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Malecón de Mazatlán

La remodelación del malecón de Mazatlán ha sido una obra cara y hoy en día no tiene mantenimiento

Esa remodelación se culminó en abril de 2018 para que en agosto se diera inicio a la segunda y última etapa

Losetas levantadas, botes de basura oxidados a medio caer y alcantarillas abiertas... son algunos de los desperfectos que se observan en malecón de Mazatlán, en el área de gimnasio y restaurant de Playa Norte, esto por falta de mantenimiento de lo que apenas hace tres años fue remodelado y entregado en noviembre de 2018.

Esta obra, ha sido una de las más caras en las que el gobierno de Quirino Ordaz ha invertido, pues en la primera etapa que significó cambiar banquetas, hacer una ciclovía, extender explanadas y colocar infraestructura mobiliaria, costó al erario público más de 263 millones pesos.

Esa remodelación se culminó en abril de 2018 para que en agosto se diera inicio a la segunda y última etapa, cambio de drenaje y concreto hidraúlico de las avenidas, la cual se concluyó en noviembre, al que se le sumó un ingreso de 135 millones de pesos.

$!Foto: Noroeste
Foto: Noroeste ( )

Lo que da un total de 398 millones de pesos, mientras que la remodelación de la avenida Gabriel Leyva con todas las instalaciones integradas tendrá un costo de 240 millones de pesos.

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Foto: Noroeste ( )

Al abordar al secretario de Obras Públicas del estado, ha referido que estas obras han sido entregadas al municipio, y es responsabilidad del Ayuntamiento dar mantenimiento a la obra como tal.

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Foto: Noroeste ( )

Sin embargo, en la actualidad se observa que la pintura que se aplicó en varios cruces peatonales del malecón y ciclovías a los pocos días se encontraba despegada.

Muchos botes de basura que se encuentran a lo largo del malecón están oxidados y con riesgo de que alguna persona se pueda cortar, al igual que las velarias y algunas paradas de autobús.

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Foto: Noroeste ( )

Justo a un costado del restaurante “Playa Norte”, las banquetas forman ya una pequeña ‘colina’ debido a que se encuentra levantada, donde hay una tapadera del drenaje. Metros más adelante se observa otra alcantarilla abierta, ya que el asfalto se venció.

Por un lado corren deportistas, caminan niños, turistas y comerciantes de la zona, quienes en un descuido pueden lastimarse un pie o encajarse uno de los materiales despegados de los botes de basura.