Desde hace 71 años, las nieves de garrafa de don Juan del Santuario siguen siendo el postre preferido de los culiacanenses
Sobre la esquina de Ángel Flores y Donato Guerra, resalta un personaje que desde hace 17 años se dedica a alegrar el paladar de los sinaloenses, ofreciendo a la venta la rica nieve de garrafa, él es Humberto Félix Gálvez.
Ahí, con una pequeña carreta, y una gran sombrilla para cubrirse del fuerte sol, el comerciante comentó que Nieves La Tapatía de Don Juan del Santuario es un negocio que empezó desde 1950, por Juan Santacruz, cuando Culiacán literalmente era un rancho.
“Desde 1950 este ha sido el lugar donde don Juan empezó a vender la tradicional nieve de garrafa, un helado 100 por ciento hecho de manera artesanal por su elaboración manual; elaborada en garrafas y cubetas de madera, donde la mezcla es realizada con hielo, sal, y estas pueden ser en base de agua o leche según el sabor deseado, dicha mezcla se bate en la garrafa con una manivela hasta darle el sabor característico”.
“La gente me dice que las nieves están muy buenas, las comparan con las mejores del mundo, y para nosotros es un halago, y para mí trabajar en esto es una satisfacción, porque mucha gente te conoce, te ubica, y es una satisfacción que la gente me tenga aprecio”.
El comerciante de este postre, dijo que ya son muchos los clientes que diariamente los visitan para pedirle una nieve y considera que es una visita obligada si transitan por el sector del centro, o cuando visitan El Santuario.
Su sabor tradicional
Humberto Félix Gálvez resaltó que desde hace 17 años tiene a su cargo la venta de la nieve en ese lugar, bajo la escalinata del Santuario del Sagrado Corazón de Jesús y ofrece los sabores tradicionales de vainilla, ciruela y limón, con sus dos tipos de conos, aunque mencionó que preparan de otros sabores cuando se trata de pedidos especiales, o para algún evento.
“Aunque sea época de frío en Culiacán, las nieves de garrafa son uno de los snacks que suelen disfrutarse durante el día”.
La preparación de las nieves tarda en promedio de una a hora y media para dejarla a punto y venderla al público.
“Desde las 10:00 de la mañana y hasta las 20:00 horas, y los mejores días de venta son los domingos”.
Para saber
Los lugares más característicos en México por su elaboración de nieves son Tepoztlán en Morelos, Oaxaca, donde se preparan de leche quemada, tequila o mezcal y en Pátzcuaro, Michoacán, donde se prepara una tradicional nieve de pasta, de consistencia cremosa.
Hoy en día las nieves artesanales más características son de frutos que se cultivan en el país, como limón, guanábana, mamey, coco, mango y fresa.
Su elaboración manual y por lo tanto artesanal, implica mucho esfuerzo, además de que para que sea de las buenas, debe de ser elaborada con frutas de temporada, ahí está toda la creatividad, estas se hacen dando vueltas y vueltas a los ingredientes precisamente al interior de una garrafa.
Dentro de ésta hay una barrica, y ésta y la garrafa, están divididas por hielo con sal de grano para que el hielo no se derrita. Dependiendo de su contenido, puede llegar a tardarse de 90 minutos a 2 horas en quedar lista.