"Madrugan y cumplen reto de correr el Gran Maratón Pacífico"
MAZATLÁN._ Casi de madrugada, las emociones estallaron, fue la euforia de miles de corredores en el arranque del Gran Maratón Pacífico 2017, esta vez desairado por autoridades.
La carrera no se trató de atletas en forma, sino de hombres, mujeres, niños, adultos mayores, personas con capacidades diferentes, y hasta familias completas las que participaron unidas por el deporte.
Eso sí, un reto cumplido para todos.La competencia inició poco después de las 06:00 horas, apenas salía el sol, pero decenas de personas con alguna discapacidad ya corrían en la pista, ahí iban débiles visuales a paso lento, apoyados con algún amigo o familiar; hombres con una sola pierna, amas de casa que no pueden ver, parejas de la mano, y jóvenes en silla de ruedas.
La salida fue del punto tradicional, frente al Bosque de la Ciudad, un circuito marcó las metas para distintas categorías. Y ahí estuvo el Gobernador, Quirino Ordaz Coppel, mazatleco, en su primer Maratón como jefe de Estado.
A diferencia de los últimos seis años, el Mandatario apenas estuvo una hora y se fue; no llevó a su Gabinete como lo hicieron otros gobernadores, tampoco lo secundaron políticos, empresarios, ni funcionarios locales; sólo se vio al Alcalde, Fernando Pucheta Sánchez; al secretario de Turismo de Sinaloa, Marco Antonio García Castro, y a representantes del Instituto Estatal del Deporte.
A las 06:30 el Gobernador dio la señal para el arranque oficial del Gran Maratón Pacífico 2017, lanzó un disparo de salva, y miles salieron de la meta. Así inició el reto, el sueño de todos.
La música empezó, papeles multicolores volaron entre los corredores, había ánimo, sonrisas, y fe. Muchos se persignaron, otros se desearon suerte desde las vallas, aún sin conocerse.“Ánimo camarada, ánimo”, le gritó un organizador del Maratón a adulto mayor.
El Gobernador y el Alcalde subieron al área VIP que se habilitó en la zona de meta, después se fueron, no vieron llegar a los corredores, los que poco a poco cruzaron la meta en grupos, en familias, o de la mano, casi sin aliento, pero contentos, eso sí.
A Jaime Rivera, por ejemplo, lo esperó su familia, su esposa y sus hijos de siete años; y su pequeña de nueve meses, ellos lo vieron cruzar la meta por medio maratón. El mazatleco de 33 años resistió 21 kilómetros.
“Estamos felices, muy emocionados, y contentos. Esto lo logramos juntos”, así se expresó Francisco Monjaraz, de 32 años.
Él corrió medio maratón con un grupo de 60 personas, todos de un gimnasio de Culiacán donde todos se prepararon para el reto.Así las historias se contaban solas en la pista, en cada sonrisa de satisfacción.
En lo que fue el Malecón, para los corredores se habilitó el carril que estaba cerrado por remodelación, el de norte a sur; sólo quedó restringido el camellón central, y los trabajos hacia la playa, fue la única manera de garantizar espacio.
Desde un helicóptero se pudo ver a cientos de corredores con área libre en la Avenida del Mar, y zonas habilitadas para ciudadanos que se ejercitan al día.
Las obras sólo obstaculizaron la vista al mar. De acuerdo con los organizadores al Maratón se inscribieron más de 11 mil participantes.