Una fiesta de música, beisbol y emociones en el Juego de las Estrellas
MAZATLÁN._ En un evento que consiguió realizar una amalgama entre el talento artístico y el deportivo, las figuras del regional mexicano dejaron de lado los escenarios, para enfrentarse en un encuentro amistoso de beisbol, demostrando así su pasión no solo por la música, sino también por el “Rey de los deportes”.
Durante la séptima edición de este evento, se rindió homenaje a uno de los artistas más distinguidos a nivel nacional e internacional de este género, José Ángel Ledezma “El Coyote”, por sus más de 36 años de trayectoria artística.
“Un saludo para todo el público que vino hoy al Juego de las Estrellas, esto se los debo a ustedes, gracias a mi madre por traerme a este mundo, gracias a Dios y a la Virgen de Guadalupe por darme el trabajo de ser cantante”, dijo.
“Gracias por tomarme en cuenta para este homenaje. Mi madre es el ser que su servidor más quería en esta tierra y Dios la tenga en su santa gloria. (Este homenaje) Se lo dedico a mi madre hasta el cielo y a toda esta gente”, añadió.
Conmovido y entre lágrimas, “El Coyote” recibió el reconocimiento de las manos de la presidenta del Sistema DIF Estatal, Eneyda Rocha Ruíz, junto a la alcaldesa Estrella Palacios Domínguez y la Secretaria de Turismo de Sinaloa, Mireya Sosa Osuna.
Tras el homenaje, la fiesta arrancó en el Teodoro Mariscal, cuando saltaron al terreno de juego el Equipo Azul y Equipo Amarillo, que serían los protagonistas de la velada.
El primero en salir a batear, fue el homenajeado José Ángel Ledezma “El Coyote”, al mismo tiempo que la Banda Puro Quelite, comenzara a hacer vibrar el escenario.
Al culminar dentro del diamante, “El Coyote” no dudó en subirse al escenario para interpretar temas como “Te soñé”, “Árboles de la Barranca”, “Encerrado” y cerró con “Amor Pajarito”, donde cautivó e hizo cantar a los miles de asistentes que se reunieron en este evento.
Durante la velada, los artistas que integraban los dos equipos que se encontraban dentro del terreno de juego, estuvieron turnándose para subirse a cantar junto la Banda Puro Quelite distintos temas y conectar con el público.
Entre los que compartieron escenario se encuentra Fer Corona, Pequeños Musical, Ludwica Valles, Hermanos Vega Jr, César Navarro “El Tiburón”, Meño Segovia, Grupo Clasificado, Nathan Galante, Carlos Sarabia, Yobanco Ibarra, El Bebeto, Ruby Estephanía, Alan Arámburo, Banda San Juan, y Banda Palma Blanca.
Éxitos como “Provócame”, “Dueño de ti”, “Disculpe usted”, “El amor y el dinero”, “Cada vez te extraño más”, “Nomás este rey”, “¿Qué me vas a dar?”, “El agüitado”, “Ya supérame”, “La escuelita”, “Lo Legal”, “Acabame de Matar”, “El Muchacho Alegre” y “El ausente”, fueron algunos de los que hicieron cantar y bailar a los presentes interpretados por estos artistas. Sin embargo, uno de los momentos que más hizo cantar y bailar al público, fue cuando todo el Equipo Azul se subió al escenario a celebrar su victoria, interpretando temas como “Pelotero a la bola”, “El Corrido de Mazatlán” y “El Sinaloense”, donde también recibieron su trofeo como campeones.
Una visita inesperada
Una de las sorpresas de la velada fue el arribo de la cantante Ana Bárbara, quien se ‘desfiló’ por el campo del Teodoro Mariscal, saludando a la gente y conviviendo con los cantantes.
Acompañada por el cantante Horacio Palencia, la “Reina Grupera” se subió al escenario para saludar a la audiencia, además de cantar su tema “Fruta Prohibida”, junto a la Banda Puro Quelite.
Así mismo, Ana Bárbara coreó algunas estrofas de sus más reconocidos éxitos como “Lo Busqué” y “Bandido”, para finalizar haciendo dueto con Horacio Palencia al interpretar la canción “Mi Razón de Ser”, de la Banda MS, acompañados de aplausos y ovaciones.
Finalmente, la combinación del deporte y el espectáculo musical hizo de esta edición del Juego de las Estrellas, una velada inolvidable para los miles de asistentes que disfrutaron de este evento. Con este tipo de eventos, se continúa fortaleciendo el vínculo entre la música y el deporte, dos pasiones que unen un gran número de seguidores en un mismo escenario que desbordó magia y diversión.
