"El Paso marcha contra el supremacismo blanco y el acoso de Trump a migrantes"
EL PASO (SinEmbargo)._ Al menos un centenar de personas marcharon por el centro de El Paso, Texas, al cumplirse una semana de la matanza perpetrada por un hombre que, según las autoridades, quería matar mexicanos.
Los manifestantes también protestaron contra el supremacismo blanco y las políticas impulsadas por el Presidente Donald Trump contra los migrantes.
El grupo coreó “reforma de armas ya” y, en español, “aquí estamos y no nos vamos”.
La Liga de Ciudadanos Latinos Unidos organizó su “Marcha por un Estados Unidos Unido” al tiempo que las familias realizaban los funerales de sus seres queridos a ambos lados de la frontera.
El aspirante a la candidatura presidencial demócrata Beto O’Rourke, ex legislador por El Paso, habló en el acto. Ha acusado al presidente Donald Trump de provocar miedo y odio con su retórica, y éste ha respondido por Twitter que O’Rourke debería “callarse”.
Un detective de El Paso dijo en una declaración jurada que Patrick Crusius, de 21 años, confesó al entregarse a la policía que buscó matar a mexicanos con un fusil AK-47.
Crusius está acusado de homicidio agravado. Fiscales federales dijeron que estudian añadir cargos de crímenes de odio.
LLORAN A VÍCTIMAS DE EL PASO Y DAYTON
Se realizaron funerales el sábado de algunas de las víctimas de las matanzas en Dayton, Ohio y El Paso, Texas.
Había varios oficios para las víctimas del ataque en Dayton que dejó nueve muertos y más de 30 heridos. Por la mañana se realizó un oficio por Saeed Saleh, de 38 años, según el diario Daily News. Saleh era un inmigrante eritreo, una “persona humilde y discreta”, según un vocero de la familia.
En El Paso se oficiaba una misa de réquiem por Javier Amir Rodríguez. El estudiante de secundaria, de 15 años, fue recordado como un hábil jugador de fútbol durante una vigilia el lunes en el estadio de la escuela secundaria Horizon. Estaba en el Walmart con un tío cuando se produjo el tiroteo.
También estaba previsto el entierro de Jordan Anchondo, quien murió junto con su esposo, Andre, cuando protegían a su hijo de dos meses de edad. El niño solo sufrió una fractura de hueso, pero quedó huérfano.
Los investigadores dicen que un hombre armado abrió fuego en un Walmart el sábado pasado, donde mató a 22 personas e hirió a una veintena. El agresor, Patrick Cursius, dijo a la policía al ser arrestado que su intención era matar mexicanos.