"Invita el tanatólogo Octavio Robledo a realizar terapia ocupacional en casa"
Ante las situaciones atípicas o extremas que se están experimentando ante la pandemia del coronavirus, es necesario aprender a saber cómo actuar ante la incertidumbre, para no dejarse llevar por noticias falsas o el pánico, así lo afirmó el tanatólogo Octavio Robledo.
El psicólogo invita a la comunidad a eliminar aquello que le es tóxico en su vida, más aún en este confinamiento forzoso. Explica el cómo protegerse y cómo afrontar esta situación desde el punto de vista psicológico.
“Primero tenemos que entender que es una enfermedad y una situación que será larga, no es algo de un mes, ni dos meses, se está estimando que será hasta julio y agosto cuando van hacer los puntos más vulnerables, los más delicados, entonces, cuando hay, a parte una medida que es un encierro forzado, porque nadie lo decidimos, estamos convencidos, pero al fin y al cabo es un encierro forzado, en donde esto va a traer graves consecuencias emocionales” comenta.
“Ahorita estamos preocupados por la cuestión física y estadística de la pandemia, que es muy importante, pero estamos dejando a un lado toda la cuestión emocional y tanto vale nuestra preocupación de nuestro cuerpo físico, como nuestra parte mental”.
Informa que en el encierro forzoso suelen suceder situaciones no muy buenas, ya que se puede despertar la violencia intrafamiliar.
“Los efectos del encierro, que se llama Síndrome de Soledad Inquieta, o Síndrome por Confinamiento, puede resultar violencia intrafamiliar, abuso sexual, regresar a drogas o aumentar el consumo, y de droga te estoy hablando desde el alcohol, tabaquismo, hasta todas las pastillas y todo, hasta polvos. Porque socialmente el alcohol y el tabaquismo lo hacemos a un lado como si fuera perdonable, como si no hiciera daño, pero puede llegar a situación de mucho estrés, de mucha tensión y esto puede pasar hasta un pánico colectivo y nos puede llevar a una sicosis colectiva. Aclara, no estoy alterando a las personas, sino es informar, informar científicamente”, dice.
Para dejar a un lado las emociones negativas como el estrés, la fatiga y el pánico, que pueden ser tan contagiosas, asegura que se deben de dejar las amistades tóxicas que se tienen en las redes sociales.
“Uno de los problemas que está pasando es una serie de rumores, una serie de post, de información vía redes sociales, en donde nos vemos afectados por información que no es científica”, dice.
“Hay que tener mucho cuidado en eso, lo único que yo recomiendo es apégate a las conferencias de las seis de la tarde, en el caso de nuestro horario, del doctor Hugo López Gatell, nada más, es lo único que tenemos que escuchar, afortunadamente, mis respetos, es uno de los mejores epidemiólogos de México y de América, y maneja un lenguaje súper claro, tiene la paciencia, el respeto hacia los periodistas y sus respuestas son bastante claras”.
Asegura que López Gatell tiene un objetivo principal en esta pandemia, que lo tiene muy claro y hay que seguir las instrucciones que da.
“Y también tenemos muy claro, al principio no, pero yo creo que la gente ya lo entendió, que no es un político, que es un doctor que está dando la cara; es un doctor que está en contra de todo lo que está haciendo nuestro querido Presidente, pero él tiene un objetivo médico y muy bien porque simplemente es de los pocos médicos que la Organización Mundial de la Salud lo ha felicitado por cómo ha llevado las cosas”.
“Qué bueno que tenga esa paciencia, porque imagínate la presión de redes contra él, de que pongamos las medidas sanitarias que tiene Italia o que tiene España, ellos tienen un mes o dos meses adelante de nosotros, si las usamos desde ahorita, son como cartuchos quemados, que no van a funcionar en un futuro y él está aguantando, aguantando, todo esa presión y está haciendo su trabajo”.
Lo recomendable, dice, es seguirlo un día y dos no, para no preocuparnos, pero sí ocuparnos.
“Yo recomiendo que lo sigan un día sí, dos no, o sea, estadísticamente nos puede preocupar más, entonces tenemos esa fuente muy veraz, muy clara, muy respetuosa, es lo único que tenemos que seguir, toda la demás información que ahorita anda navegando en redes no”.
De momento, señala que hay un miedo individual normal, ante una emergencia sanitaria, pero que se debe ser cuidadoso para no caer en una psicosis.
“Ahorita es un miedo individual, pero podemos llegar a un pánico colectivo, ese es el problema, y del pánico colectivo podemos llegar a una psicosis colectiva; es una emergencia sanitaria internacional, en donde nos provoca miedo, pero ahorita el miedo es lo normal, el miedo es una respuesta natural ante algo desconocido, ante algo anormal. El tener miedo es lo normal, pero la gente está cayendo en paranoia, porque siente miedo, pero es normal, nadie habíamos vivido esto”.
“Creo que tenemos que ser muy concretos, incluso ser selectivos en nuestras redes, una persona que ya se dañó emocionalmente, que ya está en paranoia, que ya su respuesta emocional no es correcta, no es sana, elimínalo, después lo volverás a invitar a tu grupo de contactos, pero si me está dañando, es como si me daña el alcohol, si me daña una relación tóxica, pues la tengo que quitar de mi vida, no tengo por qué estar en grupos tóxicos ahorita”.
Señala que hay mucho qué hacer en un hogar, pese a que pasen mucho tiempo juntos todos los integrantes de una familia.
“Hay mucho qué hacer en una casa, entiendo que hay muchas personas que toda su vida profesional o laboral es siempre fuera, pero ahora tenemos un gran reto; ahorita peligra, aunque estamos muy temprano para decir eso, pero se rumora que peligra el año escolar, pues a lo mejor sí, pero es el reto que tienen los papás, de enseñar a las tareas a los hijos, el reto que tiene para comunicarse como familia, para quitar ciertos juegos de videos violentos y cambiarlos por juegos de mesas y ya dejarlos establecidos como familia. Hay muchos retos y si se pierde el año escolar, ni modo, pero se van a ganar muchas cosas también, si los papás saben adecuarse a la situación”.
“Tienen que buscar conductos, buscar entretenimientos sanos, el otro día me mandaron toda una liga de actividades y es una liga de la Secretaría de Salud, es toda una serie de actividades que se pueden hacer y que dejamos de hacer por la tecnología; la tecnología nos ha traído muchos beneficios, pero también nos ha traído retraso emocional, psicoafectivo, pero es regresar a ciertas actividades que son sanas”.
Debido a que en el País, según las estadísticas, se adelantó el confinamiento, asegura que se ha afectado un poco, en lo emocional, a las persona.
“Creo que mucha gente se cerró a temprano tiempo, antes de, y por un lado eso les está afectado; por otro lado era gente que no está preparada para este tipo de confinamiento y a partir de ahora tenemos que aprender que la enfermedad será así”.
“Los papás que no tienen paciencia, porque no están acostumbrados a convivir tanto tiempo y juntos, hay varias cosas. Uno, que es normal, que mi reacción ante mi hijo es normal, porque yo siempre trabajo afuera, eso me va a dar una calma de que es una reacción normal”.
“Dos, ¿qué soluciones tengo?, a mí me gusta jugar baraja, pues vamos a jugar baraja con el niño; siento que anda mal en matemáticas, pues me voy a sentar a que hagamos ejercicios de matemáticas; es buscar, primero concientizarnos de que mi reacción, que grito de coraje y de falta de empatía es normal, no me estoy volviendo loco, después ver qué posibilidades tengo de solución y platicarlo. Ejemplo, a mí me gustaría que jugáramos al uno y le dices, 'no, ese es aburrido, dime otra opción', 'el scrabble', te contesta, 'ah muy bien, entonces juguemos al scrabble, pero a la tarde jugamos al uno', es negociar, tenemos que aprender a negociar como familia”, ejemplifica.
Señala que hay que utilizar bien el tiempo para cambiar hábitos en pro del bien de la familia.
“En muchas casas no se da porque hay un padre ausente, en donde la mamá ordena, o al revés, a un padre autoritario, y no, tenemos que acabar con todos esos malos hábitos, tenemos que verlo como un reto, con nuestro propio tiempo para cambiar ciertos hábitos que no están funcionando, nada más, no hay que castigarnos de que somos una familia tóxica, no hay por qué colgarnos una etiqueta, simplemente hay que ver qué podemos hacer de provecho.
“Otra cosa dentro de las medidas es que conozcamos nuestra resiliencia, o sea, nuestra resiliencia es la fuerza interior que tenemos; si a una mujer que le matan a un hijo se recupera por su resiliencia, que no nos recuperemos nosotros ni tengamos una respuesta positiva por un mes de encierro, hay muchos estudios que indican que si tenemos la capacidad y la fuerza para solucionar esto, lamentablemente desconocemos nuestras capacidades, entonces es tiempo de reconocerlas individualmente”.
Para no caer en la desesperación está la terapia ocupacional
“Lo que tenemos que hacer en este distanciamiento social es terapia ocupacional. Es ceder, la esposa tal vez lo pongo hacer un paste, y a lo mejor nunca te imaginaste en la cocina, pero por qué no, no se le va a perder nada, también es un reto para esas conductas machistas, no pasa nada”.
“Una de las grandes quejas es el que no tengo tiempo y ahora sí lo tenemos, pero hay que saberlo administrar y el que no lo sepa administrar puede caer en un desgaste emocional, que ahí comienza la negociación, desde un niño chiquito puede colaborar en los quehaceres del hogar”.
De no poder con estas situaciones, señala, que es ahí donde ya deben de pedir ayuda profesional.
“Si no podemos con esto, hay que pedir ayuda profesional; en el puerto hay un grupo de psicólogos que se están organizando y formaron un grupo para dar terapias gratis”, explica.
Para mayores informes, los interesados se pueden comunicar a los números de teléfonos 669 161 9807 o bien, a Casa Moma, 982 5236.
ACTIVIDADES A REALIZAR
Eliminar a las personas tóxicas de tus redes sociales.
Aceptar que el confinamiento será largo.
Realizar terapia ocupacional en familia.
Aceptar que tenemos miedo, porque es normal.
Atender las indicaciones de Salud oficiales.
Y si esto te rebasa, pedir ayuda profesional.
El psicólogo sugiere realizar actividades para que la cuarentena sea más agradable.