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Búsqueda

Estados Unidos aún no halla al multihomicida de Maine

El comisionado del Departamento de Seguridad Pública de Maine, Michael Sauschuck, renovó las recomendaciones de mantener el confinamiento tras el asesinato de 18 la noche del miércoles

Tras el ataque masivo en el que resultaron asesinadas 18 estadounidenses en Maine, la noche del miércoles, las corporaciones policiacas de los diferentes niveles de Gobierno de Estados Unidos aún no logran detenerlo, por lo que mantienen la orden de permanecer en casa.

La policía informó este viernes en una conferencia de prensa que el rastreo se concentra en un río próximo al lugar donde fue hallado el vehículo del sospechoso.

A falta de nueva información relevante en torno Robert R. Card, el reservista de 40 años que se sospecha el miércoles ingresó en un bar y una bolera de Lewiston con un rifle de asalto y mató a 18 personas, el comisionado del Departamento de Seguridad Pública de Maine, Michael Sauschuck, renovó las recomendaciones de mantener el confinamiento.

“Vamos a estar por todas partes”, adelantó Sauschuck. “Eso no es decir que sabemos que el individuo está en esta casa, ya sabes, en esa casa o que está en esa franja de tierra, esta superficie...”, agregó el funcionario.

La búsqueda se ha reforzado en los alrededores y en las aguas del río Androscoggin, cerca del pueblo de Lisbon, a unos 12 kilómetros de Lewiston, donde fue encontrado el vehículo Subaru blanco en el que se cree que el atacante huyó de la escena.

Botes, buzos y hasta drones se han desplegado para buscar “posibles cuerpos” en el curso de agua, aunque las autoridades aclaran que no es la única línea de investigación abierta al momento.

Medios locales han comentado que el hecho de que el multihomicida siga aún a la fuga no solo tiene en vilo a los habitantes de esta parte de Maine, con su baja densidad de población y su estilo de vida al aire libre, uno de los Estados en los que más fácil resulta comprar un arma, también les ha refrescado algunos traumas pasados.

La experiencia de pasear por las calles de Lewiston o de Bowdoyn, se parece a un viaje en el tiempo a la primavera de 2020, durante las primeras semanas de la pandemia. Bowdoyn, a 25 kilómetros de los lugares de la matanza, es el lugar de la última residencia del sospechoso, donde el jueves por la noche otra falsa alarma llevó a pensar que se encontraba atrincherado en una de las casas del pueblo.