AMLO debe irse en el 2022: Gustavo de Hoyos
MÉXICO._ El magnate Claudio X. González Guajardo habilitó el patio de su mansión de Las Lomas de Chapultepec para recibir, con todas las medidas de salud, a los dirigentes priistas, panistas y perredistas, así como a los del partido Movimiento Ciudadano y a Margarita Zavala, para construir la coalición opositora al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los conciábulos en Las Lomas coincidieron con el inicio y ascenso de la pandemia, desde marzo de 2020, y los asistentes sólo podían ingresar a la residencia previa desinfección corporal y guardando la sana distancia, siempre recibidos con cortesía por González Guajardo, el constructor de la histórica alianza.
“En muchas de esas reuniones, las primeras sobre todo, teníamos guantes, máscaras y careta”, recuerda Gustavo de Hoyos, en ese momento presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), quien participó en todas las reuniones que originaron “Va por México”, integrada sólo por el PRI, PAN y PRD, ya que MC se retiró y México Libre, de Zavala y Felipe Calderon, no obtuvo su registro.
“Imagínate que en una sentada de esas se contagiara toda la clase política del país. Como los ejecutivos de una empresa que no vuelan todos en un avión por seguridad, teníamos que ser muy responsables”, subraya el líder empresarial al reportero, en una amplia entrevista, el 3 de mayo.
De Hoyos Walther describe, a detalle, cómo se concibió y con quiénes se construyó “Va por México”, la coalición que, por primera vez en la historia, unió al PAN con el partido contra el que nació, el PRI, y le da todo el mérito a González Guajardo, fundador de la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
“Cuando se escriba cómo se construyó (la coalición), el papel de Claudio va a ser fundamental. Él está dedicado en cuerpo y alma a esto desde hace ya bastantes meses y ha sido un papel mucho muy relevante el que ha jugado”, sentencia De Hoyos, quien anticipa que también hay un plan para que López Obrador deje el cargo de Presidente en la consulta para la revocación de mandato, en 2022.
“Debe irse”, puntualiza De Hoyos, quien presidió, de 2016 a 2020, el sindicato patronal de México y quien, junto con González Guajardo, concibió y construyó el “bloque opositor” que, a su vez, aconsejaron Enrique Krauze y Héctor Aguilar Camín, directores de las revistas Letras Libres y Nexos, en un desplegado publicado el 15 de julio del año pasado.
Firmado por otros personajes afines a ellos, el desplegado planteaba que para vencer a la coalición de Morena no había más opción que el PRIAN: “La única manera de lograrlo es mediante una amplia alianza ciudadana que, junto con los partidos de oposición, construya un bloque que, a través del voto popular, restablezca el verdadero rostro de la pluralidad ciudadana en las elecciones parlamentarias de 2021”.
Enfático, De Hoyos asegura que nunca hubo “un trabajo concertado entre este grupo de intelectuales con Claudio y conmigo” para publicar el desplegado, pero no tiene duda de que éste “catalizó” la construcción de la coalición electoral, porque “la persecución une”.
“Haciendo honor a la verdad histórica, no promovimos nosotros el desplegado, sin embargo, fue de mucha ayuda, digamos, como un elemento catalizador para los pasos iniciales. No recuerdo con precisión la fecha del desplegado, pero se dio en las etapas muy tempranas, seguramente fue por marzo o abril, por allá”.
En realidad, el desplegado se publicó el 15 de julio, cuando González Guajardo y De Hoyos ya se habían reunido numerosas ocasiones, en el patio de las Lomas de Chapultepec, con los presidentes del PRI,PAN y PRD, Alejandro Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano, para materializar la coalición en 2019 de los 300 distritos y en 11 de 15 gubernaturas en disputa.
MURAT, MARGARITA, KRAUZE...
A esas reuniones también asistieron también Clemente Castañeda y Samuel Alvarez, presidente y secretario general de MC, cuyo fundador, el Senador Dante Delgado, se reunió por separado con De Hoyos, quien revela que también participaron en las negociaciones Margarita Zavala y el representante legal de México Libre, Fausto Barajas.
“Con Dante tuvimos muchos contactos. Él por razón de estrategia decidió no estar en la mesa personalmente, pero, de tiempo en tiempo, yo personalmente me reuní con él muchísimas ocasiones en el transcurso del proceso, y también en el caso de lo que parecía ser una iniciativa viable en ese momento, que era México Libre. Era de los partidos en formación el que parecía en ese momento tener el mayor avance en su gestión. Y ahí también estuvo participando Margarita y Fausto”.
— ¿Calderón no?
— No, el Presidente Calderón no, en ninguna ocasión.
Un personaje clave para armar “Va por México”, ubica De Hoyos, es Santiago Creel, tutor político de Cortés, quienes fueron los dos primeros políticos que se reunieron para echar a andar el plan de unir al PRI con el PAN.
“Probablemente, dejando de lado a los presidentes, que son figuras centrales, tal vez Santiago sea la figura más relevante, sobre todo por su experiencia y, además, es un caballero en la política”, define De Hoyos a Creel, quien también era amigo de años de González Guajardo y de su sucesora en la presidencia de MCCI, María Amparo Casar Pérez.
— ¿Qué tanto ayudó que Casar Pérez, tan cercana a Claudio, haya sido la coordinadora de asesores de Creel en la Secretaría de Gobernación?
— No lo puedo contestar de manera categórica, algo desde luego. Lo que yo sé es que Claudio y Santiago se conocen desde hace muchos años, mucho antes de MCCI.
Pero así como De Hoyos era presidente de la Coparmex cuando se gestó y formalizó la coalición del PRIAN, González Guajardo presidía MCCI, que fundó el 2016, y cuya renuncia informó hasta el 24 de julio, una semana después de que se publicó el desplegado de Krauze y Aguilar Camín que instruyó a hacer una coalición opositora.
“Recientemente tomé la decisión de separarme de la organización para realizar nuevas tareas, desde la trinchera ciudadana, para defender la democracia y preservar el Estado de derecho”, expresó Claudio X. González en su carta de despedida como presidente de MCCI.
Ya para entonces, según el relato de Gustavo de Hoyos, las reuniones en la casa de González Guajardo, en Las Lomas de Chapultepec, se habían sucedido por decenas, con la participación de los presidentes de los partidos y personajes de su confianza.
En el caso del PAN, que fue el primer partido convocado, las negociaciones siempre estuvieron encabezadas por Creel y Cortés, mientras que por el PRD, el segundo partido convocado, los negociadores eran el presidente, Jesús Zambrano, y Jesús Ortega, como segundo.
El PRI, el tercer partido invitado, siempre tuvo como su representante a su presidente, Alejandro Moreno, quien se hacía acompañar por Rubén Moreira o por su consejero José Murat, ex Gobernador de Oaxaca que fue constructor, junto con Creel y Ortega, del Pacto por México de Enrique Peña Nieto, en 2012.
En medio de la pandemia, evoca De Hoyos, tenían que ser pocas las personas que podían reunirse en la casa de González Guajardo para negociar la coalición.
— ¿Cuántas personas máximo se llegaron a reunir con estas medidas de protección?
— Como máximo 12 personas, en un lugar abierto. Fácilmente te lo digo: Dos por cada partido, uno o dos, pero nunca más de dos, que son cinco por dos, diez, más Claudio y quien te habla. Las más grandes, que fueron más hacia el final, hacia agosto, septiembre y octubre, fueron de 12.
Cuando faltan prácticamente tres semanas para la elección del 6 de junio, de Hoyos es cauteloso en el resultado electoral de la coalición “Va por México”, y que eso no garantiza que sea un contrapeso al Gobierno de López Obrador, pero celebra que ya exista la oposición “estructurada, organizada, beligerante”.
Explica: “La coalición no garantiza que se vayan a lograr los contrapesos, no, pero a nuestro juicio, aquí puedo reflejar la opinión de Claudio y mía, (la misma) era una condición indispensable”.
Evoca: “Tú recordarás que, a finales del 2019, se decía en la opinión pública, entre las personas que forman opinión, que no había oposición, que no se le veía, hasta el Presidente señalaba que estaba moralmente derrotada, y qué mejor que ahora hay una oposición estructurada, organizada, beligerante, haciendo un papel que le corresponde a las oposiciones. Esa es la gran aportación. Ahora, la prueba del ácido es la elección”.