"Evo pide a la ONU rechazar golpe de Estado y llama a un diálogo abierto de las partes en Bolivia"

"En rueda de prensa, acusó a la Organización de Estados Americanos de servir más a los intereses de Estados Unidos que de los pueblos latinoamericanos, y dijo que su misión de observación electoral en Bolivia asumió posiciones políticas y no legales"

MÉXICO (SinEmbargo)._ El ex Presidente Evo Morales llamó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a reconocer que en Bolivia hubo un golpe de Estado, y pidió que países y organismos internacionales organicen un diálogo abierto de todas las partes en conflicto para garantizar el regreso a la normalidad democrática de su país.

El ex mandatario llamó el miércoles a los distintos actores bolivianos a participar en un diálogo nacional, acompañado por países “amigos” y organismos internacionales.

Desde Ciudad de México, donde llegó la víspera como asilado político, Morales también llamó a la policía y a las fuerzas armadas a no reprimir a la gente. “No se manchen con la sangre del pueblo”.

En rueda de prensa, acusó a la Organización de Estados Americanos (OEA) de servir más a los intereses de Estados Unidos que de los pueblos latinoamericanos y señaló que su misión de observación electoral en Bolivia asumió posiciones políticas y no legales.

“La OEA no está al servicio de los pueblos latinoamericanos y menos de los movimientos sociales, está al servicio del imperio norteamericano”, aseguró Morales.

El político afirmó que nunca pidió a ninguna institución de su país cometer irregularidades durante el proceso electoral y que incluso él mismo se dijo dispuesto a realizar nuevas elecciones.

El domingo, Evo Morales había anunciado la repetición de las elecciones presidenciales después de que la OEA diera a conocer numerosas irregularidades en los comicios del 20 de octubre pasado en los que fue reelegido para un cuarto mandato.

Poco después anunció su renuncia a la Presidencia tras casi 14 años en el poder y aceptó el asilo ofrecido por México horas después, llegando este martes a la capital del país.

Este el miércoles, desde el Museo de la Ciudad de la capital, Evo Morales defendió su triunfo electoral del 20 de octubre y, sobre todo, fue muy duro con la oposición y la OEA, a quien acusó de permitir lo que califica de “golpe de Estado”.

Aseveró que cuando acusaron de “fraude” los comicios no tuvo “ningún problema” en que organismos internacionales e instituciones verificaran los comicios, entre ellos la OEA.

No obstante, vio una actitud sospechosa en la forma de actuar de este organismo.

Explicó que se acordó que se publicaría un informe oficial el día 12 de noviembre, aunque luego se pospuso la fecha de entrega, a petición de la OEA, para el 13 de noviembre.

No obstante, el pasado domingo “de madrugada” y “sorpresivamente” hubo el anuncio de un informe “preliminar” que, cuando fue revisado por su equipo, tenía “más interpretación del proceso que del día de la elección”.

La OEA emitió a primera hora del día un informe que advierte de serias de irregularidades en el cómputo de resultados de los comicios, tras los que el órgano electoral dio vencedor al Presidente Evo Morales para un cuarto mandato consecutivo.

“La OEA decidió una posición política, y no técnica ni jurídica”, dijo Evo Morales.

Tras esta valoración, fue cuando dijo que el organismo está “al servicio del imperio norteamericano”.

Dijo que intentó hablar con su secretario general, Luis Almagro, para alertarle de las consecuencias de este informe y la situación de inseguridad que generaría.

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) -organismo con sede en Washington- consideró este martes que quien cometió un “golpe de Estado” en Bolivia fue Evo Morales, al que acusó de haber tratado de “robar” las elecciones del 20 de octubre.

Morales renunció el domingo a la Presidencia de Bolivia tras presiones de las fuerzas armadas y diversas protestas de la oposición ante unos comicios presidenciales del 20 de octubre que calificaron de fraudulentos. El martes, la segunda vicepresidenta del Senado se proclamó presidenta interina del país.

La OEA señaló que su misión encontró irregularidades en las elecciones presidenciales, para las cuales Morales se declaró inicialmente ganador.