Republicano Kevin McCarthy es destituido como presidente de la Cámara de Representantes
Tras 10 meses en el cargo, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, fue destituido del cargo tras una moción en su contra presentada por un miembro de su propio partido, en represalia por concesiones efectuadas a los demócratas.
La resolución, introducida el lunes por el legislador Matt Gaetz, fue aprobada por 216 votos a favor y 210 sufragios en contra.
McCarthy es el primer presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos en ser destituido. También es el que duró menos tiempo en dicho cargo, desde 1876.
El líder de la minoría demócrata, Hakeem Jeffries, instruyó a los miembros de su bancada a votar para revocar a McCarthy. El representante Patrick McHenry, de Carolina del Norte, fue nombrado presidente pro tempore de la Cámara de Representantes.
Desde las elecciones de medio mandato de noviembre de 2022, los legisladores conservadores tienen 221 escaños, mientras que los demócratas ostentan 212. La moción necesitaba ser aprobada por mayoría simple.
Tan sólo otros dos presidentes de la Cámara de Representantes han sido sometidos a una moción en su contra durante el último siglo, ambas sin éxito: contra los también republicanos Joseph Cannon, en 1910, y John Boehner, en 2015.
Gaetz forma parte del Freedom Caucus, el ala del Partido Republicano más afín al ex Presidente Donald Trump, los cuales estaban molestos con McCarthy, quien, con votos demócratas, sacó adelante la ley que amplió durante 45 días la financiación de la Administración en temas clave y evitó así un cierre del Gobierno de Estados Unidos.
Los legisladores republicanos afines Trump, presionaban a McCarthy, a quien consideraban demasiado moderado.
Muchos miembros del “Freedom Caucus” se opusieron a nombrar a McCarthy como líder de la mayoría republicana en la Cámara baja en enero de 2023, e, incluso, establecieron condiciones para ello, incluido un cambio de las reglas para que cualquier republicano pudiera convocar una votación para destituirlo.
Además, para ser elegido líder de la mayoría republicana, McCarthy se comprometió a reducir el gasto de la Administración pública.
Sin embargo, en junio pasado, cuando Estados Unidos estaba al borde de un incumplimiento de su deuda soberana, llegó a un acuerdo con el Presidente Joe Biden, mediante el cual el Congreso estadounidense permitió que el Mandatario siguiera tomando dinero prestado para sus deudas, pero a cambio de límites específicos en el gasto gubernamental.
Los legisladores afines a Trump se dijeron traicionados por dicho acuerdo y pidieron más recortes. En concreto, buscaron establecer un límite de gasto público de 1.47 billones de dólares para el año fiscal 2024, lo que supone 120 mil millones de dólares más en recortes de lo acordado.
Según lo explicaron diversos medios y agencias internacionales, el “Freedom Caucus” podía ejercer dicho tipo de presión sobre McCarthy, porque los republicanos tenían una mayoría muy estrecha en la Cámara baja del Congreso estadounidense y el presidente de la misma necesitaba el apoyo de todos ellos para aprobar cualquier medida.
El 29 de septiembre, McCarthy intentó, sin éxito, aprobar un proyecto de ley que habría financiado a la Administración pública por un mes adicional, hasta el 31 de octubre del mismo año, pero que contenía límites a programas de asilo y recortes a todas las partidas, excepto a la de seguridad fronteriza.
En contra de ese proyecto votaron los demócratas que se oponían a dichas provisiones sobre la frontera con México y los republicanos del ala dura, que rechazaron cualquier medida para mantener operativa la Administración pública y seguían las instrucciones de Trump, quien los instó a resistir y provocar el cierre del Gobierno.