Amnistía Internacional señala a Sheinbaum la profunda crisis de derechos que atraviesa México
En una Carta Abierta enviada a la Presidenta electa Claudia Sheinbaum, Amnistía Internacional le manifestó su preocupación por la profunda crisis de derechos en México.
El organismo mundial de defensa de los derechos humanos saludó la elección como la primera mujer que ocupará la Presidencia de México, pero le urgió a un diálogo sobre las condiciones de derechos humanos en el País.
“Le manifiesta preocupación por la profunda crisis de derechos en México”, dice un comunicado del organismo.
“Amnistía Internacional expresa su disposición de establecer un diálogo amplio y constructivo sobre diversos temas, entre ellos, la violencia de género; la desaparición de personas y la falta de seguridad para las mujeres buscadoras; los riesgos que enfrentan las personas defensoras de tierra, territorio y medio ambiente; la ampliación de la prisión preventiva oficiosa; la elección de jueces y magistrados federales por elección popular, incluyendo la incorporación de la figura de ‘jueces sin rostro’, así como la eliminación del Instituto Nacional de Acceso a la Información”.
En su carta Amnistía Internacional solicita a Sheinbaum una reunión y expresa su disposición a contribuir con propuestas para la garantía y vigencia de los derechos humanos en el País.
“México es uno de los países prioritarios para nuestro movimiento dada la profunda crisis de derechos humanos por la que atraviesa”, señala Amnistía Internacional en la carta enviada a la nueva Presidenta.
“Durante las últimas cinco décadas, Amnistía Internacional ha investigado y acompañado a víctimas de algunas de las más graves violaciones de derechos humanos que han cometido diversas autoridades, entre ellas tortura, detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas, violencia contra las mujeres, ataques a periodistas y personas defensoras de derechos humanos, entre muchas otras”.
En México, señala la carta, Amnistía Internacional ha centrado su trabajo en tres temas prioritarios: (1) el derecho de las mujeres a vivir libres de violencia, con enfoque en los feminicidios y los riesgos que viven las mujeres buscadoras; (2) el derecho a la libertad de expresión y reunión pacífica con énfasis en el derecho a la protesta de las feministas y las personas que defienden la tierra, el territorio y el medio ambiente, y (3) los riesgos para la vigencia y respeto de derechos humanos por la estrategia de militarización de la seguridad pública.
“Nuestra misión como movimiento supone el acompañamiento a las víctimas de violaciones de derechos humanos, así como a colectivas y organizaciones de la sociedad civil con acciones de investigación, incidencia, comunicación, movilización, activismo y educación en derechos humanos, para contribuir a que todas las personas podamos ejercer nuestros derechos todos los días”, dice la carta.
“Durante estos 53 años en México, Amnistía Internacional ha mantenido una relación de trabajo constructiva y propositiva con las autoridades de todos los niveles de gobierno, con miras a que nuestro país cuente con un aparato normativo e institucional que permita garantizar a las víctimas de violaciones a derechos humanos acceso efectivo a la verdad, la justicia y la reparación integral del daño, pero, sobre todo, a que como parte ineludible de las garantías de no repetición, todas las personas podamos ejercer a plenitud nuestros derechos humanos”.
La organización le comenta a Sheinbaum que aunque ella llegará a la Presidencia en un contexto en el que las mujeres y cuerpos feminizados han venido avanzando en el acceso y reconocimiento de sus derechos, incluyendo el acceso a puestos de toma de decisión y el derecho a decidir sobre sus cuerpos, desafortunadamente, el contexto actual también se caracteriza por un incremento de distintas expresiones de violencia.
“Entre las que destacamos la violencia feminicida y las violencias que se ejercen contra las mujeres que buscan a sus familiares desaparecidos. A pesar de todo el andamiaje normativo e institucional con que cuenta nuestro País, el Estado mexicano sigue faltando a su deber de garantizar el derecho que tenemos las mujeres a vivir y a vivir libres de violencia”, alerta Amnistía Internacional.
Por ello, agrega el documento, esperan que la llegada de Sheinbaum a la Presidencia de la República constituya una oportunidad para generar espacios de escucha, diálogo e interlocución que permitan construir una ruta de trabajo que tenga como centro a las víctimas de violaciones de derechos humanos, que se cuentan por cientos de miles en México, y que permita resolver la crisis de derechos humanos que atraviesa el País.
“En este camino, es prioritaria la participación activa de las víctimas y de las distintas voces de quienes día con día nos dedicamos a la defensa de los derechos humanos”.
Amnistía Internacional expresa en el documento datos de esa violencia y violaciones a los derechos humanos, los cuales consideran alarmantes.
“Los datos sobre violaciones a derechos humanos en el País son alarmantes: en México son asesinadas en promedio 10 mujeres cada día. De estos crímenes, al menos una tercera parte son investigados como feminicidios y la mayoría de ellos quedan impunes. A la fecha, las cifras oficiales contabilizan más de 115 mil personas desaparecidas y no localizadas.
“Frente a un Estado que no busca, son las propias familias -mayoritariamente las mujeres- quienes se abocan a la tarea de buscar con sus propios recursos y herramientas a sus seres queridos, exponiéndose a numerosos peligros y amenazas incluso contra su propia vida”.
Por otro lado, dice el documento, en 2022 fueron asesinadas 31 personas defensoras de la tierra, el territorio y el medio ambiente, lo que sitúa a México en tercer lugar a nivel mundial como uno de los lugares más peligrosos para defender derechos humanos, sólo por debajo de Colombia y Brasil.
Ese año, añade, también fue uno de los más letales para el ejercicio del periodismo al contabilizarse 13 asesinatos de periodistas.
“Desde Amnistía Internacional hemos manifestado también nuestra preocupación por la estrategia de militarización de la seguridad pública”, alerta la organización.
“Los estándares internacionales establecen que el uso de fuerzas armadas para las tareas de seguridad pública debe ser proporcional, temporal, extraordinario y subordinado a corporaciones civiles, dados los riesgos de violaciones a derechos humanos que han sido constatados tanto en México como en otros países.
“Por ello, advertimos la urgencia de un plan que permita el retiro progresivo de las fuerzas armadas de las tareas de seguridad pública, que incluya el fortalecimiento de las corporaciones policiales.
El documento señala tres propuestas que ha enviado el Ejecutivo al Congreso y que Amnistía Internacional considera riesgosas.
“Se propuso el paso del mando de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, situación que sería contraria a los estándares previamente mencionados. Adicionalmente, sobresalen otras tres propuestas por sus riesgos en materia de derechos humanos”.
Señala la ampliación de la prisión preventiva oficiosa, reforma que iría en contra de las recientes sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que ha ordenado a México que elimine esta figura de sus leyes y Constitución por ser una figura violatoria de los derechos humanos.
Segundo, continúa alertando, la elección de jueces y magistrados federales por elección popular, incluyendo la incorporación de la figura de “jueces sin rostro”, que posibilita que se lleven a cabo juicios de delincuencia organizada sin que se conozca la identidad de la persona juzgadora.
“Estas propuestas irían en contra de la independencia judicial, así como en contra del derecho al debido proceso y las garantías judiciales ya que impide ejercer la defensa ante un tribunal independiente e imparcial”, dice el organismo.
También señala como riesgosa la propuesta de eliminación del Instituto Nacional de Acceso a la Información.
“Esta propuesta pondría en riesgo la protección de los derechos a la privacidad y al acceso de información pública”, dice el comunicado.
Todas estas preocupaciones las hemos venido documentando en nuestros informes y en la interlocución política que mantenemos con las autoridades. Algunas de estas preocupaciones fueron retomadas por diversos Estados durante el Examen Periódico Universal (EPU), de la que fue objeto México en este año[17]. Esperamos que su gobierno dé seguimiento a las recomendaciones.
“Como en los últimos 53 años, Amnistía Internacional está en la mayor disposición de establecer con las nuevas autoridades un diálogo amplio y constructivo sobre la situación de derechos humanos en México”, cierra la carta.
“Por ello, me permito solicitarle una reunión en la que podamos presentarle nuestras más recientes investigaciones y recomendaciones, al tiempo que le expreso la disposición de nuestra organización a participar en todos los espacios de interlocución en que podamos contribuir con propuestas para la garantía y vigencia de los derechos humanos para todas las personas que vivimos en México”.
La misiva, que demanda una respuesta, está firmada por Edith Olivares Ferreto, directora ejecutiva de Amnistía Internacional, Sección Mexicana.