|
""

"Es un error que la planta de amoniaco se ubique en la Bahía de Ohuira: investigadora del IPN"

"Diana Cecilia Escobedo considera que la Bahía de Ohuira es la zona más vulnerable del sistema lagunar que rodea a Topolobampo"

LOS MOCHIS._ Considerando que la Bahía de Ohuira es la zona más vulnerable del sistema lagunar que rodea a Topolobampo, sería un error que se ubicara ahí la planta de amoniaco que pretende construir la empresa Gas y Petroquímica de Occidente.

Así lo señaló Diana Cecilia Escobedo Urías​, investigadora de medio ambiente del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional dependiente del Instituto Politécnico Nacional, con sede en Guasave.

“Mi posicionamiento, como el de muchos de mis colegas que hemos tenido la oportunidad de trabajar en ese sitio, es de gran preocupación ante las amenazas que puede tener un proyecto de esa envergadura. Creo que hay un error en la ubicación del sitio, varios académicos lo hemos dicho en varias ocasiones, creo que eligieron el sistema lagunar más vulnerable. Se equivocaron de sitio”, expuso.

“El conocimiento que nosotros tenemos de la zona es de años trabajando ahí, y hemos visto que en efecto la planta de CFE tiene un impacto, Pemex tiene un impacto, que las mismas embarcaciones de los pescadores han tenido un impacto, y la mala planeación del Ayuntamiento de Ahome también, que en 2005 desvía las aguas del sistema de tratamiento de aguas residuales de la ciudad, que estaba en la laguna Santa María, a la Bahía de Ohuira; y todo esto ha aumentado la presión sobre la zona, causando un incremento en la intensidad y en la frecuencia de la aparición de marea roja, y pues tenemos una laguna fuertemente impactada”, agregó.

El terreno donde se pretende construir la planta de amoniaco está dentro del sitio Ramsar 2025 Lagunas de Santa María-Topolobampo-Ohuira, dentro de la región hidrológica prioritaria Bahía de Ohuira-Ensenada del Pabellón, Área de Importancia para la Conservación de las Aves número 33, Región Terrestre Prioritaria 22 Marismas Topolobampo-Caimanero, y según estudios, el relleno del sitio ya originó alteraciones en las corrientes litorales de la laguna y una gran cantidad de materiales incorporados al agua, afectando su calidad.

El proyecto de la empresa Gas y Petroquímica de Occidente, subsidiaria de ProMan en México, contempla la construcción y operación de una planta para la producción de amoniaco anhidro con una capacidad de dos mil 200 toneladas métricas diarias; incluye la instalación de la planta de producción y almacenamiento, así como la construcción de un gasoducto para la recepción del gas natural, como insumo, y un amonioducto para enviar la producción hasta la terminal de Pemex ubicada en el puerto de Topolobampo.

Escobedo Urías, que tiene un Doctorado en Ciencias Marinas, advirtió que los dragados para la construcción de una terminal portuaria y los de mantenimiento redispondrán nutrientes disueltos, metales pesados y plaguicidas de los sedimentos, que por la escasa renovación del agua generará un incremento en las proliferaciones algales nocivas, eventos de bajas concentraciones de oxígeno y envenenamiento de organismos de importancia pesquera.

Y apuntó que el área a dragar corresponde a la zona de mayor abundancia de postlarva de camarón, así como de huevos y larvas de peces, por lo que habrá un efecto adverso directo altamente relevante en la pesca artesanal e inclusive la de alta mar.

“Según bastantes trabajos de investigación, queda claro que los sedimentos de la zona están contaminados con metales pesados y plaguicidas, producto de los años y años que están llegando fuentes agrícolas al sitio, y esos materiales tóxicos seguirían contaminando todos los organismos de la cadena trófica, como camarones, peces, y las aves que se alimentan de estos organismos, las tortugas marinas que entran a comer las macroalgas que se encuentran ahí, y los delfines que tienen a sus crías en esa zona: es un hábitat crítico para la reproducción de delfín”, dijo.

Para la disposición de los sedimentos producto de los dragados se han dispuesto tres sitios, incluyendo el Cañón de San Ignacio y la Cuenca Farallón, y los investigadores prevén que eso ocasionará contaminación de una de las zonas más productivas para la reproducción y reclutamiento de diversas especies de peces, especialmente la sardina Monterrey, además de ser la zona prioritaria de alimentación de las tortugas marinas y zona de alimentación de la colonia reproductiva de lobo marino.

Además, señalan que el Cañón de San Ignacio posee alta biodiversidad y es la zona donde se da lugar la surgencia costera más intensa del Sur del Golfo de California, y que la Cuenca Farallón posee dos montañas submarinas cuyas características batimétricas determinan los patrones de circulación o la productividad primaria de la zona, además de poseer sedimentos laminados de diatomeas en condiciones anóxicas que son una herramienta fundamental de alta resolución en estudios de cambio climático.

Otra preocupación externada por la Doctora Escobedo Urías, que tiene vigente un proyecto de investigación sobre el establecimiento de la línea base de la calidad ecológica de la Bahía de Ohuira, es que se causará una fuerte afectación a larvas de peces y crustáceos por vertimiento de salmueras y aguas de alta temperatura.

“En su Manifestación de Impacto Ambiental han estado haciendo ajustes para tratar de demostrar que no va a haber una afectación por el ingreso de agua caliente y de alta salinidad a una laguna como Ohuira, a través de su modelo numérico, pero no lo han podido demostrar. La experiencia en modelos con ambientes como estos nos dicen que el riesgo es alto, que ellos están minimizando el impacto de agua caliente y alta salinidad en Ohuira, que es un sistema que tiene muy poco recambio de agua. Los contaminantes permanecen mucho tiempo en esa laguna, y cualquier cosa que ingrese en Ohuira permanece mucho tiempo, y por lo tanto, sus efectos se potencializan”, comentó.

Según lo manifestado en el proyecto, la planta de amoniaco succionará dos mil metros cúbicos por hora de agua de mar, y los investigadores consideran que con ello ‘secuestrarán’ numerosas larvas de peces y camarones, estimando la destrucción de larvas equivalente a más de 500 toneladas de camarón, lo cual corresponde al 61 por ciento de la producción total anual.

De acuerdo con las previsiones científicas, la operación de la planta de amoniaco afectará el hábitat de numerosos organismos, incluidas 32 especies enlistadas en alguna categoría de protección de la NOM-059-SEMARNAT-2010, de las cuales 13 se encuentran ‘amenazadas’, 14 en ‘protección especial’ y 5 en ‘peligro de extinción’.

El estero donde se ubica la planta alberga más de 100 mil aves playeras, que representan el 84 por ciento de las aves migratorias distribuidas en México. Y el sitio del proyecto se ubica a unos dos kilómetros de la Isla Patos, en la cual anidan las especies Egretta Rufescens, Pelecanus Occidentalis, Phalacrocorax Auritus, Fregata Magnificens y Nyctanassa Violacea, sujetas a protección especial por la NOM-ECOL-059-2001, cuya anidación y riqueza específica confieren un valor muy importante y alto para la conservación.

Diana Cecilia Escobedo Urías​ señaló que las afectaciones a las aves ya son claras, puesto que están moviendo su sitio de anidación de la Isla Patos a la Isla Bledos.

“Ellos (los directivos de GPO) han dicho en repetidas ocasiones que quienes los criticamos, como hizo (esta semana) la diputada Clouthier, estamos mal informados, pero no es la opinión de una sola persona, son diversos trabajos científicos que están teniendo el tono de alerta”, sentenció.

 

EL OTRO RIESGO

De la página 183 a la 193 del Estudio de Riesgo Ambiental, realizado en diciembre de 2013 por Corporativo Asociado de Profesionales SA de CV, respecto a la modelación de riesgo por fuga, se presentan diversos escenarios posibles de fuga en amonioducto, de fuga de amoniaco en tanque de almacenamiento, y de fuga de gas natural.

En ese sentido, Diana Cecilia Escobedo Urías destaca el posible escenario de una fuga accidental de amoniaco anhidro por ruptura total del ducto de 18 pulgadas de diámetro, ubicado en el corredor de ductos a un costado del camino al muelle de Pemex, frente al acceso principal a la planta de CFE, debido a un golpe por impacto de un vehículo, liberándose producto por un orificio de nueve pulgadas de diámetro durante un tiempo promedio de cinco minutos, que es el tiempo máximo estimado de una fuga después de que se activan las válvulas de emergencia para corte de flujo.

“Se ha dicho por parte de GPO que será la planta más segura del mundo, pero los accidentes pasan. En su Estudio de Riesgo Ambiental, ellos mismos dicen que en el caso de una fuga de amoniaco, no dentro de la planta, nadie pone en tela de juicio la seguridad dentro de la planta, pero sí en los ductos, puede darse una fuga por un accidente, y los posibles escenarios están considerados en su Estudio de Riesgo. Entonces, por la cantidad de amoniaco que pasa por ahí pues causaría un accidente importantísimo, en el que todas las comunidades que están en un radio de dos kilómetros morirían rápidamente, y la nube tóxica tendría un alcance de hasta 45 kilómetros”, expuso.

“No estamos hablando de afectación a flora y fauna, estamos hablando de vidas humanas. Una fuga de cinco minutos de su amonioducto es la muerte de todo lo vivo en 15 kilómetros, y con una afectación de 45, y esto no lo estoy diciendo yo, no lo está inventando el colectivo Aquí No, es producto de su Estudio de Riesgo Ambiental, que ellos mismos pagaron y que se puede consultar”, añadió.

 

LOS AMPAROS

El colectivo Aquí No ha impulsado la interposición de juicios de amparo para detener el proyecto, y han logrado que tres Juzgados de Distrito otorguen la suspensión provisional.

Los juicios 528/2018-7B, promovido por la comunidad de Lázaro Cárdenas, y 628/2018-2A, promovido por la comunidad del Campo Pesquero Paredones, tienen como base la falta de consulta a las comunidades indígenas locales. Ambos están radicados en el Juzgado Sexto de Distrito.

Además de Lázaro Cárdenas y Paredones, en la zona se encuentran asentadas las comunidades indígenas de Ohuira, El Muellecito y El Carricito, y otras comunidades con presencia de la tribu mayo-yoreme, que tienen como sustento la actividad pesquera y que no fueron consultadas para la instalación de la planta de amoniaco, conforme a lo dispuesto en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, suscrito por México.

El juicio de amparo 724/2018-1, radicado en el Juzgado Séptimo de Distrito y promovido por el Comisariado Ejidal y el Consejo de Vigilancia del Ejido El Muellecito, se sustenta en el derecho a contar con un medio ambiente sano, como lo marca el Artículo 4 Constitucional, considerando que la construcción y operación de la planta de amoniaco generará un daño irreparable a los ecosistemas de la región y un grave riesgo a la salud pública de las personas que residen cerca.

Además, se abrió la carpeta de investigación 973/2018 tras una denuncia penal interpuesta por Eginardo Álvarez Ahumada y Alejandro Álvarez Armenta, acusando una escrituración falsa de Zona Federal Marítimo-Terrestre.

Se señala como imputados a María Cecilia González Ayala, Armando Lorenzo Rodríguez Gámez, Antonio Oscar Ojeda Benítez, el ex Diputado federal Rubén Benjamín Félix Hays, y la empresa Gas y Petroquímica de Occidente a través de su representante legal, José Edivigildo Carranza Beltrán.

Según la denuncia, distorsionaron la Ley de Regulación de Predios Rurales del Estado de Sinaloa para obtener escrituras públicas, llamando al estero ‘agostadero de mala calidad’, obteniendo así uso de suelo y deslinde ‘irregulares’, y licencias de construcción con base en ‘supuestos imposibles’.

La denuncia se amplió en contra de Jesús Tesemi Avendaño Guerrero, en su carácter de delegado en Sinaloa de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, por omisión.