MALECÓN
06/01/2022 04:00
Los hospitales comienzan a abarrotarse ante la llegada de pacientes, las pruebas para saber si las personas están contagiadas son solicitadas por miles, la ‘cuarta ola’ de contagios ya está aquí, y al paso que va podría ser peor que las tres primeras.
Crónica de una ‘ola’ de casos anunciada

Los casos nuevos de contagios de Covid-19 estaban anunciados, a pesar de la resistencia de las autoridades de reconocerlo y de la ciudadanía en entender que se venía un desastre.

Finalmente, en los últimos dos días, las cifras del resultado de unas fiestas decembrinas sin ningún control están pasando la factura.

Ayer se reconocieron más de mil 300 casos activos, más de la mitad confirmados ayer, en un solo día.

Los hospitales comienzan a abarrotarse ante la llegada de pacientes, las pruebas para saber si las personas están contagiadas son solicitadas por miles, la “cuarta ola” de contagios ya está aquí, y al paso que va podría ser peor que las tres primeras.

Los villanos de la historia son siempre los mismos, con el Alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo “El Químico” Benítez, a la cabeza, en abierto desafío en contra de las medidas sanitarias.

No conforme con haber organizado una fiesta de Fin de Año para 25 mil personas, nos enteramos que el domingo festejó en grande su cumpleaños, donde las medidas sanitarias se las pasó por el arco del triunfo.

“El Químico” comienza a dejar de ser gracioso y sus necedades y ocurrencias cada vez son más peligrosas, algo que comienzan a condenar hasta sus propios compañeros de partido en el Congreso estatal, los únicos con el poder necesario para bajarlo de la silla, a la que llegó de carambola.

Carnaval en peligro

El que por fin se animó a decir para qué sirve su puesto fue el Secretario de Salud, Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien amenazó con cancelar el Carnaval de Mazatlán si el número de contagios de Covid sigue a la alza en Sinaloa.

Programado para el 24 de febrero, el Carnaval de Mazatlán ya había sido anunciado, cuando fiestas similares como la de Veracruz fueron suspendidas desde hace meses y planeadas para verano, si las condiciones lo permiten.

El Carnaval de Mazatlán, sin embargo, ya se encuentra en fase de preparación y con todo el equipo organizador lamiéndose los bigotes por las jugosas comisiones que se mueven detrás de los contratos millonarios.

El asunto es que Cuén Ojeda debió cancelar la Fiesta de Fin de Año que realizó “El Químico” en el puerto, pero no se animó a imponer la fuerza de la secretaría a su mando y ahora ya ni llorar es bueno.

Ahora, la idea no es nueva, desde hace meses se habla de la posibilidad de cancelar la fiesta grande de los mazatlecos, pero nadie se ha preocupado por buscar una tercera vía para sacar adelante la pachanga.

Virus llega al gabinete

El rebrote de contagios y la “cuarta ola” de Covid-19 llegó y se metió a las oficinas del gabinete del Gobernador Rubén Rocha Moya.

Y es que ya son tres los funcionarios de primer nivel que confirman oficialmente que están contagiados por coronavirus.

El pasado mes de diciembre se contagiaron Jaime Montes Salas, Secretario de Agricultura y Rosario Torres Noriega, titular de Turismo.

Pues ahora la que salió positivo en Covid, fue la Secretaria de Educación, Graciela Domínguez Nava, quien hasta tuvo que faltar a una rueda de prensa que se tenía programada precisamente para anunciar el regreso al 100 por ciento virtual por el rebrote de contagios.

El sector educativo todavía no se puede levantar de los embates de las primeras olas de Covid, y ahora se le suma el repunte de contagios. En menos de una semana ya hay más de 214 contagiados entre docentes y estudiantes.

Y el regreso a la normalidad que tanto anuncia y pregona el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, pues la verdad no tiene para cuándo se pueda hacer realidad.

Espejito, espejito

Ayer, el dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática, Oner Gonzalo Lazcano López, se puso a criticar al PRI y al PAN por sus problemas internos

Hasta se animó a decir que el PRI va en franca decadencia, cuando su partido no tiene ni recursos para sacar adelante el mes de enero.

Es cierto que el PRI desde 2018 no ve la suya y por más producción que le meten a sus spots de televisión, y por más que maquillan a su líder nacional, Alejandro Moreno, nomás no da.

Y del PAN, qué decir, después del sainete ocurrido durante su proceso interno, que según el dirigente del PRD, son problemas internos que tiene que solucionar el partido. ¿Problemas? sí, ese partido, otrora símbolo de la lucha democrática, se ha convertido en algo parecido a una mafia, donde lo peligroso es no saber quién es el padrino.

Y mientras Lazcano López criticaba la inexperiencia y la falta de liderazgo en el PAN y el PRI, el PRD va cayendo en un pozo cada vez más profundo.

Esperanzas sueltas

En su última visita a Sinaloa, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que se daría estabilidad al personal médico en la entidad, provocando una esperanza en el gremio, pero ahora esa esperanza parece muy suelta.

Primero fueron las trabajadoras y trabajadores de contrato del Hospital General de Culiacán, después otros grupos sanitarios, pero la mayoría ha expresado miedo a quedarse sin trabajo en medio de la contingencia sanitaria.

Lo cierto es que el propio Gobernador Rubén Rocha Moya, también se comprometió a apoyar a trabajadores de nosocomios y centros de salud, pero lo primero que hizo fue poner a Héctor Melesio Cuén Ojeda de Secretario de Salud, un revés para los médicos.

A la incertidumbre de quienes ya estaban contratados se suman otras, como las 85 bases necesarias para que el Hospital Integral del Valle del Carrizo funcione, inmueble con una inversión de 85 millones de pesos, ya terminado, pero sin operar porque no hay quién trabaje en el lugar.

Los problemas a resolver se suman, no porque solo salgan nuevos, sino porque se vienen arrastrando.

En el caso del hospital en cuestión no se contrató este personal antes, pero es momento que la actual administración le dé celeridad al tema y no se use solo la Secretaría de Salud como foco político o para alimentar egos, porque vocación vocación, no se ve en ese gabinete.