Mueve Cuén Díaz millones: adquiere propiedades en Mazatlán y Guasave por $33 millones
Durante los últimos cinco años, el hijo del ex Rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Héctor Melesio Cuén Ojeda, realizó la compra de propiedades, en su mayoría locales comerciales o departamentos de lujo, en zonas de desarrollo en Mazatlán y Guasave.
Una investigación realizada por Noroeste en el Registro Público de la Propiedad, y en ubicaciones físicas de Guasave y Mazatlán, arrojó que Héctor Melesio Cuén Díaz, a nombre de su empresa Beisbox y su esposa Belinda Portugal, realizaron movimientos por más de 33.1 millones de pesos en propiedades entre 2018 y 2023. Cuando esas compras comenzaron, Cuén Díaz todavía era funcionario de la UAS en la Rectoría de Juan Eulogio Guerra Liera.
En su última declaración patrimonial disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia, fechada en mayo de 2022, Cuén Díaz declara tener sólo un bien inmueble: una casa de la cual no reporta valor ni características y que habría adquirido de contado.
Cuén Díaz, hijo del ahora “priista” Héctor Melesio Cuén Ojeda, encara media docena de procesos judiciales junto con el actual Rector separado del cargo, Jesús Madueña Molina, y otros ex funcionarios de la UAS, acusados de delitos relacionados con corrupción.
Incluso, las acusaciones están concentradas contra Cuén Díaz, quien hasta el año pasado ocupó el máximo cargo de la Dirección de Control de Bienes e Inventarios de la UAS y fue el encargado de negociar, avalar y firmar las operaciones por las que hoy los ex funcionarios universitarios encaran dichos procesos judiciales.
Aún después de su renuncia y en medio de los procesos, cerró el año 2023 con la adquisición de un local comercial en el Edificio City Plaza Culiacán, que se ubica por el bulevar Enrique Sánchez Alonso, en el Desarrollo Urbano Tres Ríos.
La compra se hizo con una transferencia bancaria por un millón 60 mil pesos, el 26 de diciembre de 2023, segun consta en el acta de compraventa.
El pasado que los persigue
Cuén Díaz renunció en mayo de 2023 a su cargo directivo universitario, en medio de una investigación que la Unidad de Inteligencia Patrimonial y Económica de Sinaloa realiza desde abril en su contra y la de su padre por sospechas de enriquecimiento inexplicable.
Cuén Ojeda, líder fundador del Partido Sinaloense en 2012, hoy es candidato plurinominal a una diputación federal en la quinta posición de la circunscripción que incluye a Sinaloa, impulsado no por el PAS sino por el Partido Revolucionario Institucional, ambos institutos en alianza con el llamado Frente Amplio, Fuerza y Corazón por México en Sinaloa.
Los procesos judiciales comenzaron luego de que Noroeste publicó evidencia sobre operaciones irregulares desde la Universidad, como compras a sobreprecio por 634 millones de pesos, a redes de empresas relacionadas entre sí, de familiares de los Cuén y hasta de funcionarios en activo de la UAS; así como a empresas sin domicilios formales, ni oficinas, ni identificación visible.
Además, el 28 de abril un grupo de ciudadanos presentó denuncias contra Cuén Ojeda y Cuén Díaz, acusándolos de desempeño irregular como funcionarios de la UAS.
En los últimos años, Noroeste ha publicado investigaciones periodísticas que revelaron cómo la familia del ex Rector ya sumó más de 100 millones de pesos en la compra de más de 79 propiedades, cuyas operaciones han sido de toda su familia, pero mayormente a través de Cuén Díaz y su esposa Belinda Portugal.
Luego de la renuncia, a cobrar deudas
Tras su renuncia como funcionario de la UAS, Cuén Díaz comenzó a cobrar sus deudas y realizar inversiones inmobiliarias.
Según el Registro Público de la Propiedad, hay actas de dación por adeudos de otras empresas a favor de Beisbox y de Cuén Díaz, por 14 millones de pesos en tres operaciones distintas: dos en Mazatlán y una en Culiacán.
Las operaciones con más dinero involucrado fueron en Mazatlán, pues en 2019, Cuén Díaz, con su firma Beisbox, aportó dos lotes de terreno ubicados por la Avenida del Mar, en la zona costera, para la realización de un proyecto, y a cambio recibió ocho departamentos.
En Beisbox funge de comisario José Fausto Centeno Félix, un empleado en activo de la UAS que cobra como Director “C” en Bienes e Inventarios, según consta en el acta disponible en el Registro Público de Comercio.
La escritura 132 de la notaria María Amparo Verdugo Ochoa, fechada el 19 de septiembre de 2023, detalla que el trato no salió como se esperaba debido a lo que provocó la pandemia por el Covid 19 en Sinaloa.
En virtud de que SYC Desarrollos no ha podido concluir la edificación y no pudo pagar los 24 millones de pesos acordados por el aporte y el desarrollo del proyecto, se acordó que Beisbox recibiera un departamento en condominios Marina Platino Plus, en la Marina Mazatlán, por 3.6 millones de pesos como pago parcial de la deuda.
El otro caso, fechado también el 19 de diciembre de 2023, es por la misma situación; según escritura 134 de la misma notaría 296, Beisbox recibió un penthouse en el desarrollo condominal La Ventanna, también en Mazatlán, por 6 millones 671 mil pesos que también se abona para saldar la deuda.
Y la tercera operación se registró también el 19 de septiembre de 2023, con la que Cuén Díaz se hizo de otro inmueble comercial en Culiacán, por medio de otra dación de SYC Desarrollos.
Se trata de un local comercial en el edificio City Plaza Culiacán, ubicado por el bulevar Enrique Sánchez Alonso, en una zona en pleno desarrollo comercial. Esta última operación fue por 3.8 millones de pesos, también como abono de la deuda.
El pago por ocho terrenos en una sola transferencia
Pero los intereses inmobiliarios de Cuén Díaz no sólo están en Mazatlán, pues el 1 de febrero de 2018, Belinda Portugal cerró un trato en Guasave.
Según la escritura 771, la familia adquirió ocho lotes o fracciones de terreno ubicados en una zona conocida como ejido Guasave, una zona de desarrollo comercial al poniente de la ciudad, y que se ubica por el bulevar Juan S. Millán.
Portugal, según el acta consultada por Noroeste, hizo una sola transferencia por 4 millones 280 mil pesos por los lotes a la firma Construcciones Mocorito, cuyo propietario y representante legal es Carlos Antonio Sosa Valencia.
En julio de 2010, el periódico Reforma reveló que desde el Proyecto Tres Ríos de Sinaloa hubo “movimientos sospechosos” para beneficiar a la Constructora Inzunza, propiedad de Sosa Valencia.
Recientemente, el nombre de Sosa Valencia nuevamente salió en los medios, pues la Unidad de Inteligencia Financiera realizó investigaciones por supuestas actividades relacionadas al lavado de dinero, hasta bloquear sus cuentas bancarias en 2021 y liberarlas posteriormente.
Los terrenos adquiridos por Portugal tenían diferentes precios, entre 410 mil y 840 mil pesos, y se ubican entre el bulevar y un callejón de tráfico ligero denominado Algodones. A esa zona los guasavenses le dicen el “megaproyecto”.