El mango de Escuinapa, un corte especial para llegar hasta Japón
ESCUINAPA. _ Aunque el calor por la humedad ronda los 42 grados, entre los árboles de mango el ambiente se siente aún más sofocado, pero la fruta debe cortarse.
Entre los árboles de mango, se mantienen descalzos pero firmes hombres de estatura media o baja, están entre las ramas, buscando el menor golpe a la fruta, pues el mango no se quedará en la localidad ni cruzará la frontera a Estados Unidos.
Este mango escuinapense de variedad Haden, Tommy o Kent se irá a Japón o a Canadá, el interés del mercado es otro, lo quieren sin golpes, pero también con poco proceso de industria, se tiene que dejar lo más fresco posible.
De los árboles se baja con canasta, es cortado con una canastilla de ixtle, amarrado a lo que llaman “lata”, que es un palo al que se adhiere la “bolsa o canastilla” hecha de manera artesanal.
No es un trabajo fácil, pero es algo a lo que ya están acostumbrados, señalan jornaleros que vienen de Chiapas, en su estado los árboles son de mayor altitud.
“Aquí andamos cortando mangos... aquí están más pequeños (los árboles)” expresa Salvador Martín López, quien parece adherido a las ramas del mango en que trabaja.
Este mango se irá a Canadá, en el caso del mango que se llevara a Japón el corte es similar pero el mango tiene un tratamiento bajando del árbol, pues se coloca sobre mesas que tienen hoyos para quitar la goma del fruto y limpiarse ahí mismo, precisa el dirigente de la CNC, Rogelio Padilla Salcido.
“A Japón se va un mango ‘chapeado’ con color, bien seleccionado, hay un cuidado en el corte, se corta con tijera, se pone en una plataforma para que se desleche, es un gasto fuerte, sí, pero se paga bien al productor”, explica.
El precio por kilogramo puede estar entre los 8 y 15 pesos, pero no toda la fruta se lleva, es una fruta seleccionada y la preferencia por color que tiene la fruta es la variedad Kent.
Indicó que la fruta no se exporta desde el municipio, quien corta son empacadores michoacanos, que rentan en ocasiones empaques en el municipio para mandar la fruta.
“Canadá solo pide la fruta con prelavado, 5 minutos en el jidro para quemar enfermedad y ya, la variedad fuerte en Canadá es Haden, poco Tommy y Ken no lo piden, ese no se exporta”, explicó.
La fruta que cae o se golpea no sirve, por eso se tiene que tener especial cuidado en el corte, generalmente esto lo hacen jornaleros que vienen del sur, pero ya quienes trabajan en el campo en los municipios del sur, ya también están aprendiendo la técnica.
Precisó que de 20 millones de cajas que se tuvo de exportación el año pasado al extranjero, un 15 por ciento corresponde a Canadá y Japón, la mayor parte se va a Estados Unidos.