Pedro y Rosa Elena cumplen 46 años visitando a su angelito Pedro Luis
EL ROSARIO._ Mientras Rosa Elena Beltrán Gurrola contempla la cruz sobre la tumba de su hijo, su esposo Pedro Gaytán Aguilar trabaja con una azadón en la sepultura del que fuera su primogénito Pedro Luis, un angelito que falleció a los seis días de nacido.
Desde hace 46 años acuden al panteón municipal desde temprana hora para limpiar la tumba, ponerle flores y encender velas como signo de su filial amor.
Los vecinos de Chilillos afirmaron que no ha pasado un año sin que acudan a acompañarlo, incluso acuden dos veces al año, el día de su nacimiento en agosto y este día de los angelitos.
“Seis días tenía, estaba chiquito. (Falleció) la enfermedad esa de los niños que le dicen musuzuelo, no sé, algo así del ombligo. Venimos y siempre se siente triste de venir y recordar”, afirma el padre con pesar.
Recordaron que apenas ella tenía 16 años y él 19 años cuando pasaron de la dulce espera de su primogénito a perderlo por una infección en el ombligo por lo que nadie los preparó.
Rosa asegura que se sobrelleva la pérdida, pero nunca se supera, a pesar de que después tuvieron seis hijos más, dos mujeres y cuatro hombres.
“Siempre uno siente algo, la verdad, porque es una pérdida que no se recupera... Lo recuerda uno como sea siempre”, argumentó Rosa Elena.
A pesar de que llegan desde las 6:00 horas para ganarle al sol, pasan horas como quien visita a un ser amado y no se quisiera despedir.
Concluyeron que seguirán acudiendo a visitar a su hijo mientras la salud y las fuerzas así lo permitan.