Reporta la UNRWA que más de 50 instalaciones de la agencia en Gaza han sido atacadas
La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) informó este viernes que, desde el inicio de las hostilidades el 7 de octubre, más de 50 instalaciones de la agencia en toda la Franja de Gaza se han visto afectadas, lo que incluye cinco ataques directos.
“Creo que el último balance es de 38 desplazados muertos en nuestros refugios. Y me temo que, con los combates en el norte, ese número va a aumentar significativamente. Estas son personas que buscan refugio bajo la bandera de las Naciones Unidas; buscan refugio bajo el derecho internacional humanitario”, advirtió el director de los asuntos de la agencia en Gaza, Tom White.
Además, la agencia especificó a través de la red social X que los edificios incluyen escuelas de las Naciones Unidas e inmuebles utilizados como refugios, donde UNRWA acoge actualmente a casi 700.000 personas. 72 trabajadores de la agencia han sido asesinados en Gaza a menudo con sus familias, desde que estalló la actual crisis tras los ataques lanzados por Hamás y que costaron la vida a más de 1400 israelíes.
El 70% de las víctimas son mujeres y niños
El portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó de que el número de muertos en Gaza desde entonces es de más de 9000, según las autoridades dirigidas por Hamás. De estas víctimas, el 70% son mujeres y niños. El número de heridos en el enclave asciende a más de 22 mil.
“Aquí los que pierden son los civiles inocentes. Pensemos en las víctimas”, insistió Christian Lindmeier.
En cuanto al número de desplazados, la cifra alcanza el millón y medio de personas, según informó la coordinadora residente en los Territorios Palestinos Ocupados, Lynn Hastings.
Se necesitan fondos urgentemente
Por su parte, el portavoz de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) declaró que “la situación es cada vez más desesperada” y la ONU y sus socios harán público el lunes un llamamiento urgente actualizado para los Territorios Palestinos Ocupados que abarcará lo que queda de año.
Jens Laerke especificó que el llamamiento de urgencia inicial de 294 millones de dólares para ayudar a casi 1.3 millones de personas, lanzado el 12 de octubre, no será suficiente.
Ahora, 2.7 millones de personas (toda la población de Gaza y 500 mil personas en la Cisjordania ocupada) necesitan ayuda con alimentos, agua, atención sanitaria, refugio e higiene, y el coste de satisfacer sus necesidades se estima en 1200 millones de dólares.
Laerke señaló que el llamamiento urgente original está financiado hasta ahora en un 25 por ciento, y que los tres donantes principales son Estados Unidos, el Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia de la ONU (un fondo humanitario de donantes múltiples) y Japón.
Las pausas humanitarias, clave
Para poder entregar la ayuda, Laerke reiteró la necesidad de hacer “pausas humanitarias”. Destacó que este tipo de mecanismos de resolución de conflictos se han aplicado en “muchos otros contextos”, como el noroeste de Siria, Yemen y Afganistán.
“No está fuera de nuestra competencia establecer y facilitar tales mecanismos”, dijo, que “requieren un acuerdo entre los que hacen la lucha de que se detendrán”.
Laerke insistió una vez más en que “nuestra capacidad para aliviar el sufrimiento de la población palestina” dependerá también de la disponibilidad de combustible.
No se ha permitido la entrada de combustible en Gaza desde el comienzo de la crisis y la agencia de asuntos humanitarios afirmó que, debido a la escasez, el funcionamiento de los pozos de agua y las plantas desalinizadoras en la mitad sur de Gaza “se detuvo casi por completo” este jueves. También afirmó que “no hay suficiente claridad sobre el acceso de la población al agua en el norte de Gaza”.
Laerke subrayó además que será “primordial” la apertura de los pasos fronterizos entre Israel y Gaza, como el de Kerem Shalom, que ha sido un punto clave de entrada de mercancías hasta la escalada.
Hasta ahora, sólo se ha permitido la entrada de ayuda a través del paso fronterizo de Ráfah desde Egipto, con un total de 374 camiones desde que se reanudaron las entregas el 21 de octubre. El mayor convoy, compuesto por 102 camiones, entró este jueves. Según la agencia, la ayuda disponible “sigue siendo insuficiente para cubrir las necesidades básicas de la población”.
No se respeta el principio de proporcionalidad
La portavoz de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos destacó la preocupación por los ataques aéreos israelíes contra los campos de refugiados de Yabalia y Al Bureij en los últimos días, en los que se han destruido decenas de edificios residenciales, así como por el elevado número de víctimas mortales registradas en el enclave y el “uso, según informes, de armas explosivas con efectos de área amplia en algunas de las zonas más densamente pobladas de Gaza”.
“Nos preocupa seriamente que los principios de distinción y proporcionalidad no estén siendo respetados por ambas partes”, añadió Liz Throssell.
El Oficina ya dijo este miércoles que, dado el elevado número de muertos y heridos civiles en Gaza y la magnitud de la destrucción tras los ataques aéreos israelíes contra el campo de refugiados de Yabalia, podría tratarse de “ataques desproporcionados que podrían equivaler a crímenes de guerra”.
Aumenta el número de muertos en Cisjordania
Mientras tanto, en Cisjordania ocupada, Throssell dijo que, desde el 7 de octubre hasta el 2 de noviembre, 132 palestinos, entre ellos 41 niños, fueron asesinados: 124 por las fuerzas israelíes de ocupación y ocho por colonos. También murieron dos soldados israelíes.
Destacó que las fuerzas israelíes han “utilizado cada vez más tácticas y armas militares en operaciones para hacer cumplir la ley”, incluida una operación nocturna con ataques aéreos sobre el campo de refugiados de Yenín, y recordó que el cumplimiento de la ley se rige por la legislación internacional sobre derechos humanos, “que prohíbe el uso intencionado de fuerza letal salvo cuando sea estrictamente necesario para proteger la vida”.
Dramática escalada de la violencia de los colonos
”La violencia de los colonos, que ya estaba en niveles récord, también ha aumentado drásticamente”, declaró el portavoz de la Oficina. Desde el 7 de octubre se ha producido una media de siete ataques diarios de colonos en Cisjordania ocupada, más de un tercio de ellos con armas de fuego.
“En muchos de estos incidentes, los colonos iban acompañados por miembros de las fuerzas israelíes, o los colonos vestían uniforme y llevaban rifles del ejército”, declaró Throssell, quien expresó su preocupación por la “aquiescencia y colaboración” de las autoridades, así como por la impunidad.
“A pesar de que cientos de colonos están implicados en esta violencia diaria, desde el 7 de octubre las fuerzas israelíes sólo han detenido a dos colonos por agredir a palestinos y matar a un agricultor palestino”, afirmó.
La violencia también está obligando a comunidades enteras a abandonar sus tierras, lo que puede equivaler a un “traslado forzoso”. Desde el 7 de octubre, casi 1000 palestinos de al menos 15 comunidades de pastores de Cisjordania han tenido que huir de sus hogares.
Detenciones y malos tratos
Throssell afirmó que, desde el 7 de octubre, las fuerzas israelíes han detenido a casi 2000 palestinos.
“Hemos recibido informes creíbles y coherentes que indican un nuevo aumento de los malos tratos a los detenidos, que en muchos casos podrían equivaler a tortura”, añadió.
Dos palestinos detenidos desde el 7 de octubre han muerto bajo custodia. La Oficina advirtió de que, al parecer, a los detenidos “no se les conceden las debidas garantías procesales y judiciales”.
Los rehenes deben ser liberados
Throssell reiteró los llamamientos a los grupos armados palestinos para que “dejen inmediatamente de lanzar cohetes intrínsecamente indiscriminados contra Israel” y “liberen inmediata e incondicionalmente a todos los rehenes que mantienen retenidos, en grave violación del derecho internacional humanitario”.
Según las autoridades israelíes, 242 personas permanecen cautivas en Gaza, entre israelíes y extranjeros. Los informes de los medios de comunicación indican que unos 30 de los rehenes son niños.
La portavoz recordó también “las obligaciones de las autoridades de facto de respetar y proteger los derechos humanos de la población de Gaza”.
Destacó que “la ubicación conjunta intencionada de objetivos militares y civiles o personas fuera de combate con la intención específica de tratar de impedir el ataque a objetivos militares constituye una grave violación del derecho internacional humanitario”.
Israel ha denunciado en varias ocasiones que Hamás utiliza a civiles como escudos humanos y hospitales y otras infraestructuras civiles con fines militares.