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Tecnología

Apuesta de la NASA por el tomate para asegurar alimento en misiones espaciales

La NASA ha tenido algunos avances en cuanto a cómo cultivar tomates en el espacio para facilitar la alimentación en futuras misiones espaciales. Te platicamos más de ellas

Dos tomates perdidos “vieron la luz” en el espacio. El astronauta de la NASA Frank Rubio los reencontró en la Estación Espacial Internacional después de recoger la cosecha prevista para el experimento Sistema de Prueba en Órbita de Raíces Expuestas (XROOTS, por sus siglas en inglés).

Si perdieras un tomate en tu casa por casi un años, seguro aparecería lleno de moho, podrido y con un aspecto desagradable. Pero estos tomates en el espacio no tenían nada de eso.

La historia de estos dos vegetales es tan solo parte del éxito en algunos experimentos de la NASA por cosechar en el espacio. Te contamos más de sus avances.

El experimento XROOTS de la NASA

La NASA explicó que el experimento XROOTS es novedoso porque utiliza técnicas hiropónicas (a base de líquidos) y aeropónicas (a base de aire) para cultivar alimentos frescos sin la necesidad de tierra o de otros métodos de cultivo tradicionales.

Los resultados de este experimento podrían conducir a sistemas de producción de alimentos a gran escala. Incluso, lograría reducir los requisitos de peso para estos sistemas y la necesidad de transportar alimentos frescos.

Todo esto daría la oportunidad de contar con mayor espacio para otras cargas igual de valiosas.

Para la NASA, estas soluciones son aptas para los sistemas de cultivo que se necesitarán en las futuras misiones de exploración espacial.

Mario Andrés De Leo-Winckler, doctor en astrofísica por la UNAM, explicó que los experimentos de cultivos dentro de la Estación Espacial Internacional (EEI) no son tan comunes.

“Hasta ahora se continúan realizando diversos experimentos pero ninguno es concluyente. Su importancia parte de tres factores: el costo de llevar alimentos a los astronautas, realizar largos trayectos y, por último, las colonias en la Luna y Marte”, dijo en entrevista para Animal MX.

Tomates perdidos en el espacio, pero exitosos

El hallazgo de los tomates perdidos ocurrió mientras astronautas celebraban el 25 aniversario de operaciones de la Estación Espacial. En ese momento, los tripulantes de la Expedición 70 contaron haber encontrado los tomates perdidos.

Aunque ya habían transcurrido casi un año desde su pérdida, los astronautas señalaron que encontraron estos vegetales dentro de una bolsa de plástico.

Los tomates estaban deshidratados y, ligeramente, aplastados. Además de presentar una ligera decoloración. Otro hallazgo interesante en ellos fue que “no tenían crecimiento microbiano o fúngico visible”, describió la NASA en un comunicado.

La mala noticia para estos tomates en el espacio es que no regresarán a la Tierra para su análisis porque ya fueron desechados. Sin embargo, la investigación de vegetales a bordo de la Estación Espacial continuará con el experimento Hábitat de Plantas 03.

La NASA explica que este es una de las primeras investigaciones multigeneracionales de plantas a bordo de la Estación Espacial.

Este proyecto podría ayudar a que investigadores evalúen si las adaptaciones genéticas en una generación de plantas cultivadas en el espacio puede transferirse a la siguiente.

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¿Quién es Frank Rubio? El astronauta que pasó más de 300 días en el espacio

Frank Rubio es astronauta de la NASA desde 2017. Es estadounidense de origen salvadoreño y rompió el récord de pasar 371 días en el espacio a bordo de la EEI.

La misión que emprendió se considera el vuelo espacial más largo realizado por un astronauta estadounidense en la historia. De acuerdo con la NASA, Rubio aterrizó en Kazajstán el 27 de septiembre de 2023, después de cumplir el día 371 en el espacio.

Si sigues las redes sociales de la NASA, habrás notado que el astronauta Frank Rubio se distingue, además, por compartir momentos cotidianos en la Estación Espacial Internacional dedicados a la comida y cómo se ejercitan.

Uno de los vídeos más interesantes de Rubio sucede cuando muestra cómo es cocinar en el espacio (dentro de la Estación Espacial).

Este video se presentó en días cercanos a la víspera de Navidad del 2023 donde nos enseña cómo funcionan los hornos y el refrigerador del Nodo 1 o “cocina en el espacio”. Además, explica cómo la gravedad no es la misma en los alimentos y las precauciones que tienen con utensilios como los cubiertos.

“La comida en el espacio, para mí, ha sido muy saludable y muy sabrosa. No he tenido problema con el gusto de la comida. He podido disfrutar, ya por 10 meses, la comida que tenemos acá”, declaró Fran Rubio desde el Nodo 1.

El costo de transportar alimentos a la EEI

Mario Andrés De Leo-Winkler, doctor en astrofísica y director de Comunicación del Conocimiento de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), explicó que los experimentos de cultivos dentro de la Estación Espacial Internacional (EEI) dan atención a tres factores importantes para científicos y astronautas en sus investigaciones.

Por un lado, lo costoso que es llevar alimentos a la EEI; el precio aproximado es de 400 mil pesos el kilo. ¿Por qué tan caro? Más que por la dificultad de enviarlos, ese costo se debe a la cantidad de espacio que ocupan.

“Sacarlos de la gravedad terrestre cuesta [entre] 400 a 800 mil pesos por kilogramo y cada astronauta recibe en la Estación Espacial Internacional 1.8 kilos de alimentos al día. Son más o menos 700 mil pesos para alimentarlos por día. (...) Ese es el precio por kilo y dependiendo de los materiales y de la empresa utilizada”, señaló.

Otro motivo para avanzar en los proyectos de investigación para cultivar alimentos en el espacio se debe a la planeación de largos trayectos interplanetarios.

Es decir, “queremos colonizar Marte y para eso se estima que se necesitan 10 toneladas de alimentos para un viaje de ida y vuelta de 3 años”, añade De Leo-Winkler

Finalmente, el experto señala que estos experimentos de cultivos permiten responder a saber cómo se va a alimentar a las colonias que se establezcan en la Luna y Marte.

“Son esos tres lugares que merecen la atención, justamente, en el crecimiento de diferentes tipos de alimentos en microgravedad o cero gravedad y con radiación cósmica”, enfatizó.

Alimentos frescos, mente sana

El astronauta Frank Rubio también se ha enfocado en emprender un nuevo experimento dedicado a obtener productos frescos dentro de la Estación Espacial.

Se trata del estudio VEG-05, con el cual ayudará a abordar la necesidad de un sistema continuo de producción de alimentos frescos en el espacio.

De acuerdo con información de la NASA, este experimento utilizó la instalación “Veggie” de la EEI para cultivar tomates enanos.

El astronauta se concentró en el impacto de la calidad de la luz y los fertilizantes en la producción de las frutas, la seguridad alimentaria microbiana, su valor nutricional y la aceptabilidad de su sabor por parte de la tripulación.

Por su parte, De Leo-Winkler explica que las especificaciones para enviar alimentos a la EEI deben considerar que estos tengan un largo periodo de conservación para que no se echen perder tan rápido, debe ser una dieta balanceada y contener una serie de gustos distintos.

“Esto depende de las nacionalidades de cada uno de los astronautas. Se trata de acercar, un poco, una alimentación balanceada y saludable a los platillos que ellos encuentran en sus tierras natales”, añadió.

Los experimentos que científicos y astronautas de la NASA emprenden no solo dan grandes avances, sino que de paso se dan beneficios para la salud mental; esto gracias al cultivo de plantas en el espacio.

Informes de los astronautas muestran que el tiempo dedicado a la jardinería tiene beneficios en la salud mental permitiendo que su calidad de vida aumente en el espacio.

Ante esto, la importancia de las investigaciones a bordo de la Estación Espacial permiten avances en la tecnología y el conocimiento científico para el exitoso cultivo de plantas en el espacio y, a su vez, ampliar los límites de los viajes espaciales.