Pescadores de Escuinapa inician la temporada de camarón con esperanza
ESCUINAPA._ Sin expectativas, pero con esperanza, un grupo de pescadores partió estero adentro al sitio conocido como “Romero”, cerca del Cerro de las Cabras, para iniciar las capturas de camarón.
Los socios de la cooperativa “El Nanchito”, originarios de Pozole, Rosario, llegaron al sitio pesquero para subir a las embarcaciones con catres, tanques de gas y alimentos que consumirán desde este miércoles hasta el sábado.
“Decidimos empezar hoy con calma, para el producto que hay que es poco, ya tenemos todo allá, todo lo comestible necesario está en el sitio pesquero ‘Romero’, nos quedamos allá y salimos el sábado”, dijo Reyes Salinas Uribe.
Ellos han cuidado en el sitio, han hecho sus enramadas durante dos fines de semana, han hecho muestreos y van a esta temporada sin expectativas y sin engaños: saben que camarón no hay.
Los pescadores darán tiempo en estos tres días para saber cómo estará la temporada y si valdrá o no la pena quedarse más tiempo o definitivamente irse de nuevo a casa.
Esto de ir a quedarse a “Romero” es algo que años atrás los pescadores lo hacían; cuando la bonanza de camarón hacía que juntaran toneladas, los pescadores iban y se quedaban semanas, precisó Reyes.
“Salimos como a las 3:00 o 4:00 de la tarde a pescar, regresamos al sitio como a las 12:00 o vienes y entregas el producto si hay, así lo haces hasta que sales”, explico.
Si encuentran camarón, mientras unos se van a descansar, otros más se quedan a cuidar en lo que regresan los que se fueron y así es hasta que se termina la temporada.
Algo que no hicieron ni por intento el año pasado, porque el camarón simplemente no lo vieron, no había producto, por lo que no invirtieron en alimentos ni en nada para irse a estar la temporada en ese lugar.
“Llevamos tortas (pan), machaca, frijoles, huevos, el sábado salimos o mandamos a uno en moto por tierra, somos 18”, dijo uno de los pescadores que cargaba con enseres la embarcación.
En ese sitio pesquero, que está alejado de todo y pegado al Cerro de las Cabras, colindando ya con la zona de Rosario, aprovechan para descansar de todo.