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Legislación

Diputados aprueban reemplazar al Conacyt por el Conahcti

La iniciativa del Presidente Andrés Manuel López Obrador fue enviada a la Cámara baja en diciembre de 2022

Con 257 votos a favor, 208 sufragios en contra y dos abstenciones, el Pleno de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, aprobó en lo general este miércoles el dictamen que expide la Ley General en materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, y reforma la Ley Federal de Entidades Paraestatales y de la Ley de Planeación.

Los votos a favor fueron de los partidos Morena, del Trabajo y Verde Ecologista Mexicano, mientras que los sufragios en contra fueron emitidos los integrantes de los grupos legislativos de Acción Nacional, Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática y Movimiento Ciudadano.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador envió en diciembre de 2022 a la Cámara de Diputados una iniciativa para sustituir al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. En su lugar propuso un nuevo organismo llamado Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías.

El Conacyt, creado el 29 de diciembre de 1970, es un organismo público descentralizado del Gobierno federal, del cual dependen 27 centros de investigación y que administra el Sistema Nacional de Investigadores (SNI), dedicado a promover y estimular el desarrollo de la ciencia y la tecnología en México.

La propuesta presidencial elimina el voto para representantes de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), de dos investigadores en funciones, del SNI, y dos representantes del sector empresarial, propuestos por el director general del Conacyt.

Solo quedarían los representantes de las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader); Bienestar; Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT); Cultura; Economía (SE); Educación Pública (SEP); Energía (SENER); Hacienda y Crédito Público (SHCP), de la Defensa Nacional (Sedena), Marina (Semar), Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Relaciones Exteriores (SRE) y de Salud (SSA).

“A las sesiones de la Junta de Gobierno se podrá invitar con voz, pero sin voto, a las personas servidoras públicas, académicas, humanistas, científicas, tecnológicas, innovadoras y, en general, a cualquiera que, por sus conocimiento y experiencia, se estime pudiese contribuir a la deliberación de los asuntos de competencia de la Junta de Gobierno”, indica la iniciativa presidencial.

Asimismo, se considera una reformulación en la organización de los centros de estudio, que serían llamados Centros Públicos. Además, se expide la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, y se reforman las leyes Federal de las Entidades Paraestatales y de Planeación.

Aunado a lo anterior, con la iniciativa presidencial se abrogaría la Ley de Ciencia y Tecnología, así como la Ley Orgánica del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

También se indica que el nuevo Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnología seguirá siendo un organismo público descentralizado, no sectorizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, con autonomía técnica y de gestión, que actuará como entidad asesora del Ejecutivo federal.

La iniciativa presidencial detalla que el nuevo organismo se especializará en articular las políticas públicas del Estado, en materia de humanidades, ciencias, tecnología e innovación, coordinando dichos sectores.

“En la actual administración, el Conacyt ha reorientado la política pública de humanidades, ciencias, tecnologías e innovación para superar el lastre del periodo neoliberal y volcar las capacidades nacionales en la materia a favor del pueblo de México”, agrega la exposición de motivos de la iniciativa presidencial.

“Sin embargo, esta nueva política comprometida con el enfoque de la ciencia como un derecho humano supone consolidar la función correspondiente del Estado, principal objetivo de la presente iniciativa”, explica la propuesta del titular del Poder Ejecutivo federal.