Resultados de PISA 2022 muestra crisis de aprendizaje que vive México: Mexicanos Primero
MÉXICO._ Los resultados de la Prueba Estandarizada de la Dirección de Educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, PISA 2022, muestran un aumento de estudiantes mexicanos de 15 años que carecen de competencias básicas en matemáticas, lectura y ciencias.
Esto significa que en 2022, dos de cada tres estudiantes no lograron realizar operaciones matemáticas, uno de cada dos no comprendió lo que leyó, y en ciencias, uno de cada dos se ubicó en el nivel más bajo de competencia.
De acuerdo con un primer análisis de Mexicanos Primero sobre los resultados de la prueba que evalúa los conocimientos y habilidades para resolver problemas de la vida cotidiana y enfrentar los desafíos de la sociedad del futuro de estudiantes los países miembros de la OCDE, se muestra que en los últimos 10 años el porcentaje de adolescentes que se quedaron en el nivel más bajo de competencia aumentó de 55 a 66 por ciento en matemáticas, de 40 a 47 por ciento en lectura y de 47 a 51 por ciento en ciencias.
Los resultados son preocupantes en un país donde la escolaridad promedio es la secundaria. Las y los estudiantes finalizan este nivel sin contar con habilidades para interpretar y reconocer, sin instrucciones directas, cómo se puede representar matemáticamente una situación simple como comparar la distancia de dos rutas o convertir los precios de una moneda diferente.
Además, concluyen este nivel educativo sin la capacidad de identificar la idea principal de un texto, encontrar información basada en criterios explícitos o reflexionar sobre el propósito y la forma del mismo. En otras palabras, asisten a la escuela, pero no aprenden.
Las pruebas estandarizadas son una forma de saber si las niñas, niños y adolescentes ejercen su derecho a aprender.
Que los resultados de más de la mitad de estudiantes que se evaluaron por medio de PISA estén en el nivel más bajo en matemáticas y la mitad en lectura y ciencias refleja la crisis educativa en la que México está desde hace años.
Estos resultados evidencian que el rezago educativo persiste en un sistema que tiene pendiente dar soluciones generales y también diferenciadas según los contextos.
Los bajos resultados de aprendizajes en la educación básica tendrán repercusiones en la vida adulta de cada estudiante, ya que más de la mitad no logran hacer frente a problemas de la vida cotidiana y mucho menos a los desafíos de la sociedad del presente y del futuro.
La edición PISA 2022 contó con la participación de 6 mil 288 estudiantes mexicanos quienes representaron a un estimado de un millón 393 mil 700 estudiantes de 15 años.
Los estudiantes evaluados en esta edición tenían entre 12 y 13 años cuando vivieron el cierre de las escuelas debido a la pandemia por Covid-19. Específicamente, al inicio del confinamiento cursaban el primer año de secundaria y regresaron a clases presenciales en tercero.
Sin embargo, el aumento de estudiantes ubicados en los niveles más bajos de competencias en matemáticas, lectura y ciencias no puede explicarse únicamente por la pandemia, ya que existe una tendencia a la baja anterior a esta, que en el caso de México comenzó en 2012.
Esa situación solo podrá revertirse mediante políticas educativas que aseguren una nueva y distinta formación de docentes, que realicen más trabajo entre pares, observaciones de aula y que apuesten por la recuperación de aprendizajes, respaldadas por un presupuesto justo y equitativo que sea también eficaz y transparente. Además de impulsar la participación de las familias y el correcto uso de la tecnología en las aulas.
En relación con la dinámica escolar en México, los resultados de la prueba PISA 2022 indican que el 69 por ciento de los estudiantes señaló tener facilidad para hacer amigos en la escuela, cifra que se sitúa por debajo del promedio de la OCDE, establecido en el 76 por ciento. Por otro lado, un alentador 78 por ciento expresó tener un sentido de pertenencia a la escuela, superando ligeramente la media de la OCDE, que es del 75 por ciento.
A pesar de ello, es preocupante que 25 por ciento de los estudiantes en México se sientan solos en la escuela y que el 26 por ciento se perciba como marginado o excluido. En cuanto a la seguridad escolar en México, se destacan áreas de inquietud. Un significativo 22 por ciento de estudiantes en México declaró no sentirse seguro en su trayecto a la escuela, 7 por ciento de ellos en sus aulas escolares y 11 por ciento en otros lugares de la escuela.
Ante esto, Patricia Vázquez, Presidenta Ejecutiva de Mexicanos Primero aseguró que estos resultados son un pulso que debe orientar a las y los tomadores de decisiones a emprender acciones educativas por encima de las diferencias políticas.
Cada uno de los sistemas educativos locales tienen en esta evaluación opciones para que las y los estudiantes tengan mejores oportunidades de aprendizaje sin importar su contexto, origen o lugar de nacimiento.