En menos de cuatro años, el Gobierno de Sinaloa tuvo que levantar 4 mil 800 cuerpos como evidencia de crímenes
En un día en Sinaloa el Servicio Médico Forense debe recolectar del suelo los restos de al menos tres personas que en su mayoría murieron por asesinato, y que por ende deben de ser inspeccionados para su investigación.
Esta cifra se basa en datos otorgados por el Semefo a Noroeste, facilitados mediante una solicitud de acceso a la información, en donde se documenta que de 2019 a julio de 2023 se realizaron labores para hacer levantamientos de 4 mil 803 cadáveres en los que por las condiciones de su hallazgo existió la presunción de un delito en los fallecimientos, y las condiciones de muerte debían ser investigadas.
Cabe destacar que Noroeste solicitó datos de los casos tales como la fecha de su hallazgo y traslado al Semefo, sexo de la víctima, y en caso de tener la información la edad de la persona occisa, sin embargo a estas peticiones la autoridad estatal respondió que “no se cuenta con información de acuerdo al criterio solicitado”.
Con estos datos el promedio de cuerpos levantados por el Gobierno de Sinaloa, a través de la Fiscalía General del Estado y el Semefo, es de al menos 3 personas al día.
De acuerdo a las cifras, el año en el que más personas fueron levantadas y llevadas al Semefo fue en 2019, con mil 127 casos, al siguiente año la cifra fue de mil 69 personas llevadas al Semefo, en 2021 fueron mil 11 casos, en 2022 fueron 944 casos y en los primeros 7 meses del 2023 fueron 652 casos.
El Servicio Médico Forense es una institución gubernamental que depende de la Fiscalía General de Sinaloa, a la que se llevan los restos mortales de personas que en cuyo fallecimiento existe la sospecha de que se cometió un delito por lo que deben de realizarse labores de investigación para deslindar responsabilidades.
El Semefo cuenta con dos instalaciones, una en Culiacán y otra en Mazatlán, a las que van todos los cuerpos de personas que murieron por hechos dónde existe la presunción de un delito.
En estos espacios se reciben los cuerpos de personas asesinadas, ya sea trasladados directamente desde el lugar que fue la escena del crimen y con pocas horas de diferencia desde su asesinato hasta su localización, como también personas cuyos restos fueron localizados por colectivos de búsqueda de personas desaparecidas y han transcurrido incluso años desde su fallecimiento.
La cifra total de cuerpos recogidos por el Servicio Médico Forense de Sinaloa de 2019 a junio de 2023 no coincide con el número de denuncias por homicidio doloso investigadas por la Fiscalía General del Estado, pues hay más hallazgos de cuerpos que casos de asesinato investigados.
De 2019 a la mitad de 2023 la Fiscalía estatal reunió 3 mil 179 casos de homicidio doloso y feminicidio, lo que representa mil 624 cuerpos que están fuera de estas denuncias.
Para Reynalda Chavira Pulido, buscadora de personas desaparecidas que opera en Culiacán, la cifra de cuerpos excedentes corresponde a víctimas de desaparición forzada.
Señaló que en algunos casos pueden ser cuerpos de víctimas de desaparición y posterior asesinato cuyas familias no han presentado una denuncia formal ante la desconfianza de la ciudadania para con las autoridades.
Tan solo en el grupo en el que opera Reynalda, conformado en 2021 tras la desaparición de su hijo Ernesto, hay 10 familias de víctimas de desaparición forzada que no cuentan con denuncia formal debido al miedo o a la desconfianza.
“Yo tengo 10 personas que no tienen denuncia, y su familia los está preguntando. ¿Por qué? esa es la pregunta que debería hacerse a la Fiscalía y al Fiscal (de desapariciones) ¿por qué las víctimas no confían en las autoridades?”, expuso.
El pasado 9 de julio el colectivo de búsqueda de personas desaparecidas, Sabuesos Guerreras, hizo público un caso de una madre que buscaba a su hijo desaparecido desde hace 4 años solo para descubrir que en todo ese tiempo se encontraba en el Semefo.
Alberto de Jesús Verdugo Rivera desapareció el 25 de mayo de 2020, la Fiscalía lo ingresó a la Semefo el 2 de octubre del mismo año y fue entregado a su madre el 7 de julio de 2024.
La líder del colectivo, María Isabel Cruz Bernal, señaló que la madre de Alberto de Jesús lo reconoció viendo fotografías de cuando el cuerpo de su hijo llegó a las instalaciones del Semefo.
“Somos insistentes en el tiempo, porque queremos que quede constancia de las omisiones en este caso y donde una vez más nos damos cuenta de que no hay una base de datos, no hay confronta como tal”, resaltó Cruz Bernal.
De acuerdo con cifras del colectivo Sabuesos Guerreras, en Sinaloa hay 2 mil 300 cuerpos, restos u osamentas de personas que aún no han sido identificadas, repartidos en fosas comunes, el Semefo y panteones privados.
En el caso de los cuerpos de personas no identificadas que son resguardados por Semefo, la Fiscalía General del Estado de Sinaloa tiene en su portal un apartado en el que se enlistan los casos.
La lista de occisos se realiza con la intención de que familiares de los fallecidos los reconozcan mediante fotografías de primeros planos de los rostros de los cadáveres, o fotos de las pertenencias con las que fueron encontrados.
Reynalda Chavira señaló que la estrategia de identificación aplicada por el Semefo no funciona, al no existir labores de investigación correspondientes a la FGE, lo que propicia que los restos de personas víctimas de crímenes se acumulen en las instalaciones gubernamentales.
“¿Cómo vas a conocer a tu hijo en unas fotos de la Semefo si ni siquiera tiene una denuncia? Es como una cadenita esto, si Fiscalía no le pone propósito a su trabajo, en la Semefo va a seguir pasando lo mismo, se van a seguir amontonando”, mencionó.
EL CENTRO DE IDENTIFICACIÓN
La estrategia del Gobierno de Sinaloa para combatir la crisis de cuerpos no identificados que se resguardan en Semefo es la implementación de Centros de Resguardo Temporal e Identificación Humana, espacios que se proyecta poner en operación en Culiacán, Los Mochis y Mazatlán.
Cada uno de los CertiDh contará con un memorial al centro de las instalaciones, módulos de servicios sanitarios para hombre y mujer, así como un laboratorio integral forense para pruebas dactilares y en un futuro próximo de ADN, con capacidad de resguardo refrigerado para 50 cuerpos.
Además se consideran áreas de apoyo social y entrevistas para atender a las personas que acudan a estos lugares para la identificación de cuerpos que pudieran ser de sus seres queridos.
La primera proyección del Gobierno de Sinaloa fue poner a funcionar el centro de resguardo de Culiacán en diciembre de 2022, pero a un año y siete meses de esta fecha las instalaciones no han comenzado con la identificación de cuerpos.
El 22 de julio el Gobierno estatal anunció que el centro de Culiacán comenzaría a operar en agosto de este 2024, sin embargo no se especificó con qué acciones iniciarán operaciones.
“Lo que yo digo es que sí, nuestros desaparecidos están desaparecidos aún después que llegan a Semefo”, puntualizó Reynalda Chavira.
