En este mundo tan adverso, es necesario aprender a filosofar

Ofrece el maestro José Luis Rodríguez una charla sobre lo valioso de la filosofía en la resolución de problemas y la búsqueda de la felicidad

En un mundo tan adverso, cargado de violencia y de crisis constante, es necesario que la gente aprenda a filosofar, consideró el maestro José Luis Rodríguez.

Durante la charla ¿Qué es filosofía y para qué sirve?, que se llevó a cabo en la Sala de Formación Lectora del Instituto Sinaloense de Cultura, dentro del programa Los lectores cuentan, señaló que hay que enseñar a la gente a pensar, pues ahorita la gente no se da el tiempo para el pensamiento profundo.

“Sí piensa, pero es un pensamiento muy rápido, en un minuto todo, y se requiere un pensamiento, una reflexión más profunda”.

Rodríguez, Master en Filosofía, docente de la Facultad de Filosofía de la UAS, señaló que actualmente la sociedad tiene un problema muy grave respecto a cómo vive.

$!La conferencia se llevó a cabo en la Sala de Formación Lectora del ISIC.
La conferencia se llevó a cabo en la Sala de Formación Lectora del ISIC.

“El hombre, a través de la lectura, a través del signo, interpreta y ve la realidad de manera distinta, y es algo que ciertamente nos viene afectado, por las redes sociales en las que todo se hace manera rápida, nadie se presta a una reflexión profunda sobre las cosas, sobre la realidad que vivimos”.

Y continuó: “Sí piensan, pero no en el sentido que nosotros quisiéramos que se pensara; la filosofía es un pensamiento profundo sobre las cosas y cierta, todo mundo piensa pero no todo mundo sabe pensar y para pensar hay que ensayar. Así como se enseña a mezclar los colores en un taller de pintura, también la filosofía lleva un proceso y un método de pensamiento, como cuando uno aprende a andar en bicicleta: no me puedes empujar de una para aventarme al ruedo porque me voy a caer. . Antes se tiene que enseñar”.

En su caso, dijo, “fue la ciencia la que me llevo a estudiar filosofía; yo estudié primero en la Facultad de Química, y allí me preguntaba qué es un número, qué es una línea recta, hasta que un maestro me dijo que esas respuestas solo las podía encontrar en el mundo filosófico y por eso me inscribí en Filosofía”.

Indicó que “en cualquier texto aparece que la Filosofía es el amor a la sabiduría, como en la idea clásica de los griegos, pero después el concepto evolucionó hasta convertirse en la sabiduría misma., y en adelante se convierte en una vivencia y cada quien le va dando sentido según los problemas de su tiempo; para hacer filosofía y determinar qué es, de alguna manera tenemos que vivirla”

De hecho, finalizó, la filosofía sirve para vivir mejor, para llevar una vida más tranquila, para ser lo más feliz posible; desde Aristóteles, la idea central es de que el hombre tiende por naturaleza a alcanzar la felicidad, y esta no se alcanza desde la ignorancia, sino con sabiduría, ya que el saber de las cosas implica un conocimiento, y la filosofía le da sentido a Esos conocimientos, en la medida en que, si se presenta un problema en la sociedad, lo resuelvo de la mejor manera posible, sin afectar a los demás y sin afectarme a mí.