Resulta paradójico que México el socio comercial más importante sea a la vez una fuerte amenaza para la seguridad de los EEUU.
Fuertes reclamos
Nunca antes habíamos visto ese tipo de reclamos entre los congresistas y algunos gobernadores de EEUU contra un presidente mexicano y contra el suyo. Requerimos en efecto ajustar las políticas internas y las externas para prosperar pero ¿Qué más por la fuerza o negociando?
La ciudadanía desea conservar la democracia y sanar sus heridas políticas, pero se premia y apoya a los líderes de izquierda y se amenaza a los vecinos.
Hay varios asuntos internos que al salirse del control dañan a los propios y a los vecinos, uno de ellos es el narcotráfico, otro las caravanas de migrantes, el choque cultural, la falta de democracia y ahora el estilo presidencial, y en medio de todos ellos los ciudadanos que apechugan todo, como un sándwich.
Grandes socios
Pero antes veamos un hecho central que creemos marca las pautas: México y EEUU son los principales socios comerciales, superando a China y a Canadá.
Esto cuenta para lo estratégico, económico, político y para las próximas elecciones de ambos países. El T-MEC es el más grande del mundo.
El comercio entre EEUU y México sumó un récord histórico de casi 64 mil millones de dls. en enero actual. ¿La balanza? Ellos importaron productos de México por casi 37 mil millones de dls. y les exportamos casi 27 mil millones de dls. (U.S. Census Bureau).
De esto advertimos lo siguiente: 1. El comercio se acelerará por las tendencias y por la venida de Tesla con sus nuevos proveedores, 2. La inversión extranjera directa (IED) ha crecido notablemente, exportamos lo que producen en sus factorías como autos y bienes de alto valor, es más su dinero que el nuestro, 3. Sus ojos e intereses estarán más puestos aquí, 4. Los datos registrados se refieren a bienes y no incluyen, al parecer, los servicios ni las armas.
¿De dónde entra más dinero?
Mencionaremos una realidad no escrita: si se incluyese la exportación de narcóticos, la cifra total sería astronómica. Las armas y los narcóticos son otro “acuerdo” comercial debajo del agua, ver mi art. Seamos realistas y mejoremos México.
Las remesas “mantienen una racha de 9 años al alza”, superaron casi 66% a la inversión extranjera directa del 2022 ¿De cuánto hablamos? De 58.5 mil millones de dólares vs 35.3 mil millones de dólares de la IED (Datos: BBVA).
O sea, nos llega más dinero de la que gente que huye por la violencia y falta de oportunidades y porque los narcos las usan para enviar dinero. Esto importa porque la política sigue al poder y al dinero.
Somos socios estratégicos y vecinos, pero ¿Qué tan amigos somos? Aquí viene lo bueno.
Vecinos distantes
Preguntémonos ¿Cuál es el precio del comercio de drogas, armas y lavado de dinero? Sangre, dolor, terror, masacres, desapariciones, inseguridad, división, pueblos vacíos, costos en seguridad y ahora el enfrentamiento con nuestros socios.
Esto nos pega a todos, pero ¿Qué tanta resistencia hay para ajustar ambas políticas? Allá siguen permitiendo la venta de armas y no combaten el consumo de narcóticos, aquí se les envía droga, se consume y se matan impunemente ante un gobierno pasivo y cómplice.
Ante los reclamos de los congresistas al presidente mexicano las respuestas dejan mucho que desear, la socarronería y amenazas nada tienen que ver con la firmeza y la diplomacia.
EEUU tiene mucho peso aquí en la elección presidencial, el fentanilo es una plaga, la violencia fronteriza y las caravanas de indocumentados los tienen aterrados, una seria amenaza a la seguridad: sus hijos y los nuestros se están envenenando. Aquí las masacres y desapariciones son astronómicas y nos hemos mal acostumbrado.
El choque cultural
El choque de culturas nos hace vecinos distantes. La integran varios factores:
El nivel de tolerancia. Es la capacidad para combatir el mal y el desorden, se nota al cruzar la frontera. El alcalde de N.Y. Rudy Giuliani ganó fama por implantar la “tolerancia cero” y reducir la violencia. Basada en no permitir que el mínimo desorden propicie otros mayores, EEUU procesa penalmente más gente en el mundo.
Aquí impera la corrupción, “Segalmex se ha constituido como el hoyo negro de las finanzas de la 4 T” (El País, 21,02, 2023) pero cuidado se trata de robos de alimentos básicos para los más pobres y el “Huachicol” aumenta.
El disimulo. “Ojos que no ven, corazón que no siente”. Los soldados saludan a quienes siembran amapola, circulan libremente, se les permiten sus masacres y luego aparecen los forenses con uniformes blancos y nunca dan con los culpables. La mordida es el clásico disimulo.
La ideología. Qué paradoja, somos socios de los “neoliberales”. El presidente y la izquierda quieren adoctrinar a nuestros hijos con los libros de texto y no quieren que nadie se entrometa, sorprende la pasividad de los ciudadanos ante esto tan grave.
La izquierda propaga el odio, la división de clases, las mentiras, la desinformación, con la ignorancia y las dádivas consiguen sus votos. Están haciendo fanáticos y que nos dividamos.
No son tolerantes y se imponen por la fuerza y la chapuza, culpan al pasado para lavarse las manos. Un ardid para distraer y confundir a la gente, todo aquél que le diga una verdad evidente se convierte en enemigo, representa otros intereses. Inadmisible en un presidente sea quien sea.
Las caravanas de migrantes. Otra seria amenaza para ambos, pero ¿Quiénes financian traerlos de tan lejos numerosamente y alimentarlos? Quienes quieren desestabilizar.
Usadas como un arma de negociación, EEUU les devolvió la jugada: les ordenaron quedarse en México. Y son muchos. Se juegan su vida y la de su familia.
¿Necesitamos más para despertar? Parece que sí.