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Literatura

Celebra Julieta Montero 50 años de trayectoria con poemario

La poetisa y columnista de Noroeste presentó su libro ‘Quizás agua’, en la biblioteca Jaime Martuscelli Quintana, ante alumnos de la UAdeO

Una tarde literaria, muy enriquecedora y llena de anécdotas sobre lo vivido en torno a su trayectoria pasó la poetisa y columnista de Noroeste, Julieta Montero, junto a alumnos de la Universidad Autónoma de Occidente.

Los chicos estudiantes de Nutriología de la institución realizaron un homenaje a la escritora, quién celebró sus 50 años de trayectoria con la presentación de su última obra literaria en donde realiza la recopilación de sus poemas.

Los jóvenes Quichet Bernal, Nelly Tek, José Morales, Patricia Jaime e Iván López, fueron los encargados del conversatorio que se realizó en la biblioteca Jaime Martuscelli Quintana, del plantel.

La bienvenida a los asistentes la realizaron María de los Ángeles Arce Llamas, directora de la Unidad Regional Mazatlán de la UAdeO; Delia Guadalupe García González, encargada de la biblioteca; Lorena Fabiola Balbuena Estarrona, subdirectora académica y la profesora del plantel Silvia Michel Acosta.

En el conversatorio, la escritora les comentó que escribe poesía desde pequeña.

"Desde quinto año de primaria empecé a escribir, estaba pequeña” , les comentó.

En la reunión se habló sobre el miedo a la denominada “página en blanco”, esa que en ocasiones sufren los escritores.

"Creo que todo artista cree que tiene ese tipo de situación. Si tenemos bloqueos, pero a veces te sientas y el mismo texto te lleva, te va llevando de la mano, hasta que lo terminas”, les dijo.

"El texto te va conduciendo y te dejas guiar. Aún así, ya publicado y releyendo un libro, cómo este (Quizás agua), te das cuenta que hay errores, sí sucede”.

Para la poesía comentó que no hay lugar, ni momento, sólo surgen las ideas.

"En cualquier momento surge la poesía, no hay un lugar, ni sabes en qué momento “, dijo.

Y les contó una anécdota donde le surgió una idea de un poema, está fue cuando estaba en un semáforo y no notó que ya había cambiado la luz a verde y los demás conductores le hicieron sonar su claxon y se movió hasta que terminó la idea, aunque llegó a su casa a leerlo y perfeccionarlo.

"Yo terminé de escribirlo, me dije que me pasen por un lado, que al final si tenían espacio para pasar. Así que no hay momento justo, el mismo poema te lleva”, les aseguró.

En una dinámica que sostuvo con los alumnos e invitados especiales, algunos asistentes leyeron poemas plasmados en el libro Quizás agua y de algunos otros.

"Nunca tengo música, ni nada, escribo en el silencio, en la tranquilidad, en la soledad, ahí se hacen las cosas”.

A la pregunta de cuál de todos sus poemas es su preferido, comentó que no tiene ninguno.

"Son tantos los poemas; hace poco saque algunos que tenía guardados y no podía creer que son cómo 3 mil poemas los que llevo, y ya no me acuerdo de todos, son muchísimos los poemas que se van, pero hay uno sobre el ofició del poeta y uno sobre la gramática de la piel que siempre recuerdo”, dijo, y el cual declamó en ese momento.

Así, muchos de los asistentes leyeron poemas de la escritora, que gustosa compartió anécdotas de cómo y cuándo fueron escritos.

María de los Ángeles Arce Llamas, directora de la Unidad Regional Mazatlán de la UAdeO, fue una de las que leyó un poema.

"Estamos leyendo poemas de la escritora y creo que cada uno nos mueve, nos enchina la piel y nos hace sentir algo, nos sumerge en este mundo de emociones al leer un poema”, le dijo la profesora Arce Llamas.

La escritora agradeció el espacio brindado por la universidad para que los jóvenes conozcan su trabajo, más aún que haya sido en un espacio como la biblioteca, ya que fue entre libros.

Al final, Arce Llamas y Silvia Michel Acosta, hicieron entrega de un reconocimiento a la expositora.