garzón Aguilar y Victoria Sánchez Peña, morenistas que forman parte de esta legislatura y serán parte de la siguiente, destacaron que volverán a votar por prohibir la tauromaquia y, en dado caso de que no se alcance la votación, la promoverán en la 64 Legislatura.
Mariana Romero, de Más planeta AC; Rebeca Uriarte, de Fundación Laika protectora de animales; Antonio Franyuti, de Animal Héroes, y Mary Patiño, de TRAC Sinaloa, respaldaron los discursos en contra de la tauromaquia en Sinaloa.
