Osiel Cárdenas Guillén cumplirá sentencia en México de hasta 730 años, promete Gertz Manero
Alejandro Gertz Manero, Fiscal General de la República, afirmó que Osiel Cárdenas Guillén, ex líder y fundador del Cártel del Golfo, de 57 años, cumpliría las sentencias que tiene pendientes en territorio mexicano, entre ellas, por los delitos de homicidio calificado, delincuencia organizada y contra la salud.
Además de la reactivación de siete procesos penales federales, por la probable responsabilidad del ex líder del CDG en la comisión de diversos delitos, entre los que se encuentran delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud, delincuencia organizada, con la finalidad de cometer operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Así como delitos contra la salud, operaciones con recursos de procedencia ilícita, acopio, portación y posesión de armas de fuego y de cartuchos de uso exclusivo del Ejército, posesión de cartuchos de uso exclusivo del Ejército y cohecho, por los cuales se estima que Cárdenas Guillén alcance una pena aproximada de hasta 730 años de prisión, por las órdenes de aprehensión pendientes, más las penas que resulten por los procesos que serán reactivados.
Durante la conferencia de prensa matutina presidencial, Gertz Manero explicó que Cárdenas Guillén “ya cumplió con su sentencia en Estados Unidos”.
“Nos lo entregan, nosotros lo pusimos a disposición del centro de readaptación correspondiente y va a cumplir su condena, como está estipulado en la ley”, dijo Gertz Manero, quien, además, aseguró que las órdenes de aprehensión pendientes contra el ex líder del CDG se ejecutarían dentro del Centro Federal de Readaptación Social No. 1, “El Altiplano”, ubicado en el municipio de Almoloya de Juárez, en el Estado de México, donde fue internado un día antes.
“Resultado de la colaboración y cooperación interinstitucional, en una acción encabezada por la Fiscalía General de la República y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, junto con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional y Secretaría de Marina, en coordinación con el gobierno de Estados Unidos de América, a través de la Oficina de Detención y Deportación del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-ERO, por sus siglas en inglés), recibieron Osiel ‘N’, tras su deportación al país para posteriormente ingresarlo al Centro Federal de Reinserción Social No. 1 Altiplano, en el Estado de México”, informó el Gobierno gederal el 16 de diciembre en un comunicado conjunto.
“A las 09:25 horas, Osiel ‘N’, fue entregado por autoridades de Estados Unidos de América, en la frontera de Tijuana, Baja California, posteriormente fue trasladado vía aérea a la Ciudad de México y aproximadamente a las 17:35 horas fue ingresado al CEFERESO No. 1 localizado en el Estado de México, sin que se registrara ningún incidente. Esto derivado del cumplimiento de una orden de aprehensión por los delitos de Delincuencia Organizada en la hipótesis de delitos contra la salud. Actualmente, la FGR cuenta con tres órdenes de aprehensión pendientes de cumplimentar en contra de Osiel ‘N’, por los delitos de homicidio calificado, delincuencia organizada y contra la salud”, detalló.
“Con la detención Osiel ‘N’ se reactivarán y continuarán siete procesos penales federales, por su probable responsabilidad en la comisión de diversos delitos, entre los que se encuentran delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud, delincuencia organizada con la finalidad de cometer operaciones con recursos de procedencia ilícita, delitos contra la salud, operaciones con recursos de procedencia ilícita, acopio, portación y posesión de armas de fuego y de cartuchos de uso exclusivo del Ejército, posesión de cartuchos de uso exclusivo del Ejército y cohecho”, recordó el Gobierno de México..
“Por estos delitos, se estima que Osiel ‘N’ alcance una pena aproximada de hasta 730 años de prisión por las órdenes de aprehensión pendientes, más las penas que resulten por los procesos que serán reactivados”, finalizó el comunicado conjunto.
El Gobierno de Estados Unidos deportó a México, el 16 de diciembre a Cárdenas Guillén, quien salió, el 1 de julio del mismo año, de la prisión de alta seguridad de Terre Haute, en el condado de Vigo, en Indiana, donde se encontraba recluido, pagando una condena de 25 años, por los delitos de narcotráfico, lavado de dinero y extorsión a agentes federales de Estados Unidos.
El capo tamaulipeco regresó a México 21 años después de su captura y 17 años después de haber sido extraditado a Estados Unidos, donde negoció una condena de 25 años de prisión.
El narcotraficante fue trasladado vía aérea de Tijuana a Toluca de Lerdo y luego llevado al centro penitenciario de máxima seguridad, donde fue ingresado con base en órdenes de aprehensión libradas por delitos contra la salud, delincuencia organizada y lavado de dinero.
