Dora dona vestido a la Virgen de la Candelaria en gratitud y para continuar el legado de su padre
EL ROSARIO._ La gratitud de tantos favores recibidos, además de dar continuidad al legado de devoción que desde hace 40 años le dio su padre, Dora Elva López Vizcarra asegura que fueron los motivos para vestir a la Virgen de la Candelaria en Matatán.
La vecina de la cabecera municipal refirió que este atuendo tiene un valor aún más especial al realizarlo con sus propias manos para la Solemnidad Mariana del Pueblo que la vio nacer.

Un vestido para la virgen en color lila, un manto azul rey y aplicaciones en color blanco, y un ropón en azul para el niño Jesús, elaboró Dora Elva.
“Le hice ese vestido a la Virgen en agradecimiento de todo lo que nos da, de todo lo que está con nosotros, nos protege, nos cuida. Y pues soy una persona que siempre colaboro para la iglesia”, explicó.
Reconoce que aprendió el oficio de la costura, ya que su profesión había sido la contabilidad, misma que desarrolló toda su vida.
La elaboración le llevó tres meses de trabajo, desde seleccionar las telas hasta su confección; todo esto en colaboración con su sobrino Octavio López, seminarista de la Diócesis de Mazatlán.

“Me siento muy contenta, me siento emocionada de tener la oportunidad de tener y de cumplir una promesa realmente”.
No obstante, explicó que cada año, desde hace cuatro décadas, viene otorgando el vestido para la virgen dolorosa y el niño Jesús propios de la Semana Santa.
Dora Elva señaló que esta devoción la aprendió de su padre Félix López Zamudio, y fue tras su fallecimiento cuando decidió darle puntual seguimiento.
“Ya que falleció mi papá, de eso hace más o menos 40 años, me he encargado de lo que él donaba a la iglesia y hasta la fecha lo sigo haciendo, hasta que Dios me dé vida y salud para seguir haciéndolo”, concluyó.