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Gobierno

Expulsan de Venezuela a la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos

Otorga Gobierno de Maduro un plazo de 72 horas para que el personal adscrito a la agencia de la ONU abandone el país

El canciller de Venezuela, Yván Gil, anunció que el Gobierno de Nicolás Maduro decidió suspender las actividades de la oficina técnica de asesoría del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Venezuela y otorgó un plazo de 72 horas para que el personal adscrito a ella abandone el país.

Gil agregó que el Gobierno realizará en los próximos 30 días una revisión integral de los términos de cooperación técnica descritos en la carta de entendimiento firmada con esa agencia.

“Esa oficina se ha desviado de su mandato”, señaló el ministro de Relaciones Exteriores, afirmando que la organización ha tenido un “impropio papel” y “se ha convertido en una caja de resonancia de la oposición más extrema del país”.

El Gobierno añadió en un comunicado que la medida se mantiene hasta que rectifiquen ante la comunidad internacional lo que llamó su actitud “colonialista, abusiva y violadora de la carta de las Naciones Unidas”.

Esta semana, la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ACNUDH) expresó su preocupación por la situación de la activista venezolana Rocío San Miguel, quien fue detenida la semana pasada bajo acusaciones de la Fiscalía de haber participado en un supuesto intento de conspiración contra Maduro, una afirmación que ha sido ampliamente cuestionada.

La agencia de la ONU exigió este martes la liberación inmediata de San Miguel, mientras que una misión de investigación respaldada por Naciones Unidas declaró que su detención era parte de “una serie de eventos que parecen ser parte de un plan coordinado para silenciar a los críticos y a los percibidos opositores”.

La oposición venezolana agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática expresó su rechazo por la expulsión de la oficina de la ONU. En un mensaje publicado en X, el bloque dijo que esta medida “ratifica el carácter totalitario del régimen”, que “no quiere la presencia activa de la comunidad internacional como testigos de las permanentes violaciones de DDHH en nuestro país”.

Por su parte, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela condenó la decisión del Gobierno.

“La misión de la ONU ha estado en el país desde 2019, y su salida aumenta la desprotección de las víctimas de violaciones de DD.HH. y disminuye la observancia”, indicó en su cuenta de X, antes Twitter.