"Un poema no es una confesión, asegura el poeta Christian Peña"
La poesía no tiene que ver necesariamente con las emociones de su autor ni el poema ser una confesión, pero lo que sí debe tener es una voz, consideró Christian Peña.
Al presentar el libro Short stories, con el que ganó el Premio Nacional de Literatura "Juan Eulogio Guerra Aguiluz", convocado por la Universidad Autónoma de Sinaloa, en la categoría de Poesía, Peña aseguró que en su obra no hay una confesión necesariamente, ni tiene que ver directamente con las emociones que él pueda tener.
"Para ser franco, mis vivencias pueden ser en algunos momentos pobres, de cara a este encierro, no tengo tantas historias interesantes, vivo de la cocina a la recámara", dijo durante la presentación en línea que se llevó a cabo durante la Feria del Libro de Los Mochis.
Peña estuvo acompañado del poeta mochiteco León Cartagena, quien destacó que Short stories tiene una estructura distinta, más apegado a la forma clásica de un libro de poesía, alejado un poco de la especie de ensayos líricos donde tomaba parte de de una cierta investigación.
"Era como si fuera un verso, una prosa o poética académica. Este, por lo menos de manera estructural, es un libro más de poesía y el nombre da un indicio de qué va el libro”, señaló Cartagena, para luego cuestionar si fue intencional cambiar la estructura.
"El autor dijo que “Short stories” son poemas que fueron surgiendo uno por uno y de pronto llegó el momento de unirlos.
Pero éste aseguró que no.
"Siento que en la medida que voy recolectando los libros que escribo, les voy dando cierta estructura, algunos en un principio ya tienen esa estructura, pero en Short stories no, son poemas que fueron surgiendo", dijo.
"Este libro quizá podría responder a lo que se conoce como la forma de un libro de poemas, abundó, que son como poemas por acumulación que encuentran un lugar dentro del libro.
"Lo que me interesa de esto, y que tiene que ver con el título, es que tenía que ver con contar. En este caso la versificación y los textos son más prosaicos o tienden a contar historias que son inventadas bajo la influencia de otras voces, es un poco entre la autoficción".
Cartagena comentó que con la lectura de algunos poemas, como La edad de cristo, le hizo pensar en el 'yo lírico' y le preguntó si consideraba que su disciplina era más parecida a la de los narradores.
"Los poetas somos más dispersos al trabajar y solo nos sentamos a reunir esas libretas dispersas, ¿tú tienes disciplina de escribir a diario?", preguntó.
Peña comentó que su proceso en cada libro es distinto.
"Primero tengo el título del libro y tengo que escribir, porque tiene que ver con algo que he estado pensando, pero me interesa más el proceso del libro que el libro final", dijo.
"En otros libros, como el de Villaurrutia me interesaba la investigación, con disciplina de narrador de novela policiaca, llevar el verso a lo más prosaico, el lenguaje que pudiera tener un policía, en ese sentido es mucho más puntal para mí que en vez de reconocer un proceso de trabajo, o una voz en cada libro, reconocer los ecos en cada uno de ellos".
Señaló que tiene un libro sobre el caballo de aquiles, centrado en la mitología enteramente y que actualmente escribe uno de mitología.
"Considero que de pronto puedo ser un tanto curioso, un libro como este de Short stories no tienen nada central, pero sin duda algunos poemas se van mostrando muchas obsesiones".
Al final leyó algunos de los poemas del libro, entre ellos El tránsito de Venus y Cigarro.
EL AUTOR
Christian Peña nació en la Ciudad de México, en 1985. En 2016 ganó el Premio Nacional de Literatura Gilberto Owen, por Expediente X.V.; en 2014, el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes por Me llamo Hokusai y el Premio Nacional de Poesía Efraín Huerta en 2013 por Veladora.