Comparte Ernesto Hernández Norzagaray sus ‘Razones para amar a Mazatlán’
Ante un grupo de amigos y familiares, y a ritmo del Carnaval, el politólogo Ernesto Hernández Norzagaray presentó su libro Razones para amar a Mazatlán (Editorial UAS), en la Galería Ángela Peralta.
El más reciente libro del escritor y catedrático sinaloense expone sus 18 razones de su vida para amar al puerto, lugar en el cual ha radicado desde hace 45 años.
El también columnista de Noroeste describe sus pasajes de vida en los cuales aborda la historia, costumbres, personajes, sindicaturas, pueblos, entre otros temas, que envuelven y forman el Mazatlán de hoy.
En la presentación la escritora Aleyda Rojo y el ex catedrático Luis Antonio Martínez Peña, quienes acompañaron al escritor, dieron detalles de la obra, la cual describe una gran prosa, llena de poesía.
“Si un día te sorprendes pensando en sustituir una cita laboral con una reunión con tus amigos en Olas Altas, es porque tu vida y costumbres cambiaron y ya piensas en mazatleco, una patología que altera nacionales en un día, o unas horas, y te vuelve adicto del puerto sinaloense para siempre, como lo sentencia el célebre poema de Constantino Calafi, La ciudad, prepárate para envejecer en las mismas calles y en los mismos patios”, explicó a los presentes Aleyda Rojo.
“Y si desconfías de mis palabras, el libro Razones para amar a Mazatlán, de Ernesto Hernández Norzagaray te ofrece una especie de homenajes, pero también es un manual para comprender mejor el sentir y el ser mazatleco, ya es mucho decir que un politólogo apasionado como Hernández Norzagaray abandone el análisis frío para dejarse envolver en la ensoñación de una prosa muy rica y al rato poética en donde se funden la historia con las costumbres, los personajes con las sindicaturas y los pueblos mágicos, los manjares de la mesa con las adquisiciones intelectuales, la enorme meca cultural del sur de Sinaloa con su patrimonio que reúne la práctica del Ulama, así como los acontecimientos que sacudieron los cimientos de esta tierra en el Siglo 19, como las pestes amarilla y la borbónica”, dijo.
La obra, comentó, es tan rica en historia verídica del mismo autor, que hace que sea de interés para quien lo lee.
“Sus sucesos más caseros, con el rapto de una peca del Carnaval y los versos que trovadores, poetas, narradores, gente de barrio y de las capitales mundiales le han brindado con interés a esta ciudad y puerto que sonríe hasta en la configuración de su misma bahía, no será posible visitar o vivir en Mazatlán sin leer este libro, aquí están servidas en bandeja de papel y tinta todas las claves para sostener una conversación, una entrevista, una conquista, una seducción, con el mazatleco más recalcitrante, quieren saber de los historiadores, cronistas, autores, fotógrafos, pintores y demás personalidades que por capricho, accidente, reflexión profunda, quisieron acostar su plumas, pinceles y ángulos por Mazatlán, a ellos también los encontrarás ”, comentó.
Por su parte, Luis Antonio Martínez Peña describe un trabajo lleno de bellos atardeceres y hermosos ocasos que envuelve a quien visita el puerto o lo adopta.
“El libro es un relato sustentado en 18 razones de él, que nos describe para amar a Mazatlán, sin embargo, nos regala su amor por Mazatlán, pero también nos da un regalo muy importante que es su experiencia de vida como académico, como escritor, esposo, padre de familia, de un hombre que llegó aquí en 1977 a Mazatlán, procedente de la Ciudad de México, y que nació al norte del Estado, en Los Mochis, y quien llegó a trabajar a la recién fundada Escuela de Ciencias Sociales, y quiero decirle que fue mi maestro y quise expresar esa experiencia mía”, compartió.
“Ernesto Hernández Norzagaray es un ejemplo de tesón, de trabajo, de entrega, de realizar sus actividades, de estar al día escribiendo, estando presente en una editorial llevando a cabo una tarea tan importante, y en su experiencia de vida tuvo la fortuna de encontrarse con una mujer mazatleca como lo es la doctora Lorena Schobert Lizárraga, y crear una familia; estamos hablando de una persona que llegó aquí, se arraigó, como muchos otros, y de alguna forma u otra, los que estamos aquí tenemos una raíz muy profunda en Mazatlán, una ciudad que nos recibe, nos adopta, nos cobija y nos da la oportunidad de vivir dignamente frente al mar y vibrar de esos amaneceres y de esos ocasos, ver de posibilidad de encontrar un gran atardecer, aquí en este libro nosotros vamos a encontrar ese sentimiento de ir conociendo una ciudad paso a paso”, aseguró.
El autor en su libro hace un homenaje a algunos de sus amigos como León Loya, Armando Galván, así como a escritores como José Luis Franco Rodríguez y Juan José Rodríguez, pero también a artistas plásticos que van desde Antonio López Sáenz, pasando por Lucy Santiago, Roberto Pérez Rubio, quienes han contribuido con el crecimiento y la cultura del puerto.
Describe las travesía que hicieron aquí personajes como Pablo Neruda, Amado Nervo, Enrique González Martínez, entre otros.
“Hay muchas razones, miles para amar a Mazatlán, hay quienes puedan tener otras, pero cada uno tiene sus propias razones, y por sus propias experiencias ama al puerto”, les comentó Hernández Norzagaray, quien agradeció la presencia de sus amigos entre los que se encontraban los catedráticos de la UAS, Melesio Cuen, Víctor Antonio Corrales e Igor Lizárraga.
Al final, los presentes disfrutaron de una coreografía presentada por un grupo de bailarines que bailan al ritmo de música guapachosa.
Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.