Preparan éxodo migrante 13 mil personas en la frontera sur el 24 de diciembre
Más de 13 mil personas migrantes iniciarán un éxodo el 24 de diciembre en Tapachula, Chiapas, ante la falta de respuesta de las autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) en sus trámites pues solicitan permisos para transitar libremente por el país para llegar a Estados Unidos.
En la caravana participan organizaciones como el Centro de Dignificación Humana A.C. y migrantes que desde hace meses están varados en Chiapas y han solicitado asilo, visas por razones humanitarias y formas migratorias pero no han tenido respuesta.
Luis Rey García Villagrán, director del Centro dijo en entrevista con Animal Político que la caminata iniciará alrededor de las 6 de la mañana por toda la costa chiapaneca con el objetivo de llamar la atención de autoridades y de la opinión pública para que se atienda las peticiones de los migrantes.
De acuerdo con el defensor de derechos, entre las más de 13 mil personas que participarán el 60% son originarios de Honduras, Cuba y Haití; también hay de Guatemala, El Salvador, Venezuela, Nicaragua, Colombia, República Dominicana, Ecuador, Perú y Brasil.
Además de Mauritania, Mali, Bangladesh, Siria, China, El Congo, Guinea Bissau, la India y de países africanos. En total son 24 nacionalidades.
Del total, detalló García Villagrán, hay unas mil 300 personas en condiciones de vulnerabilidad, es decir, mujeres embarazadas, adultos mayores, niños, personas con discapacidad y algunos con enfermedades crónicas.
Agregó que caminarán hacia el norte del país pues la Ley de Migración contempla la figura del “rescate” con lo que les podrían entregar oficios de salida, sin embargo, este podría ser válido para la frontera más cercana, es decir, Guatemala “lo que equivale a una deportación, mientras que en otros casos les dan 20 días para llegar al norte lo cual es imposible al ir caminando”, explicó.
Tras hacerse pública la organización de la caminata, el activista aseguró que autoridades se acercaron a él para detener la salida y una de las propuestas es atender a las mil 300 personas en vulnerabilidad; sin embargo, el director del Centro de Dignificación Humana dijo que aunque lo están valorando, no confían en el resultado pues hay personas que han sido deportadas pese a que cuentan con documentación para el libre tránsito.
INM acusa falta de presupuesto; organizaciones presentan amparos
De acuerdo con un oficio que circuló internamente en el Instituto Nacional de Migración (INM) se anunció la suspensión de deportaciones y traslados de migrantes sin documentos por la falta de recursos económicos, en medio de un año que está batiendo todos los récords tanto de paso de migrantes por México, detención de personas sin papeles, así como de solicitantes de asilo y refugio
En 2023, el INM tuvo asignado un presupuesto de más de 1 mil 700 millones de pesos, sin embargo, el documento fechado el 1 de diciembre de 2023 y firmado por el comisionado Francisco Garduño, detalla que ante la falta de liquidez “se suspende el servicio aéreo para traslado de personal y migrantes para retornos asistidos, se suspenden los servicios de transportación terrestre para el traslado de migrantes irregulares y se suspenden las comisiones de AFM en el país”, entre otros puntos.
De acuerdo con datos de la Unidad de Política Migratoria, que depende de la Secretaría de Gobernación, hasta octubre de este 2023 suman 588 mil 626 migrantes detenidos en territorio nacional; hasta 117 mil 217 detenciones más que en todo 2022, que ya era año récord, y casi 279 mil más –un 90% al alza– que en 2021, el primer año de la postpandemia.
Además de las detenciones, este 2023 también está siendo récord de solicitudes de asilo en el país. El pasado 20 de septiembre, Animal Político publicó que en apenas 8 meses las solicitudes de refugio ya habían sobrepasado las 100 mil y que, probablemente, sobrepasarán las 150 mil peticiones, lo cual rebasaría por mucho el récord histórico de las casi 130 mil solicitudes que se registraron en 2021.
Luego de que por falta de presupuesto dejaran de entregar tarjetas por razones humanitarias, organizaciones como el Centro de Dignificación Humana lanzó una convocatoria para que a partir del 12 de diciembre las personas interesadas se enlistaran para interponer juicios de garantía a fin de permitir la entrega de tarjetas u oficios de salida.
“Nosotros desde hace dos semanas hemos venido interponiendo juicios de garantía de manera gratuita y llevamos hasta el momento como 4 mil 600 interpuestos ante los Juzgados de Distrito y en estos días vamos por más, vamos a llegar a unos 7 mil”, dijo Luis Rey García quien aseguró que hay mucho más personas interesadas pero ni ellos ni la organización cuentan con recursos para el pago de copias que se necesitan para los trámites.
Hasta el momento, el juzgado tercero de distrito en Chiapas concedió los amparos para evitar la detención y deportación a sus países de origen y obligó al Instituto Nacional de Migración y a la Comar continuar los trámites de regularización iniciados, sin embargo, les negaron la posibilidad de transitar libremente por México.
El defensor de los derechos de las personas migrantes detalló en entrevista que esta resolución los protege “a medias” pues al no permitirles transitar los dejan en una condición de indefensión pues en Tapachula muchos no tienen empleo y viven en situación de calle; mientras que la Comar anunció que regresa de vacaciones el 2 de enero y migración no tiene presupuesto.
A esto se suma que muchas personas no tienen cómo comprobar el avance de sus trámites ante Comar porque les dan citas escritas en papelitos, no están por sistema.
“Son tácticas que utilizan ellos, por todo eso vamos a salir el 24 de diciembre, con amparos o sin ellos, si las autoridades se dan cuenta de la crisis que implica y deciden entregar los documentos, los podrán llevar mientras vamos caminando porque quedarnos en Tapachula es un suicidio”, dijo García Villagrán.
La crisis migrante en Tapachula, Chiapas
Organizaciones aseguran que Chiapas se ha convertido en un “tapón” para los miles de migrantes que buscan obtener permisos para transitar por México rumbo a Estados Unidos.
Esta situación ha causado una crisis humanitaria y que se presenten diversos problemas que han causado pérdidas de vidas. El Centro de Dignificación Humana A.C. calcula que en la frontera sur hay unas 60 mil personas que buscan transitar y que actualmente están varados en Tapachula, Ciudad Hidalgo, Metapa, Cacahoatán, Tapachula, Huahuetán, Huixtla y mapastepec, Pijijiapan y Tuxtla Gutiérrez.
“Imagínese que en Tapachula hay una población de 400-500 mil habitantes y con unos 60 mil migrantes que llegaron se hace inhabitable la ciudad, sin contar que la frontera sur es una de las zonas más olvidadas en materia de gobernabilidad, seguridad e infraestructura”, dijo a Animal Político el director del Centro de Dignificación Humana.
“Esto ha provocado un tapón, un nudo humano que está causando una crispación aguda en esta frontera sur principalmente en la ciudad de Tapachula donde se encuentran cuatro oficinas de Comar, pero también hay una población que se ha infectado de una cultura del odio en contra de la migración y eso hace un caldo de cultivo perfecto para aumentar la tensión, es una pelea de pobres contra pobres”.
La cantidad de personas que buscan que las autoridades de migración les entreguen sus tarjetas para que puedan circular por el país sin el riesgo de ser detenidos ha provocado bloqueos, protestas, una estampida e incluso la muerte de migrantes que deciden continuar su camino en camiones de carga que se han accidentado o que aparecen abandonados en carreteras con las personas al interior.
El pasado 18 de septiembre de 2023 se registró una estampida en las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) de Tapachula, Chiapas, que dejó dos migrantes lesionados.
Los hechos ocurrieron luego de que más mil personas estuvieran a la espera de ser atendidas y un grupo intentata entrar “por la fuerza” al área de atención, informó Segob. Un día después, 2 mil migrantes se presentaron en las oficinas en espera de atención.
El 26 de septiembre, el INM reubicó a 8 mil 152 migrantes que se encontraban en las instalaciones de la Comar en Tapachula para “despresurizar” las instalaciones y “evitar actos de violencia”.
Fueron llevados a Tuxtla Gutiérrez, Huixtla, San Cristóbal y Palenque, en Chiapas; a Villahermosa, Tabasco, y a Acayucan, Veracruz, en 189 autobuses y 73 camionetas tipo van, informó el Instituto.
A esta situación se suma la protesta en Huixtla, Chiapas, el 3 de noviembre, en la que 10 migrantes originarios de Centroamérica se suturaron los labios para protestar contra las autoridades migratorias mexicanas y exigir libre tránsito por el país en su ruta hacia Estados Unidos.
La caravana de más de 6 mil personas pidió a la Comar la entrega de un documento que aclare su estancia legal con lo que podrán evitar ser extorsionados por policías y dejarán de circular por zonas controladas por el crimen organizado al no tener que huir.
Días después bloquearon la carretera costera en el tramo Huixtla-Escuintla e instalaron un plantón en el Centro de Atención Integral al Tránsito Fronterizo (CAITF). En ese momento, Irineo Mújica, activista y director de la organización Pueblo Sin Fronteras, acusó que el INM es insensible a la crisis migratoria.
“Vamos a salir de Tapachula y vamos a tratar de llegar en el primer día a Huixtla que está a unos 42 km, ahí haremos un descanso para continuar los días siguientes. Viendo el contingente que somos, para mí no es caravana, para mí es un éxodo de la pobreza, un éxodo de la injusticia, un éxodo de menesterosos y de la gente más pobre porque esta región se ha convertido en una cárcel migratoria”, denunció.