Philadelphia 76ers se saca de encima una mochila de presión y demuele a Toronto Raptors
Luego de jugar un primer tiempo con muchas dudas y que lució como una continuidad de los dos partidos anteriores (aún con una ventaja mínima en el marcador), los Philadelphia 76ers por fin se sacaron de encima a sus fantasmas y definieron la serie ante los Toronto Raptors con un contundente 132-97. El invicto de la ventaja 3-0 sigue con vida en la NBA.
El quiebre de los Sixers en la segunda mitad tuvo a un protagonista principal: Tyrese Maxey. Con una seguidilla de tres conversiones externas, el base lideró una ráfaga de 17-0 para abrir el tercer periodo que terminó con la resistencia de los Raptors y soltó por completo a Philadelphia para el resto de la noche.
Maxey terminó con 25 puntos y 8 asistencias y una vez más demostró su valentía (y hasta cierta inconsciencia) para esta clase de momentos calientes. La diferencia para los 76ers ante la amenaza de debacle entre 2021 y 2022, fue que el año pasado tuvieron con la bola a un jugador que devorado por la presión como Ben Simmons y éste, a un joven como Maxey capaz de dar un paso adelante cuando más se lo necesitaba.
El otro integrante de la media-cancha de los 76ers, James Harden, también fue fundamental para la victoria. Embiid le había pedido que sea más agresivo y el exNets respondió con creces desde el minuto cero, atacando una y otra vez el aro como hace tiempo no lo hacía. Si bien sufrió defensivamente ante Pascal Siakam (lo buscó varias veces en los cambios de picks), La Barba jugó como una estrella y acabó con 22 puntos, 15 asistencias y un 7-12 de cancha.
Claro que el máximo anotador de Philadelphia no fue Maxey ni Harden sino Joel Embiid, autor de 33 puntos con 10 rebotes y un 12-18 de campo. Eso sí, sus mejores pasajes del partido llegaron con la historia sentenciada en la segunda mitad, mientras que en la primera había sido determinante en ataque, pero mostrado otra vez falencias claras en defensa que Toronto supo exponer. Sea por su falta de seguridad en el rebote o con un Scottie Barnes que le ganó varias veces en el uno contra uno. Embiid, como todo Philadelphia, lavó su imagen en la segunda mitad.
Tobias Harris terminó con 19 puntos y 11 rebotes, mientras que Danny Green fue clave para mantener a flote a los de Doc Rivers en el segundo cuarto: sus 12 puntos y 4 triples llegaron en ese tramo en el que Toronto parecía tomar el control del partido.
En los Raptors, que volvieron a presentarse sin Fred VanVleet, no alcanzaron los 25 puntos y 10 rebotes que trajo Chris Boucher desde el banco, los 24 tantos, 7 rebotes y 7 asistencias de Pascal Siakam, las 19 unidades de Gary Trent Jr. ni las 18 de Scottie Barnes.
Philadelphia se sacó una enorme mochila de encima y terminó resolviendo con holgura una serie que arrancó siendo de ensueño pero que amenazaba con transformarse en una pesadilla. Ahora será el turno de enfrentar a un Miami Heat contra el que irán claramente como punto, poniendo frente a frente a dos amigos como Joel Embiid y el ex 76ers Jimmy Butler.
(Con información de NBA)
