Disfrutan tercer concierto de la temporada 2022 de la OSSLA, en Culiacán
“La música nos pone de acuerdo y nos hace vivir en armonía” fueron las palabras del maestro Miguel Salmón Del Real, director de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, para dar inicio al tercer concierto de la Primera Temporada 2022, interpretando tres segundas sinfonías de los compositores Joseph Haydn, Ludwig Van Beethoven y Alexander Borodin.
Ante un nutrido público que se dio cita en Teatro Pablo de Villavicencio, la orquesta inició interpretando la Segunda Sinfonía de Haydn, dividida en tres movimientos Allegro, Andante en sol mayor y Presto, con las que el área de cuerdas envolvió a los presentes en un halo armónico, con una obra que desde el principio atrapó la atención del respetable, dejándose acariciar por los suaves sonidos emanados de los violines, violas, violoncellos, contrabajos y demás instrumentos.
Después de 10 minutos de esta armoniosa introducción a lo que se volvería una noche inolvidable, la orquesta continuó con su programación, interpretando esta vez la Sinfonía Número 2 en Re Mayor de Ludwig Van Beethoven.
La obra fue compuesta entre 1801 y 1802, dedicada a uno de sus más importantes amigos y protectores de Beethoven, el Príncipe Lichnowsky, y fue estrenada bajo la dirección del compositor el 5 de abril de 1803 en el Teatro An de Wein de la capital austriaca.
La pieza interpretada magistralmente por la orquesta, se desarrolló en cuatro movimientos Adagio molto: Allegro con brio, Larghetto, Scherzo: Allegro, y Allegro molto.
La Segunda Sinfonía de Beethoven fue escrita en mayor parte en la estadía de Beethoven en Heiligenstadt en 1802, cuando comenzó a experimentar los primeros síntomas de sordera. Beethoven escribió la Segunda Sinfonía sin un estándar minuet; un scherzo ( Movimiento fijo, de compás rápido, comúnmente en tres por cuatro, que forma parte de la sonata y la sinfonía) el cual tomó su lugar, que dio a dicha composición un gran alcance y energía.
Tras una breve pausa, la orquesta cerró la velada musical en el Pablo de Villavicencio, interpretando la Sinfonía Número 2 del compositor Alexander Borodin, compuesta entre 1869 y 1876, considerada la obra más importante completada por el propio compositor, dividida en cuatro movimientos Allegro moderato, Scherzo: Prestissimo, Andante, y Finale: Allegro.
La obra posee un fuerte carácter ruso. Borodin concibió su Segunda sinfonía como una pieza de música abstracta. El primer movimiento, según ese programa, debía representar una asamblea de príncipes y guerreros rusos del siglo XI. El tercer movimiento habría de referirse a las canciones de los trovadores eslavos, y el cuarto describiría los banquetes de los héroes de la mitología rusa.
Lo cierto es que, a pesar de todas estas historias y descripciones, la sinfonía de Borodin es fundamentalmente considerada una obra abstracta de gran vigor rítmico y una fluida invención melódica, que la noche de este jueves simplemente conquistó el oído, cerrando así un concierto más de esta temporada 2022.
Cabe señalar que los próximos conciertos del ciclo de música de cámara, serán los días 22 de marzo en la biblioteca Gilberto Owen, 24 de marzo en el Ágora del Isic, y el 29 de marzo en el Museo de Arte de Sinaloa. Los conciertos 6, 7 y 8 son de entrada libre.