Maestros de la CNTE intentan dar portazo en Palacio Nacional
Un grupo de maestros de la Sección 22 en Oaxaca, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, intentó ingresar a Palacio Nacional este martes durante la conferencia de prensa matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, con el objetivo de entregarle un pliego petitorio.
Desde minutos antes de las 6:00 horas, los integrantes del magisterio disidente salieron de las casas de campaña y carpas que instalaron un día antes el Zócalo capitalino. Un grupo de docentes de Oaxaca quitó las vallas metálicas que protegían el frente de Palacio Nacional, haciendo uso de una camioneta blanca.
Los intentos de los profesores por tener acceso a la sede del Poder Ejecutivo Federal provocaron enfrentamientos de los integrantes de la CNTE con policías antimotines de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, que resguardaban la entrada del recinto histórico y formaron una valla humana para contener a los maestros.
López Obrador anunció el 15 de mayo, en el contexto del Día del Maestro, que los docentes tendrían un aumento en sus ingresos del 8.2 por ciento, el cual sería retroactivo, con un tope salarial de 16 mil pesos al mes.
Sin embargo, los profesores de la CNTE argumentaron que dicho aumento era inviable, debido a que el incremento del salario se ve superado por la inflación.
“El Presidente dijo que recibiremos un incremento de 8.3 por ciento al salario de los maestros. Nosotros decimos categóricamente que esto es mentira, que el incremento del salario se ve superado por la inflación, que es de las del 10 por ciento por la pérdida del poder adquisitivo, que lleva en este sexenio más del 40 por ciento”, explicó Pedro Hernández Morales, dirigente de la Sección 9 en Chiapas de la CNTE, al diario El Universal.
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación anunció que su pliego petitorio contenía 12 puntos, entre ellos: aumento salarial del 100 por ciento; reinstalación de la mesa de negociaciones con carácter resolutivo; abrogación de la reforma educativa de 2019 y de la Ley del ISSSTE de 2007; además de que el Presidente López Obrador retire la iniciativa para desaparecer la Dirección de Educación Indígena; así como la liberación de los “presos políticos y de conciencia”.
