En Escuinapa, Mireya busca apoyo para trasladar y sepultar a su hijo en Huajicori, Nayarit

ESCUINAPA._ Mireya Cumplido Flores llegó desde la sierra de Nayarit acompañando a su familia para trabajar en los campos agrícola sin imaginar que estaría también junto a ellos en las puertas del Hospital IMSS Bienestar buscando recursos para sepultar a su hijo, un bebé de 5 meses.

Álvaro, su segundo hijo, con 5 meses de edad, se convirtió en el primer caso del año en una muerte de infante, hijo de jornaleros agrícolas a causa de una deshidratación.

“Tenia calentura primero, se le quitó y de ahí diarrea, se le quitó, andaba como asustado nada más, ya lo habíamos traído, decían que estaba bien, ayer lo volvimos a traer a la Isla, el doctor nos dijo que estaba grave y nos lo trajimos acá (al Hospital IMSS Bienestar)”, explica Mireya.

El niño murió durante la madrugada de este lunes, casi 12 horas después de haber ingresado al Hospital IMSS Bienestar; Mireya no entiende bien que pasó, no sabe si fue bronquitis o alguna infección en el estomago.

Mireya esconde su rostro entre las manos, mientras su familia habla, no lo entiende y solo aplana de pronto sus pechos que aún emanan leche materna, que era con lo que alimentaba a su hijo.

Todos hablan a la vez, la familia está reunida, desde las primeras horas de este lunes clamaban a través de redes sociales la ayuda para poder trasladar al niño a Huajicori, cerca de su tierra San Andrés Milpilla, que esta en la sierra de Nayarit, a 3 horas del municipio de Huajicori.

“Antier llegué, me encontré a mi nieta así, nos venimos con el niño, ahora no sabemos que hacer, sin dinero, no conocemos nada de eso, no sabemos donde ir”, expresa la bisabuela del niño, Aurelia Cumplido de la Cruz.

A mediodía les avisaron que el municipio de Huajicori donaría el ataúd y el traslado para el funeral, lo aceptaron, pues es mejor tenerlo allá, señalan, aunque de momento está viviendo en Isla del Bosque, el niño estará cerca de ellos cuando regresen a su tierra.

No quieren dejarlo en el camposanto de Isla del Bosque, donde cada año muchos niños hijos de jornaleros quedan sepultados, es mejor tenerlo cerca para llevarle flores, indican.

Ellos se fueron con la funeraria y en camión, solo es irse de momento, pues, aunque el campo sinaloense no les esté dando mucho de momento debido al bajo precio de las hortalizas, es más que lo que pueden tener en su tierra, donde de momento trabajo no hay.

“Vamos y nos regresamos, allá no hay trabajo”, expresa la señora Aurelia.

Mientras esperaban que se terminaran los tramites, el secretario de Presidencia Roberto Omaña Domínguez y la directora de Atención Ciudadana Kimberly Grave estuvieron con las familias, a quienes otorgaron un apoyo económico para que pudieran irse junto con el niño.

Las familias que habitan cuarterías y en una parcela entre Isla del Bosque y Teacapán, se despidieron así del niño menor de la familia Flores Cumplido, un niño que al parecer tuvo como causa de deceso una deshidratación.