"A 31 años de su muerte: Juan Rulfo, de la escritura a sus otras pasiones"
Melissa Sánchez
A Juan Rulfo no le atraía ser el blanco de las miradas y sin embargo sus obras lo convirtieron en uno de los escritores latinoamericanos más admirados del Siglo 20.
A unos meses del centenario de su natalicio, aún es bien recordado por su libro "El llano en llamas" (1953), una colección de cuentos; y las novelas "Pedro Páramo" (1955) y "El gallo de oro" (1980, primera edición).
El autor de Sayula, Jalisco, nacido el 16 de mayo de 1917, se convirtió en un parteaguas de la literatura mexicana al marcar el fin de la novela revolucionaria y dar paso al realismo mágico.
Sin embargo, Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno no solo se destacó en las letras, sino también como un prolífico fotógrafo y ocasional guionista de cine. Algunos de sus relatos incluso han llegado a la pantalla grande, como "El gallo de oro" (1964), adaptado por Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez, y dirigida por Roberto Gavaldón.
Por el 31 aniversario luctuoso de Juan Rulfo, fallecido el 7 de enero de 1986 en la Ciudad de México, a causa de un cáncer de pulmón, recordemos su legado y algunas de sus pasiones.
Con información de Fundación Juan Rulfo
REALISMO MÁGICO
Juan Rulfo es considerado uno de los padres del realismo mágico, el movimiento literario de mediados del Siglo 20 que se distinguía por el interés de mostrar lo irreal o extraño como algo cotidiano y común. Esto queda de manifiesto en su libro "Pedro Páramo" (1955), una de las novelas cumbre de la lituratura en lengua castellana.
RULFO, EL FOTÓGRAFO
El jaliscience encontró en la fotografía otra de sus pasiones y así lo muestra el registro de imágenes que empezó a crear desde los años 30 y que combinó con la escritura. Uno de los temas recurrentes en sus fotos era la arquitectura de México. Incluso, en 2010 se publicó un libro de gran formato llamado "100 fotografías de Juan Rulfo", que recoje parte de su trabajo con la lente.
SUS ADMIRADORES
Es el escritor mexicano más reconocido en el País y en el extranjero, así que no es de extrañar que entre sus admiradores estuvieran también otros autores lationoamericanos, como Carlos Fuentes, Jorge Luis Borges, Gabriel García Márquez y Mario Benedetti, entre otros. En alguna ocasión, el colombiano García Márquez señaló que haber leído "Pedro Páramo" fue determinante para la creación de "Cien años de soledad", una de sus novelas más célebres.
CARTAS A CLARA
A principios de los 40 conoció a la que más tarde se convertiría en su esposa, Clara Angelina Aparicio Reyes. La correspondencia entre el joven Juan Rulfo y su entonces novia ya daba muestras de la intensidad, lucidez, ironía y profundidad que caracterizarían a su posterior obra; y quedó contenida en el libro "Aire de las colinas. Cartas a Clara", publicado en el año 2000.
LA OTRA CARA DEL ESCRITOR
Interesado desde joven en la bibliografía histórica, antropológica y geográfica del País, Juan Rulfo dedicó las últimas dos décadas de su vida a su trabajo en el Instituto Nacional Indigenista de México, donde se encargó de la edición de una de las colecciones más importantes de antropología contemporánea y antigua de México.