Operación London Bridge: así se vivirán los próximos 10 días tras muerte de Isabel II
“El Puente de Londres[London Bridge] ha caído”, escuchó este jueves la Primera Ministra Elizabeth Truss. Fue el primer paso de una serie de planes detallados hasta la menor minucia una vez que la reina de Inglaterra, Isabel II, ha muerto con 96 años, 70 de ellos en el trono. Se trata de la Operación London Bridge, y de la Operación Unicornio (Operation Unicorn), adaptada al fallecimiento de la mandataria en tierras escocesas, como acabó sucediendo hoy.
La adaptación de la Operación London Bridge a la muerte de Isabel II en Escocia, a donde viajó para hospedarse en el Castillo de Balmoral, se codificó con el nombre de Operación Unicornio, una pequeña desviación del proceso de los primeros 10 días posteriores a su fallecimiento.
Este jueves es calificado como el “D Day” y los días posteriores tomarán los números tras su muerte: “D+1” será el día siguiente a su fallecimiento, es decir, este viernes, y así hasta el “D+10”, cuando se ejecutará el funeral de estado. La planeación es detallada y las instrucciones son minuciosas para estas jornadas.
De acuerdo con el diario The Guardian, los planes variarían sobre el reposo de su cuerpo en las primeras horas. Luego de su fallecimiento, será llevada primero al Palacio de Holyroodhouse, en Edimburgo, a donde deberá ser trasladada por tierra en los primeros dos días tras su muerte, entre el viernes y sábado.
“Los planes también incluyen una procesión ceremonial a lo largo de la llamada Royal Mile, o Milla Real, que comunicada el Castillo de Edimburgo con el Palacio de Holyroodhouse. Ahí se ofrecerá un servicio de 24 horas a donde asistirá la familia real y será abierto al público”, indicó el diario inglés.
Después de esas primeras jornadas, el ataúd será enviado a Londres, si es posible, en el tren real, pero en caso de tener que ser enviado por aire, se activará la Operación Overstudy.
El féretro será recibido en el Palacio de Buckingham antes de la procesión más grande planeada para la capital, que deberá ocurrir a cinco días de su muerte, es decir, el próximo martes 13 de septiembre (D+5).
Operación London Bridge
El fallecimiento de la reina convirtió inmediatamente a su primogénito y heredero, el príncipe Carlos, en rey. Antes de hacerse público su fallecimiento, una “cascada de llamadas” de máxima discreción se ejecutaron a lo largo del Gobierno británico, de acuerdo con los documentos obtenidos por Politico, quien reveló detalles nunca antes conocidos de la operación.
Primero, el secretario privado de la reina informó a la Primera Ministra Liz Truss, así como a otras altas autoridades. A continuación, ocurrió la notificación oficial por parte de la Casa Real al conjunto de la población, como ocurrió sobre todo a través de las redes sociales oficiales de la corona y por la BBC.
El plan obliga a las distintas instituciones de Gobierno en todos los rincones del país que las banderas bajen a media asta en señal de luto y homenaje en los primeros 10 minutos tras la muerte de Isabel. “La página web de la Casa Real se teñirá de luto, así como las redes sociales”, señala el documento, actualizado a los tiempos digitales.
La Primera Ministra es la primera en hablar, como lo hizo Truss, y en cuestión de horas se reunirá con el nuevo monarca, que se dirigirá a la nación ya como rey de pleno derecho, aunque no se haya producido la entronización formal. “Entramos en una nueva era de nuestra historia tal y como habría deseado su majestad. Dios salve al rey”, ha afirmado Truss como colofón a un breve discurso a las puertas de Downing Street, donde ha recordado la figura de la difunta monarca.
En las próximas horas, se anunciará un minuto de silencio a nivel nacional.
En el quinto día tras la muerte (D+5), habrá una procesión desde Buckingham hasta Westminster, donde se celebrará a su vez una misa. Se abrirá durante tres días y de forma prácticamente ininterrumpida –23 horas al día, según el documento– habrá una capilla ardiente en el Palacio de Westminster, para lo que los ciudadanos puedan dar su último adiós a Isabel II.
Tras el funeral, el cuerpo será enterrado en una tumba de la cripta real de la capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor. Allí reposan los restos de su difunto marido, el príncipe Felipe, que falleció en abril de 2021.
Los cambios significativos
Uno de los más significativos es que en la nueva moneda británica se acuñará el retrato del nuevo rey y la de Isabel II se irá retirando lentamente de circulación, mientras que el himno nacional cambiará de Dios salve a la reina a Dios salve al rey.