La Gabriel Leyva, avenida en remodelación en Mazatlán, es objeto de rapiña, acusa Jumapam

A unas semanas de que se dé por terminada la rehabilitación de la Avenida Gabriel Leyva, el gerente general de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Mazatlán, Luis Gerardo Núñez Gutiérrez, reconoció que hay rapiña en la zona, por lo que solicitará que haya mayor vigilancia.

“Ahorita tenemos el problema que se nos están presentando demasiados robos en lo que es toda la zona y se va a implementar seguridad pública”, expresó.

Aunque él no lo especificó, se dijo que el robo es a materiales de construcción que las constructoras dejan en el área en el que les toca trabajar, ello a pesar de que todas tienen veladores que vigilan.

Hoy se realizó la reunión semanal, a puerta cerrada, entre representantes de los gobiernos municipal y estatal con las constructoras que participan en la obra.

Al final de la misma, la Jumapam emitió un boletín informativo, en el que Núñez Gutiérrez habló de los robos, pero también del avance de los trabajos.

“Estamos a tres semanas de la inauguración, ya casi terminando lo que es la obra hidrosanitaria de drenaje y de agua, estamos ya también en su mayor parte haciendo los colados”, declaró Núñez Gutiérrez.

Dijo que la modernización de la avenida está avanzando conforme a la nueva programación que se estableció para que sea inaugurada durante la primera semana de octubre, ello, tras analizar metro por metro de la vialidad, mediante un video.

Destacó que ya están saliendo los cruces críticos, como son el acceso al Parque Bonfil y hacia la Colonia Juárez, lo que también está permitiendo liberar más tramos a la circulación vial.

Osbaldo López Angulo, secretario de Obras Públicas del Estado, hizo un llamado a los constructores a trabajar con ahínco para sacar adelante la obra.

El director de Bienestar y Desarrollo Social Municipal, Tonatiu Guerra Martínez, exhortó a las empresas a ser honestas en sus capacidades y recomendó que si alguna tiene algún obstáculo o contratiempo pida ayuda, para no retrasar el trabajo de los otros constructores.