"Va Letras en la Plazuela por más autores significativos"

Nadie creía que permanecería, pero en su tercer aniversario Letras en la Plazuela se pronuncia por continuar rescatando la obra literaria de autores significativos, destacó su coordinador César Ibarra.

"Nos interesa disfrutar libros que casi no se mencionan, pero que tienen gran valor como memoria de los pueblos", expresó Ibarra, recordando haber retomado el libro del padre de Sandra y Rosy Robles, de Inés Arredondo, Elena Garro y, en esta ocasión, de Manuel Sánchez Loaiza, padre del monero Ricardo Sánchez Bobadilla.

Debajo de la carpa, los escuchas atentos "acompañaron" en su ir y venir a Juventina, aquella mujer de color moreno que brillaba con el sol, que recorría la iglesia, el río Piaxtla y que supo morir con el valor que tuvo para vivir, y así lo describe don Manuel en el libro Con el alma en El Chaco, editado por el colectivo Nahueri, que dirigía Rina Cuéllar.

Bobadilla lee y mira a su padre, quien algunas veces recuerda esos pasajes de su vida en su tierra San Ignacio, y otros se le escapan por un padecimiento que sufre desde 2009.

Don Miguel, de 80 años, a veces asienta y ríe cuando escucha en voz de su hijo el relato que dedicó a don Daniel Peñuelas, aquel hombre que tenía por gracia tocar la guitarra, por ello se llevaba en las cantinas. Pero también tenía otra gracia, colgarse de un árbol, por cerveza, dice Bobadilla, aunque su padre no lo especifica así.

El libro Con el alma en El Chaco, contiene historias entrañables, escritas como su título lo dice, con el alma y de gran significado sea o no sanignacense. Para los primeros por ser cercanas, y para los otros, por la sensibilidad que trasmite el autor de lo que fue su cotidianidad.

Bobadilla preguntó a su padre cuál poema leer: Carretera a San Ignacio fue el elegido.

"Don Miguel", relató Bobadilla, "tuvo un amor en San Ignacio, pero la familia de ella lo rechazaba. Él dice que por prieto y feo, pero era por que no tenía dinero".

Y enseguida dio lectura a un poema amoroso, después recordó el relato de Los arrieros, que iban a alejados pueblos y que de chico don 

Miguel ayudó a cargar.

Bobadilla agradeció la invitación a participar en Letras en la Plazuela y aplaudió el objetivo de este programa porque dijo la gente que camina por la plazuela Obregón, se sienta y se va, pero escucha literatura en una sociedad enferma de violencia y ambición.

Haber leído la prosa y verso de su padre fue un buen ejercicio para su memoria, indicó. A veces se pierde, pero a veces tiene una lucidez impresionante.

Ibarra destacó que Letras en la Plazuela llegará a otros municipios del Estado, próximamente.

PARA SABER

Letras en la Plazuela es una iniciativa ciudadana del escritor César Ibarra, que surgió el 16 de febrero de 2014.

Cada jueves, a las 11:00 horas, en la Plazuela Obregón, escritores, directores de teatro, músicos, actoree, leen literatura al aire libre.