"Un show distinto, pero igual de divertido con Virulo"

Esperar ver a Virulo es de por sí una gran expectativa de diversión, y con la suma esta vez del Tatuas, el resultado fue de disfrute total para el público que se dio cita al teatro Pablo de Villavicencio.

Las carcajadas fueron de principio a fin la noche del miércoles, en la que se festejó una amistad, la de Arriaga con Virulo y "el amor a primera vista" de este humorista cubano con Sinaloa, desde hace 25 años.

Las carcajadas fueron motivadas con reversionadas obras, como Las mujeres quieren, en la que se vio en escena a "Fito" y Eduardo Arriaga, Míriam Valdez, y otros actores de la compañía, en singulares personajes, incluso cantando, para sorpresa de la audiencia.

Alejandro García, acompañado de su amigo Rolandito Valdez, en el teclado y percusiones, desde que saludó lo hizo recurriendo al doble sentido, incluso aludiendo a este su compañero de décadas, con comentarios como que ambos son “sexagenarios”, o sea “ajenos al sexo”, y que cuando llegan a un hotel lo primero que hacen es preguntar dónde está la farmacia más próxima, a diferencia de que cuando se conocieron, el percusionista preguntaba por la zona roja.

Virulo, de profesión Arquitecto, inició su concierto hablando de la época libidinosa de Rolandito, quien conoció a una muchacha que lo golpeaba, y él le aconsejó que cuando ella le pegara Rolandito gritara más alto para que la gente, como es tan chismosa, creyera que él era el que le pegaba, y así cambiara la opinión pública.

Y Virulo de ello hizo una canción y la grabó: La golpeadora. Esta cumbia contagió el ritmo a los presentes en el teatro, la última noche de febrero.

Con su conversación, el cubano transportó a Ámsterdam, cantó reggaetón, habló de las buenas y malas relaciones políticas y culturales entre Cuba y México, pero sí con mucha afinidad sexual, como la tiene esta isla con muchos otros países.

De un cubano con malas intenciones que conoció en Zacatecas, que con lágrimas en los ojos le contaba la historia de su vida, hasta de eso él hizo una canción, El guaguancó del goloso, que se hace con muchos instrumentos musicales, y le tocó a Rolandito hacer todos estos sonidos con la boca.

“Señorita mexicana, pasada de los 50, de paseo por la Habana busca un novio con urgencia, Chaparrita ten cuidado, le decían todos sus cuates, que algún hombre aprovechado te va a hacer un disparate”, cantó Virulo una pieza con sentimiento en este evento que forma parte del Festival de Primavera del Isic.

Se refirió a un programa que odia desde niño, aunque le gustan las rancheras mexicanas de pecho amoroso, de las que 100 de ellas son de hombres que fueron abandonados por ellas, relató.

“Conozco una mexicana, me enamoro, me caso, llevo 30 años casado con una mexicana y el susto no se me quita”, expresó entre risas y gritos.

Tatuas y Virulo

Virulo comentó que la participación de elenco del Tatuas le da carácter a su espectáculo, y éste se repetirá este viernes, a las 20:00 horas.

“La gente se sorprendió de esa viñeta. Le da un poco de carácter y de distinción al espectáculo”, dijo el humorista a Gabriel Mercado en Noticieros Noroeste, la mañana de este jueves.

Fito Arriaga, director del Tatuas, consideró que esta sinergia con Virulo se ha cultivado durante 25 años, y al espectáculo de Las mujeres quieren él le puso la música, y se trata de una adaptación de la obra con la que se abrió el teatro Óscar Liera.

“Ahora no solo viene a festejar sus 25 años, en el escenario realizar este tipo de afinidad, no es fácil, son cosas que Virulo ya ha hecho, y lo hace bien, es un gran comediante, un gran actor, hace como 8 mil personajes en una noche y no es fácil que la gente vea la imagen de lo que él de pronto hace y nosotros estamos representando”, señaló Arriaga.

“Para nosotros es un reto actoral y un ejercicio importante escénico. Ponerse a los brincos en las tablas con este señor, no es tan facilito”.

VIERNES 2

20:00 Espectáculo de Virulo, con la intervención del Tatuas, en el Teatro Óscar Liera del IMSS. Adquiera su boleto.