Grupo Alerta celebra 80 años de trayectoria empresarial en Sinaloa

MAZATLÁN._ A lo largo de 80 años, Grupo Alerta ha enfrentado diferentes retos, lidiando con contextos sociales y mundiales complicados, desastres naturales, fenómenos económicos y hasta climatológicos.

Sin embargo, siguiendo los pasos de su abuelo Rodolfo Rodríguez Arnold; y de su padre, Francisco Madero Herrera, el ingeniero Rodolfo Madero Rodríguez ha contribuido a consolidar a Grupo Alerta como uno de los corporativos más importantes en Sinaloa y México.

Durante un desayuno empresarial organizado por Coparmex Mazatlán, Rodolfo Madero compartió la historia del grupo empresarial desde sus inicios en 1945, cuando su abuelo, Rodolfo Rodríguez Arnold, comenzó con la distribución de gas, superando múltiples dificultades.

“No se consumía casi el gas; ya había otra compañía que se había fundado en el 45 y ya había venta de gas, pero era muy poquita. Entonces, al principio, tenían que vender la estufa y el cilindro pidiéndoles que cambiaran de la tractolina o de la leña o del carbón. O sea, era un cambio de costumbres, eso costaba mucho trabajo”, dijo.

El empresario también relató cómo, en los primeros años, “se repartían los cilindros en diablitos, subían un cilindro, lo llevaban aquí a la vuelta de la esquina y lo entregaban. Ese fue el esfuerzo inicial de tratar de meter este producto en la ciudad”.

Más adelante, su padre, Francisco Madero Herrera, se interesó en la contaduría y se convirtió en corredor de bolsa. A petición de su suegro, Rodríguez Arnold, tomó las riendas de la empresa Gas del Pacífico.

Tiempo después diversificaron sus giros y productos, fundando la cadena de tiendas Comercial del Hogar, donde vendían aparatos eléctricos. Al analizar la inclusión de televisores en el negocio en 1964, Madero comentó que consideraron primero la necesidad de contenido para transmitir, lo que impulsó la creación de Canal 3, ahora conocido como TVP.

Estas decisiones estratégicas llevaron a Grupo Alerta a expandirse a otros sectores como el inmobiliario, automotriz, educativo, energético y de comunicaciones.

Madero Rodríguez recordó que su padre, invirtiendo desde Mazatlán en la bolsa de valores, “seguía ganando dinero y el negocio requería inversión”, por lo que pidió a su abuelo permiso para invertir.

“Ya para entonces mi abuelo le había dejado la administración del negocio de mi papá, ya no se metía mi abuelo”, añadió.

A principios de la década de los 90, Rodolfo Madero comenzó a involucrarse en la resolución de problemas dentro de las compañías del grupo, por petición de su padre.

“Mi papá me dice ‘Oye hijo, ya me estoy cansando, necesito que te vengas y estés aquí cerca, para que vayas aprendiendo bien el negocio’. Muy bien, entonces cerramos allá el changarro, la casa la entregué”, relató Madero. “A veces me salió bien la jugada, a veces no tanto”.

Con el tiempo, Rodolfo Madero asumió la dirección del grupo empresarial.

“Al tiempo, mi papá dijo ‘Saben qué, ya no vengo yo en la tarde’, y entonces nada más iba en la mañana a ver sus asuntos, pero ya los directores iban conmigo. Y un día llegó por sus ‘chivas’, recogió todo y ya nunca más volvió”, recordó.

Madero Rodríguez subrayó que a pesar de los problemas, los baches y las aventuras vividas durante su aprendizaje como líder empresarial, la constancia y la estrategia han sido siempre clave para salir adelante.

Al finalizar el evento, recibió un reconocimiento de manos de la presidenta de Coparmex Mazatlán, Yudith Verónica Estrada Osuna, y el vicepresidente, Javier Lizárraga Mercado, por su trayectoria empresarial.