Fuertes lluvias e inundaciones en Brasil dejan al menos 12 muertos
Al menos 12 personas murieron y una más se encuentra desaparecida después de que las lluvias torrenciales causaran inundaciones en la ciudad de Río de Janeiro, informó el Gobernador del estado de Río de Janeiro, Claudio Castro.
Castro también confirmó que alrededor de 2 mil 400 soldados del Departamento de Bomberos se desplegaron para realizar labores de limpieza y rescate desde el comienzo de las fuertes lluvias, con el apoyo de drones y perros rastreadores.
Calles, viviendas y la línea de metro de la ciudad sufrieron daños graves por el impacto de las inundaciones, lo que llevó al Alcalde de Río, Eduardo Paes, a tomar medidas inmediatas para controlar las consecuencias y salvar vidas.
“Estamos trabajando en este momento principalmente para aliviar el sufrimiento de las personas cuyas casas y calles quedaron inundadas”, dijo el alcalde en una publicación a través de la plataforma social X este lunes. Paes también decretó el estado de emergencia.
El acalde también dijo que habló con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien reconoció la situación de emergencia y se comprometió a brindar apoyo federal a través del ministro de Desarrollo Regional e Integración, Waldez Góes.
Varias personas murieron ahogadas o en deslizamientos de tierra, mientras otras tres electrocutadas. Según funcionarios de defensa civil, unas dieciocho ciudades siguen en riesgo “alto” de deslizamientos de tierra, especialmente en los en los municipios de Duque de Caxías, Mesquita, Nilópolis, Seropédica, São João de Meritu, Quemados y Niteroi.
El aguacero, que se extendió desde la medianoche del sábado al domingo, inundó viviendas, un hospital, la línea de metro de la ciudad de Río y un tramo principal de la autopista, la Avenida Brasil. Hubo grandes afectaciones en la infraestructura de la zona norte de la capital fluminense, así como municipios de la zona metropolitana.
“Nos sentimos como animales. No es normal vivir así”, comentó Heloisa Regina, de 55 años, cuyo negocio y hogar se inundaron en Duque de Caxias, una ciudad al norte de Río, donde cayeron más de 100 milímetros de lluvia en 24 horas.