‘López Saenz, Verdades Descubiertas’, se inaugura este viernes, en el Masin
Obras que nunca han sido expuestas en Culiacán, y del Acervo Isic-Masin, así como piezas de colecciones particulares integran la exposición “López Saenz, Verdades Descubiertas”, de Antonio López Sáenz, que se inaugurará este viernes 24 de marzo, a las 19:00 horas en el Museo de Arte de Sinaloa.
La muestra, de acuerdo con un comunicado del Instituto Sinaloense de Cultura, está conformada con un cuerpo de obra que va desde la época de los 70 hasta piezas más actuales.
Es un viaje a través de la serenidad que al mismo tiempo genera una complicidad con el pincel y los colores que inauguran en nosotros nuevos espacios que invitan a la reflexión.
En ella se presentan dos núcleos temáticos: la familia y el mar. Hay aquí personajes y edificaciones que parecen más surgidos del paisaje que les rodea; un lenguaje esencial de gestos y posturas amaridados con la recuperación sutil de las atmósferas.
Antonio López Saenz viene a paso callado, delante de la luz, y es dueño del tiempo de donde nació el horizonte visual y anímico de los sinaloenses. La luz de Sinaloa tiene su casa en cada uno de sus lienzos.
Sobre el artista
Antonio López Sáenz nace en 1936 en el puerto de Mazatlán; pintor y escultor que ha plasmado el sabor de nuestra tierra en lienzos, barro y bronce. Su tierra es la mayor fuente de inspiración y está plasmada en cada pincelada de su obra. En manos de López Saénz las tinturas cobran forma de mujeres, hombres, barcos, mar y están llenas de vida, música de banda, béisbol y carnaval.
Los cuadros de López Sáenz son postales, llenas de memoria y añoranza; el mismo ha referido que pinta con lo que ha visto desde niño: los paisajes, los estampados de los vestidos de su mamá y sus tías que se reunían por las tardes a platicar sentadas en poltronas.
Los personajes en su obra no tienen rostro, así lo ha decidido López Saenz: dejar en el anonimato a quienes viven dentro de los lienzos, conociendo él solamente a los actores verdaderos de cada obra. Su infancia transcurrió en la playa en donde jugaba con sus amigos y fue ahí en donde encausó por primera vez su talento: sobre la arena.